Surrealistamente terrible, nauseabundamente divertida. Cuando han pasado 20 minutos quieres abandonar la sala, pero cuando llevas 50 no te levantarías del asiento por nada del mundo. Cómo lo más delirante, estúpido, enfermo, sin gracia aparente puede llegar a ser tan original, tan malo y a la vez tan bueno. Plagada de guiños a la primera parte (obra de culto), esta secuela oficial no decepciona. Los fans de la original esperábamos otra cosa, ¡pero qué coño!, ha pasado el tiempo y el humor negro también se hace patente en la filmografía de estos locos hermanos. Muy buena, muy absurda y completamente recomendable.

Por personajes que lejos de tener vis cómica y despertar simpatía en el espectador, consiguen exasperarlo y darle dolor de cabeza.
El "film" parece una obra de la transición de enredo, costumbrista, al más puro estilo "Escenas de matrimonio". Producto fallido, que intenta seguir, sin conseguir, la novel "El mundo es nuestro".
Curiosidad en los cameos, amiguetes del director y que siempre acompañan a los Compadres desde los inicios.

Lo mejor : Los cameos y sus oficios con guiños a sus predecesoras.
Lo peor: El personaje de Estefanía de los Santos.

La serie no va a gustar a "las derechas"
Esta producción es puro mamporrismo ideológico, y hace alarde de la descomposición postmoderna de la maltrecha sociedad actual. Incesto, homosexualidad, feminismo, hombres débiles, blasfemias, Carlos Bardem, personajes de "Élite", nula rigorusidad, oscurantismo, imperiofobia, propaganda, indecencia y elucubraciones.

Quién no ha viajado en una app de viajes compartidos? Al decir esto nos vienen a la cabeza que yo conozca dos, una de ellas líder. En base a esa idea, sabes con quién viajas?
Es una apuesta arriesgada, ácida y un gran debut, éramos 4 en la sala, una pena. Me empeñé en ir a verla y tras media hora de espera la película no estaba disponible, y justo empezaba 15 minutos después en otro, el tiempo de llegar y aparcar.
El film te lleva en una dirección, luego en la contraria y Cuento en spoiler más...

Película discursiva que nos plantea una reflexión que lleva al límite a 4 personajes. De duración extendida, con 20 minutos menos quizás se haría más llevadera, pero al menos consigue que nos debatamos con la pregunta dándole vueltas en esa hipotética situación que elegiríamos.
Comedia moralista diría, o que pone de relieve la sociedad en la que vivimos, donde el dinero actúa como un ente que dirige nuestros fatales o venideros destinos, una especie de dios Neptuno o Poseidón en un océano de decisiones que es la vida.
¿Es el dinero tan importante? Necesario sin duda, ojalá no lo fuera, el dinero como escalones sociales que nunca desaparecieron, como cuna de cultura o de mediocridad. También es cierto que la opción decisoria dependería de la situación que presentáramos.
Todo lo anterior se recoge en la película, en la que se nos habla de que la ciencia son posibles trampas, o su rama psicológica, que el dinero corrompe a las personas, y esa dualidad de dinero-exitosos o pobres-impulsivos y mediocres.
"Hay dos tipos de personas, las que dominan sus impulsos y las que los impulsos los dominan a ellos", esto es cierto, hay desgraciados que te pueden joder la vida y jodérselas ellos mismos por un mal golpe físico, porque son animales-incultos que resuelven sus "problemas" y ergo sus carencias a palos, como también es cierto por el contrario que si dominamos a la mente y sus impulsos, se habitúa uno a lo mismo viviendo con paz interior. También depende de la situación de cada uno, mental y circunstancial.
En definitiva, interesante experimento de película donde buenos y malos, luces y sombras saltan a la luz en un desenlace donde a mi parecer se cargan el filme al irnos del asunto principal y quedarnos con que todos podemos llegar a ser unos infelices.