La última película de Peter Weir, nos traslada a un campo de concentración soviético en una primera parte bastante creíble y atractiva en cuanto a la novedad que supone. Hemos visto muchas películas centradas en el holocausto nazi pero muy pocas nos han ofrecido un acercamiento cercano a los terribles gulags soviéticos y a la represión ejercida durante el régimen comunista al mando de Stalin. De este modo, la película se nos antoja novedosa e interesante. La recreación de los campos de concentración, la construcción del entramado de espías formado por el régimen( en el que obligan a todos los ciudadanos a espiar a sus vecinos y familiares con el objetivo de delatarlos ante las autoridades si era necesario o si veían incumplida alguna premisa de la dictadura) y la vida dentro del propio campo de concentración, junto a la naturaleza terrible y salvaje que la rodea, resultan muy acertadas.


No obstante, una vez que el grupo de presos escapa de la prisión, encontramos un tramo de la cinta bastante irregular que acompaña durante todo su recorrido. No se puede eludir el contraste que ofrece la visión de una naturaleza despiadada, a veces hasta cruel y letal, con la caracterización de unos personajes en los que parecen no existir los grises. Retratados como un grupo humanitario y compasivo, no reflejan la dualidad humana, donde el bien y el mal siempre tienen cabida. Apenas hay conflicto de intereses entre ellos. A pesar de escasear la comida y de encontrarse en las situaciones límite a las que los enfrentan los diferentes sucesos que tienen lugar en la historia.


De este modo, la presencia humana en la cinta (que en su primera parte había sido notable y desarrollada de un modo soberbio) parece simplemente fortuita. Otorgándole de este modo todo el protagonismo a unos paisajes de naturaleza desbordante, que si bien gozan de la mano de National Geographic, no logran que la película alcance nunca la gloria que merecía ni transforman la trama en la compleja historia prometida desde un principio.


La lucha del hombre contra los elementos naturales que buscan destruirlo y la historia de superación a flor de piel que es mostrada durante 130 minutos no son suficientes para conseguir pasar del aprobado raspado. Y es que, ‘’Camino a la libertad’’ podría haber sido una muy buena película pero se queda en la mitad de su trayectoria y no consigue arrancar en ningún momento. Las intenciones son buenas pero el resultado final no podría ser más desastroso. Ni tan siquiera las buenas actuaciones de un elenco asombroso en el que destacan los nombres de Ed Harris, Colin Farrell( totalmente desaprovechado), Jim Sturgess, Saoirse Ronan y un desconocido Gustaf Skarsgard ( al menos desconocido en ese entonces, sin su aparición estelar en ‘’Vikingos’’), hacen que el visualizado llegue a merecer la pena.


Es una lástima comprobar cómo el director de cintas tan famosas como ‘’El show de Truman’’ o ‘’ El club de los poetas muertos’’ nos entregue un film con tantos buenos propósitos pero con tan pocos resultados.

30 años después de haberse conocido y tras mucho tiempo sin mantener el contacto, David recibe un wasap de Layla, la chica que marco su adolescencia y a la que nunca ha podido olvidar. Aunque ambos no se ven desde finales de los ochenta, se han seguido la pista y saben mucho acerca de la vida del otro. A pesar de los años, la distancia y el tiempo que los ha separado, guardan fresco el recuerdo de ese primer amor juvenil que no pudo florecer y que quizás hubiera supuesto un antes y un después en sus vidas.


Por medio de esta premisa, el director español David Serrano nos presenta esta comedia musical que es su última película. La cinta se inspira en las canciones del grupo ‘’Hombres G’’ pero ni siquiera necesitas ser seguidor del grupo o conocer sus canciones, porque ‘’Voy a pasármelo bien’’ es mucho más que eso.


