De entrada, decir que hablamos sin ninguna duda de la mejor producción bélica realizada hasta la fecha.
La dirección es fantástica, los actores se meten en sus papeles totalmente y dan lugar a unas interpretaciones extraordinarias.
Mención aparte merecen los diálogos, impropios de una obra de este género y su increíble ambientación, ya sea en escenas de combate o en la recreación de los paisajes de la época.
Por otro lado, la representación de la Guerra propiamente dicha es espeluznante. Consigue que el espectador se involucre de lleno en la serie, mediante la muestra de diferentes personajes todos ellos con un caracter distinto y sus posterior evolución hasta llegar a convertirse en verdaderos soldados
Sin comparación con todo lo realizado hasta el momento. Imprescindible para los amantes del género

Por Sergio Leone, por la dirección, por los 225 minutos que se hacen escasos, por Ennio Morricone, por la espectacular banda sonora, por el acompañamiento de la música con las imágenes, por el guión, por Torino Delli Colli y su estupenda fotografía, por la ambientación, por los escenarios, por el guión, por el argumento, por su desarrollo, por Robert De Niro, por James Woods, por todo, una obra maestra
Como único punto negativo decir que a pesar de su duración, queda algún que otro interrogante alrededor del desarrollo de la película

Primera película de Spielberg y primera lección. A pesar de su escasez de medios, el director consigue crear una increíble atmósfera de tensión sin recurrir a los tópicos del género, simplemente con una interesante trama y con un protagonista al que la extraña situación que se le presenta se le escapa de las manos. Como parte negativa, se podría se podría decir que el número de escenas de carretera es quizás excesivo, pero por algo es una road movie.

En primer lugar hay que decir que se trata de una mezcla entre entrevista pactada y documental, por lo que el género no queda demasiado claro.
Se nos presenta a un Fidel castro humanizado, pero del que se pueden sacar algunas conclusiones negativas: por un lado, parece un hombre anclado en el tiempo, alguien que no es consciente de que su verdadera revolución ha terminado. Por otro, destaca en gran medida su egoísmo y su egocentrismo: da a entender que concibe la revolución como algo personal (cuando fue un hecho totalmente colectivo), está convencido de su visión de la vida y saca provecho de un punto de vista ventajista y manipulador cada vez que dispone de una oportunidad.
En cuanto al trabajo en sí, destacaría los elementos recopilados de archivo y la excelente música, si cabe ambas cosas con mayor mérito que el pseudo-documental

Supuesta comedia que no logra arrancar ni una mísera sonrisa. Desde un principio, sabes que la película va a ser mala pero no hasta tal punto.
Nada más comenzar nos damos cuenta de la poca gracia de Sylvester, pero lo peor está por llegar: su madre. Es pedante, insoportable ...
A lo largo de la película nos encontramos con escenas tan patéticas que no sabemos si reír o llorar: el intento de suicidio, la persecución en el coche y sobre todo, el momento del giro de la pistola en las últimas escenas.
En resumen, decir que no se merece ni un 1, pero algo hay que darle. A destacar la escasa duración, quizá porque el propio director se dio cuenta de la basura que tenía entre manos e intentó poner de su parte por el bien de los espectadores.