Son once. Muy guapos. Visten con mucha clase. Increiblemente listos. Y, ahora, hasta tienen muy buen corazón. Pero los creadores de esta pelicula tienen muy poca vergüenza porque, en vez de timar al gran Al Pacino, nos han timado a nosotros. Tanto el director como los guionistas han decidido pasar olímpicamente de un argumento sólido para, en vez de eso, ofrecernos un batiburrillo de sketches sin ninguna gracia. Pero eso sí: todos salen muy guapos.
Estos chicos pueden con todo y con todos y jamás tienen un momento de debilidad o de fatiga. No hay golpe que no puedan dar ni tipejo al que no puedan timar y sí, siempre salen muy guapos. Solo tienen una pega: que no tienen ni p... gracia.
A James Bond alguna vez lo trincaba el malo de turno. A Indiana Jones lo molían a palos. Pero a los chicos de Ocean jamás los verás en ninguna de estas porque jamás cometen errores. Casi diría que son inmortales. Y, a este paso, veo que la siguiente entrega será ver a los chicos de Ocean dirigiendose al tercer mundo para acabar con la pobreza y el hambre que seguro que lo consiguen. Y siempre muy guapos.
Pues eso, que me quedo con el equipo A. Serán todo lo cutre que quieras pero al menos me caen mucho mejor.

La sección "últimas incorporaciones" que posee esta página es una fuente inagotable para conocer películas de las que nunca antes habías oído hablar. Cada cierto tiempo voy entrando y me suelo quedar con el título de algunas. Luego, todas las apuntadas, han de pasar un filtro que no es más que buscar información de ellas en otras páginas de cine y de ahí, las que aguantan la criba, serán las que finalmente busque para poder verlas. Como es el caso de esta.
La portada, el año de producción, el título, la trama, el tufo a peli de serie b de culto... todas esas cosas me llamaron la atención de esta película. No esperaba gran cosa y poca cosa me dieron. O sea, que una más para el bote y tan amigos.
La película presenta una buena idea (los efectos de una droga que cierta gente consumió les hace convertirse en psicópatas ¡calvos!) que, ya sea por el bajo presupuesto o por la endeblez del guión a medida que va avanzando la historia, no se consolida del todo. Sus primeros veinte minutos no están nada mal, incluyendo unos originales títulos de crédito, pero de ahí hasta el final la cosa va bajando hasta rozar el despropósito. Y a esto no ayuda para nada ni la labor actoral (el protagonista a veces da la sensación de sufrir el síndrome de Tourette) ni los pocos efectos especiales que hay (me refiero a la alopecia que sufren los afectados, ¡hombre! no pido que se afeiten todos la cabeza como si fueran actores del método, pero la cosa canta que no veas).
En fin, una película desconocida (al menos para mí) con la cual, ante alguna conversación de pelis de serie b, podré decir: oye, ¿te suena esa de los psicópatas que eran calvos?

Tú me recomendaste esta película diciéndome que estaba bién y que te había gustado, y bueno... sí... se puede ver. Me dijiste que había sexo, y sí... bueno... algo hay pero tampoco mucho y no muy "caliente". También me dijiste que hablaba del amor y de esas "cosas" pero la verdad es que es tan ligerito de lo qué se habla que apenas uno se emociona y ni siquiera te paras a pensar en lo que ha sucedido en toda la película.
No hay pretensiones y eso está bién. Es muy corta y eso está bién. Se hace un poco larga y eso no está muy bién.
O sea, resumiendo, que te agradezco tu recomendación. Que más o menos pasé un rato entretenido (mínimo exigible) y eso siempre es importante. Pero, aún así, me pregunto que otra película me hubieras recomendado si te hubiera dicho que no me apetecía mucho ver esta.

Gracias a Dios que tenemos al señor Iñárritu para decirnos quienes son los buenos y quienes son los malos. Antes de entrar al cine teníamos nociones de lo que era la vida pero viene el señor Iñárritu y nos dice: ¡ojo!, las cosas son como yo las veo no como vosotros pensáis. Porque él no hace películas, no. Él hace autenticas verdades como puños. Él nos instruye con su pretenciosidad, con la duración de sus películas (porque las verdades han de ser largas), con el montaje para impresionar a los intelectualoides de los centros comerciales...
Ahora por fin vemos la luz y cuando salgamos todos nosotros de ver tu mastodóntica película seguro que intentaremos hacer de este mundo un lugar más iñárritu... tururu.
Sigue buscando la belleza, a lo mejor vas y la encuentras.