Unos lo llaman homenaje, otros remake y otros directamente plagio. El cine está lleno de ellos. En el 90% de los casos, la película "nueva" es directamente basura. Pero, en mi opinión, De Palma lo que hace es "reiventar".

Brian de Palma. Homenajes/Revisitación. Su cine está lleno de esto. "El fantasma del paraíso" (¿inspiraría al musical de Broadway?), "Doble cuerpo" ("La ventana indiscreta"), "Vestida para matar" ("Psicosis")... Se le puede tachar de plagiador o de falta de originalidad, o bien de actualizar o reiventar obras ya existentes. Sus películas se odian o se aman.

Una cosa está clara: puestos a copiar, indudablemente, es mejor copiarse del mejor: Sir Alfred.

Para no contar nada de la historia, ya que destripado el argumento, destripada la peli, deciros que es una de las mejores películas de De Palma, y eso es decir mucho. Nadie maneja el suspense y la cámara grúa como él. Esta vez, además, le acompaña una gran banda sonora, una gran historia y un final estupendo. Plagio u homenaje, no se la pierdan.

Casi nunca siento terror al ver una película, como mucho me llevo algún susto. Pero con Henry he sentido auténtico miedo porque me pareció en todo momento tan real como la vida misma. Es un gran acierto del director no mostrar los asesinatos al principio y presentarnos al protagonista como un ser... ¿humano?. Pocas veces una cinta con tan bajo presupuesto dio tanto.

La idea del director para su ópera prima era la de realizar un filme de "terror con monstruo". Debido al insignificante presupuesto (tardó casi cuatro años en estrenarse debido a la falta de interés de las distribuidoras) McNaughton se interesó por un asesino en serie real, Henry Lee Lucas, autor confeso de varias docenas de asesinatos junto con su amigo (y amante en la vida real) Ottis.

A pesar de la temática del filme, la recomiendo a todo el mundo. Scorsese la adoró (Nanni Moretti la repudió) en cuanto la vio y le produjo al debutante director "La chica del gangster".

Adaptación libre (y magnífica) del Macbeth shakesperiano. Los elementos fantásticos de la obra original calzan como un guante con la creencia espiritual de Japón. Mifune compone en esta película uno de sus personajes más logrados como el atormentado Washizu, que no puede escapar ni del remordimiento ni de su manipuladora esposa, interpretada no menos magistralmente por Isuzu Yamada (solo en Ran Kurosawa compuso un papel femenino con tanta fuerza).

A ratos lírica, a ratos fantasmal, a ratos violenta, siempre magistral. El final, de extrema violencia, es uno de los mejores de la historia del cine. Maestro Kurosawa, mil gracias.

Extraordinaria sorpresa la ópera prima de Marc Webb, narrando una historia mil veces repetida en el cine y, sin embargo, sorprendiendo incluso mostrando desde el principio como va a acabar la relación de la pareja protagonista.

Los actores principales están fantásticos, arropados por buenos secundarios (la niña de Miss Sunshine sigue haciéndolo genial), con un estilo narrativo actual y con clase, así como una banda sonora caramelo. Los que pasamos los 30 hemos agradecido escuchar canciones de Pixies, The Clash, The Smiths sin que estén metidas en la película con calzador.

Sin querer desvelar nada del desenlace, estoy convencido de que todo el mundo se puede ver reflejado en algún momento en la pareja protagonista, sintiendo complicidad, sintiendo compasión. Sin duda es una película que te llega.

Vida inteligente al final de la década en el cine USA, quien lo iba a decir.

Como decía el gran Kilo Veneno: Reir y llorar.

Curioso filme de género vengativo muy en la línea del "Death Wish" Bronsoniano.

Desgraciadamente, el pulso del director es algo flojo, y hay un más que evidente error de casting con el protagonista, que deja mucho que desear (como hubiese cambiado la cosa con un Clint Eastwood, un James Coburn o un Steve McQueen). Si bien "Rolling Thunder" (me niego a llamarla "El expreso de corea") tiene sus aciertos, la historia daba para bastante más. Se le saca muy poco partido dramático a la situación conyugal del mayor tras el regreso, la relación con su hijo, la preparación de la venganza, así como los malos, que parecen caricaturas...

Pero también tiene sus aciertos: el breve pero delcioso papel de Lee Jones, el asalto a la casa del mayor y, sobre todo, cada vez que aparece ese garfio.

Película como mínimo entretenida, pero muy por debajo de otras películas de vendettas como "Thriller: a cruel picture" o "Infierno de cobardes".