El guion de David Serrano y Luz Cipriota nos muestra una historia entusiasta y colorida que supone un canto a la vida y a las segundas oportunidades. También nos habla de la amistad, especialmente de esos amigos surgidos durante la infancia que han crecido a tu lado viendo tus peores y tus mejores momentos sin abandonarte en ninguno de ellos. La amistad es el nexo conductor de esta divertida y original cinta en la que resulta imposible no encariñarse con ese grupo de niños ´´marginados’’ que acaban de empezar su adolescencia y que se toman los embistes de la vida con humor y alegría. Los personajes de David y Layla son realmente adorables, sin embargo, es el personaje de Luis, quien es capaz de ver el lado bueno de absolutamente todas las cosas, el que se gana el cariño de todos los espectadores desde el minuto uno.


Los personajes en su versión adulta están interpretados por actores de renombre como Raúl Arévalo, Dani Rovira (en esta ocasión con un papel más comedido de lo que nos tiene acostumbrados) y Karla Souza, entre otros. No obstante, la fama de los citados aquí no significa nada porque los que realmente hacen brillar a la cinta son el elenco de niños y niñas que interpretan a los personajes en su versión infantil. Rodrigo Gibaja me ha encantado como Luis. Que desparpajo, chispa y frescura desprende su actuación. Estoy segura de que va a tener un gran futuro dentro del sector y creo no equivocarme al decir que ha nacido una estrella a seguir muy de cerca en el futuro. Izan Fernández y Renata Hermida Richards también realizan grandes interpretaciones llenas de ternura y momentos entrañables. Sin olvidar a la versión infantil del personaje de Dani Rovira, Rodrigo Díaz, que nos regala una interpretación muy divertida y algunas de las escenas más redondas del film.


En resumen, ‘’Voy a pasármelo bien’’ cumple con su premisa inicial haciendo que te lo pases realmente bien durante su visionado. Esta producción hispano-mexicana tiene todos los ingredientes para que cualquiera pueda entusiasmarse con su historia.


Posdata: Acabaras cantando las canciones de ‘’Hombres G’’ con el mismo entusiasmo que los niños y no se te irán de la cabeza durante unos días.

Rian Johnson repite la exitosa fórmula producida en 2019 con ‘’Puñales por la espalda’’ en esta nueva entrega que funciona como secuela de su primera película, pero explorando una historia diferente y con un nuevo reparto de actores y actrices.


Repite el avispado detective Benoit Blanc interpretado de forma excelente por Daniel Craig e incorpora nuevos rostros interpretados en su mayoría por actores y actrices famosos como Kate Hudson, Edward Norton, Dev Bautista o Kathryn Hahn. Les acompañan los no tan conocidos Janelle Monáe, Leslie Odom Jr, Jessica Henwick y Madelyn Cline. Johnson también recurre a dos cameos de actores de renombre(un irreconocible Ethan hawke y un fugaz Hugh Grant) que si bien no aportan mucho a la trama si funcionan como guiño divertido.


Aunque la cinta ha perdido la frescura respecto a la intriga que trajo consigo la primera entrega, podemos encontrar rasgos comunes en ambas. Johnson vuelve a poner de moda la figura del detective que resuelve misterios con gran habilidad y el escenario del más típico cluedo(en el que un grupo se reúne en un espacio intentando averiguar un misterioso asesinato). También podemos apreciar ese humor negro que ya estaba presente en la primera entrega y la costumbre de Johnson de reunir a un grupo de actores famosos para interpretar a los personajes principales.


En esta nueva ocasión, la historia se centra en un grupo variopinto de amigos de diferentes esferas sociales que reciben una invitación de su amigo multimillonario Miles Bron( algo así como el Elon Musk del grupo) para viajar hasta su lujosa villa en Grecia, pasar unos días de ensueño y resolver un misterio junto a él. Todos acuden a la cita y pronto vamos conociéndolos. Dentro del grupo podemos encontrar una modelo que sufre el rechazo de la industria por sus extravagancias e ignorancia, una política deseosa de obtener financiación, un científico, un influencer casposo y machista cuyo canal está empezando a despegar y que viaja acompañada de su joven novia( toda una mujer trofeo con la que presumir de su valía) y a una antigua socia de Miles a la que este destrozo la vida( siendo esta última invitación la más extraña de todas y la que alerta al resto de que algo raro está sucediendo). Casi todos tienen algo en común, necesitan el apoyo y el respaldo de Miles para que sus diferentes proyectos salgan adelante. No pueden sobrevivir sin su ayuda y por eso están dispuestos a hacer cualquier cosa por protegerlo y por halagarlo. Los extravagantes y absurdos juegos del millonario pronto se ponen en evidencia y la intriga por su asesinato ficticio queda sustituida por una muerte real que funcionara como punto de partida para ir desvelando el misterio en torno al cual se estructura la historia.


