X-Men 2 es uno de esos films de acción donde ésta vale verdaderamente la pena ser vista.
Se trata de una buena historia y, además de eso, de un film inteligente, entretenido bien hecho.
Acción y efectos especiales que se lucen perfectamente en una película distinta y, a la vez, buena.

Un día, mi tío me dijo (hablando del buen cine de terror) que la película que más lo había asustado y que nunca volvería a ver (por tal miedo que le causó) era IT.
Yo, esperanzado con verla algún día y experimentar ese TERRIBLE MIEDO que me había mencionado mi tío Mario.
Bien. Cierto día, buscando en la revista del Cable (o TV Paga) encontré IT y, contento, apunté en una hoja para poder grabarla y verla. Llegado el momento de ver el film "más terrorífico de los hermosos gustos de mi tío (y de sus tontos amigos)".
No pude terminar de verla. Pero no de lo tan terrorífica. Sino, que de lo tan estúpida y absurda que era.
Ese payaso trucho que se parecía más a Pelucita de Cacho Bochinche que a otra cosa, lleno de chicos abusivos que maltratan a los protagonistas (con un guión patético), esos efectos mal hechos y esa araña del final (aunque no la terminé de ver del todo) que lo único que causaba eran ganas de reír.
Al tener la oportunidad de hablar con mi tío, le dije que había visto la película IT y que, para mi, había resultado mala y absurda.
Que otra cosa se podía esperar del divagante Stephen King, que por lo único que se merece un verdadero respeto es por El Resplandor y Carrie.

Más que una película de terror, La Novia de Chucky, es de comedia.
Mal hecha, sin gracia, malos actores y un final que dan ganas de reír.
Simplemente patética.

El éxito de El Código Da Vinci, sin duda alguna, se debe al tremendo marketing que éste film tuvo desde antes de su estreno.
Se trata de un thriller aburrido, con personajes que pasan desapercibidos, con un guión que no tiene vida propia (sino que sigue estrictamente paso a paso lo sucedido en el libro) y con la ausencia de la intriga y el misterio que pudo desarrollarse en la exitosa novela de Dan Brown.
Alfred Molina: actor de madera y la exquisita francesa Audrey Tautou quema los oídos con su fallido intento de hablar bien el inglés.
Una película del montón.

Increíble film.
Nunca había visto nada igual.
Se sale del cine, con una sonrisa de satisfacción.
Simplemente maravillosa.