Como una cebolla que se pela capa por capa, Rian Johnson nos va ofreciendo pequeñas dosis de misterio que encuentran su clímax en diferentes giros argumentales(algunos más previsibles y otros que por el contrario no vimos venir). Todo ello aderezado de un exquisito humor negro que caricaturiza la figura de los millonarios ( creo encontrar la referencia más evidente en la figura de Elon Musk) que han acumulado una gran fortuna llegando a un punto en el que ya no saben en qué seguir invirtiendo dinero, despilfarrando de este modo grandes sumas en caprichos y excentricidades diversas y financiando diferentes proyectos de los que no saben absolutamente nada. Porque aparte de ser asquerosamente ricos, también son asquerosamente ignorantes. Y esto la cinta lo retrata a la perfección.


En definitiva, he encontrado el visionado de ‘’ Puñales por la espalda, el misterio de Glass Onion’’ muy ingenioso y entretenido. Solo por volver a traer el concepto de los misterios clásicos y convertirlo en una moda creciente ya merece nuestra atención, pero es que además es una cinta que te hace pasar un rato muy ameno y divertido. La única pega que le veo es la duración. En algunas ocasiones los 139 minutos pueden llegar a resultar algo pesados. Salvo eso, todo lo demás es redondo. Muy recomendable. Sin duda va a ser una de las cintas más sonadas de este 2022. No he comentado nada sobre la banda sonora, pero me ha encantado. Funciona a la perfección cohesionándose con cada escena y dándole mucha vida a esta historia tan gamberra.

Hay tantas cosas malas en esta película que resulta hasta difícil clasificarlas. No obstante, empezare con lo bueno que es bien poco.


Pedro Almodóvar se rodea de un grupo de actrices de categoría como la consagrada Aitana Sánchez Gijón, Penélope Cruz y Rossy de Palma (aunque aquí hace una interpretación bastante secundaria). He mencionado a las más famosas pero las dos grandes protagonistas son Penélope Cruz y una desconocida Milena Smit(quien creo que tiene bastante más potencial de lo que aquí se muestra). En su inicio la cinta nos cuenta el encuentro inesperado de dos mujeres que van a ser madres el mismo día. Ambas no podrían ser más diferentes. Vienen de ambientes sociales y políticos radicalmente opuestos y sus circunstancias personales hacen que parezca que no tienen absolutamente nada en común. Lo único que las une es la maternidad y el hecho de compartir la misma habitación durante su estancia en el hospital antes de dar a luz.


Hasta aquí llega lo bueno. Por lo visto se tomó bastante en serio esa frase de que ‘’lo bueno, si breve, dos veces bueno’’. Almodóvar que quiere hacerse el moderno y no sabe cómo nos vuelve a colar una historia de cambio de bebes (de esas que estamos tan acostumbrados a ver los sábados y los domingos por la tarde en Antena 3). Para diferenciarse de este producto, decide caracterizar a sus dos protagonistas como dos taradas que llevan su propia locura y sus neuras a extremos insospechados. Para mí gusto, la película dejo de ser creíble cuando una de ellas toma una decisión que le da un giro a la trama irracional y descabellado. En ese punto deje de entender a los personajes y me fue imposible empatizar con ellos. Nada de lo que ocurre a partir de ese momento tiene un mínimo realismo. Al hacer que su personaje tome esa decisión, el guion arroja la coherencia a la basura y ya no vuelve a estar presente en ningún momento del film. Los personajes secundarios tampoco ayudan. Los hombres son retratados como machitos cavernícolas y el resto de mujeres que rodea a las dos protagonistas aporta bien poco a la trama, hasta el punto de aburrirte con cada intervención.


Tras eso, se sucede un espectáculo bochornoso de idas y venidas que carecen de sentido. Se intenta mezclar temas tan diferentes como la memoria histórica, la maternidad, el feminismo e incluso el colectivo LGTBI (sigo sin entender esa secuencia de fotos de Daniela Santiago, como actriz merecía mucho más que ser paseada dos minutos para mostrar que se está a favor de ese colectivo y que el director es muy abierto). Mezclar temas tan diversos podría haber dado un buen resultado. Sin embargo, ninguno de ellos es llevado a buen término. Lo de la memoria histórica parece más bien un elemento de propaganda que ha sido incluido en el último momento para hablarnos de la ideología política del director. Se podría haber hecho una película muy buena con este tema, pero la manera en la que está desarrollado es realmente patética y vergonzosa. En vez de defender la memoria histórica, la convierte en un chiste de mal gusto. La figura de la madre soltera y la maternidad también podría haber sido desarrollada de una mejor manera, pero al final nos encontramos ante tres madres desequilibradas (si tres) que nunca debieron ser madres porque no estaban preparadas, no lo deseaban o les vino impuesto por su entorno. La maternidad y la paternidad no es para todos. Si no estás preparado psicológicamente es mejor que te lo replantees y abandones la idea de ir dejando cadáveres emocionales a tu paso. Es más, si esas tres mujeres hubieran decidido abortar nos habríamos ahorrado esta historia tan absurda. Me convence más como película pro aborto que como obra sería capaz de dar explicación a alguno de los temas que trata. Respecto al colectivo LGTBI no era necesario cambiar sin previo aviso la sexualidad de dos mujeres claramente heterosexuales para desarrollar una escena de sexo lésbico cuyo único cometido es despertar el morbo del espectador, porque ni aporta nada a la trama ni supone una relación entre los personajes que se desarrolle después o tenga un significado importante.


En fin, supongo que algo así gustara a fanáticos acérrimos de Almodóvar(a los que les guste hasta que el director les mee encima) y a gafas de pasta super modernos que se emocionan con lo que el resto de seres humanos no entienden. Si tienes cerebro y criterio propio, esta no es tu película. Es más, tras verla sentirás que Almodóvar se ha reído en tu cara. Su visionado resulta un insulto a la inteligencia humana. Por favor, no perdáis 123 minutos de vuestro valioso tiempo visualizando este batiburrillo de despropósitos. Le pongo un dos por las actrices y considero que es una valoración bastante benevolente.


Posdata: No soy una gran conocedora de la filmografía de Almodóvar. Tan solo he disfrutado con dos de sus películas: ''Volver'' y ''La piel que habito'' pero hace falta muy poco para darse cuenta de que ''Madres paralelas'' es un bodrio de dimensiones colosales que no está a la altura del resto. Aún sigo sin explicarme como un esperpento como este ha ganado tantos premios.

En este mundo hay dos tipos de personas. A las que les fascina Mike Flanagan y a las que no. Y me alegro mucho de pertenecer al primer grupo. Un par de días me ha durado el visionado de "Misa de medianoche " y puedo decir sin temor a equivocarme que es una miniserie sencillamente espectacular. Una de las mejores de su carrera y también una de las mejores de este 2021.


Ya lo vi venir cuando supe que estaba creada, escrita y dirigida por Flanagan. Y es que es uno de los directores que más me han sorprendido últimamente. Lo conocí en " La maldición de Hill House" y me encantó cómo reinventaba un género tan explotado como el del terror, analizando los miedos y los traumas humanos como la base del terror más real. Después lo vi en la secuela del resplandor, "Doctor sueño" donde volvió a ganarse mi admiración. Mira que es difícil adaptar un libro como ese y conseguir hacerlo brillar con luz propia. Y tras Hill House, llegó su continuación, "La maldición de Bly Manor", otra joyita digna de todos los elogios.


‘’Misa de medianoche’’ me parece su serie más personal hasta el momento. Seguro que quien busque encontrar una serie de terror convencional no caerá rendido a sus encantos. Como en sus otras series el terror es solo un envoltorio que esconde una historia mucho más profunda y ambiciosa, llena de reflexiones sobre la naturaleza humana y la existencia de la fe. Porque es mucho, mucho más que una historia de terror.


Es un grito de desesperación en mitad de la oscuridad de la noche buscando un poco de luz y esperanza para seguir manteniéndote en pie cuando ya te ha abandonado absolutamente todo. Es una pregunta constante al sinsentido de la vida, a la existencia de la muerte, al más allá, al porqué de existir en una realidad llena de dudas. Una reafirmación de la fe que surge cuando necesitamos algo a lo que aferrarnos para no rompernos en mil pedazos. Y muestra a través de una metáfora muy bien desarrollada como esa fe puede derivar en fanatismos peligrosos si los dogmas caen en las manos equivocadas. Del mismo modo analiza la bondad humana, la solidaridad, la redención y el sacrificio como símbolo del amor universal.


El pueblo en el que se desarrolla la trama es una ciudad costera a la deriva. Los personajes están atormentados. Por la culpa, el remordimiento, el racismo, la intolerancia, la falta de esperanza, la imposibilidad de ver un futuro mejor, etc... La mayoría de ellos viven anclados en el pasado. No existe la posibilidad de un futuro, ni tan siquiera del presente.


La miniserie es un drama brutal de 7 episodios en los que la trama sobrenatural casi ni resulta necesaria porque lo que te narra es demoledor. Esas conversaciones sobre la vida y la muerte, sobre la existencia del más allá o de dios son brutales. Unos diálogos con los que disfrutas y que se te quedan grabados.


No desvelo mucho más porque considero que a esta serie se debe llegar sin tener mucha idea de lo que te vas a encontrar e ir descubriendo poco a poco como se desarrolla la historia. Hay quien dice que la serie empieza de forma muy lenta, pero es que todo lo bueno sabe mejor si se cuece a fuego lento y Flanagan se toma su tiempo en presentar a cada uno de los personajes, en relatarnos sus conflictos internos y sus diferentes personalidades. No obstante, a partir del capítulo 4, el giro que da la historia te vuela la cabeza y a partir de ese momento el ritmo se vuelve demencial haciendo que te agarres muy fuerte al sillón.


Los personajes y las actuaciones también son perfectas. Nadie es secundario. Todas las historias importan. Todas contribuyen a desarrollar la trama y la enriquecen. No es una serie. Es un regalo y una clase magistral de cómo hacer bien las cosas. Hasta la fotografía, el decorado y la banda sonora son fabulosos. Algunas de las relaciones de los personajes están desarrolladas con una elegancia y un estilo envidiable. Nos cuenta una historia de amor terriblemente triste y bella. La de Erin y Riley. Dos personajes que no necesitan mostrarnos muchas escenas de sexo para hacernos caer en la cuenta de que están conectados de forma irremediable y de que son almas gemelas. Ni tan solo se muestra un beso. Para demostrar que han estado enamorados, que siguen estándolo y que posiblemente lo estarán toda la vida solo necesitamos escucharlos tener largas charlas, verlos mirarse a los ojos con honestidad y comprobar como aferran fuertemente la mano del otro frente al inminente fin del mundo conocido. Aunque no será la única historia de amor que desarrolle la trama. Hay otra bastante importante que da origen a toda la tragedia que presenciamos, pero esa la iremos descubriendo casi al llegar al desenlace.


Sobre el desenlace lo único que puedo decir es que resulta realmente emotivo y que ha sido una gozada verlo. Me ha hecho sentir muchas cosas y está casi al mismo nivel que los de otras series como ‘’A dos metros bajo tierra’’ y ‘’Mr Robot’’. Lo se, son palabras mayores. Sin embargo, esta serie se las merece porque el sentimiento de lo que se nos narra alcanza casi las mismas emociones que consiguen hacer brotar las citadas.


La recomiendo muchísimo. Y es que todo lo que hace este hombre es sencillamente magnífico. Nunca me decepciona. Y cada vez que veo su nombre escrito, sé que voy a presenciar algo que va a conectar con partes de mí que no sabía ni que existían... Os emocionará, os destrozará y os dejará pensando durante varios días. Y eso solo está al alcance de las grandes series.


Sigo en Spoiler por falta de espacio