Este tío se supera cada día con todos sus trabajos. Solo tengo dos palabras para describir esta película: ESPECTACULARMENTE MAGNIFICA.

Lo tiene todo: Unos diálogos buenísimos (made in Quentin), un humor que quita el hipo, del que yo llamo "inteligente", una historia de lo más entretenida, un final espectacular, así como poco previsible (made in Quentin), unos personajes alucinantes, a cada cual más interesante...

Para mi ha conseguido llegar al nivel de Pulp Fiction, por fin...

Lo mejor de lo que va de año, junto con la gran Watchmen.

Una película rara rara donde las hayan. Tiene una historia bastante atípica, un cuaderno en el que escribes un nombre y matas al que lleve ese nombre en su DNI siempre y cuando pienses en su cara. La verdad es que el guión y la idea debemos atribuirsela a los escritores y creadores del comic Tsugumi Ôba y Takeshi Obata, porque es una adaptación del mismo.

Tiene un gran fallo, que es muy larga. Le sobra media película (contando las dos), y en momentos se hace bastante coñazo, hablando claro.

Los shinigamis, o como se escriba, según he podido observar en algunos comics, están bastante conseguidos, además de algunos de los personajes.

En resumen, una película para los amantes de los comics, y de este en particular, y para los demás para verla una vez y dejarla en el olvido.

A mi me gustó.

Me gusta... y mucho, esta película. Me gusta por la sencilla razón de que cuenta lo que tiene que contar, bien contado, y en un espacio reducido de tiempo, ayudando esto a que la trama no aburra en ningún momento.
Nunca pretende ser un peliculón, y de hecho no lo es, pero lo que el director nos quería contar lo ha hecho de una manera bastante aceptable.
Cierra todos los cabos sueltos, unos más forzados que otros pero lo hace, resuelve algunas dudas que dejaron tras de sí las anteriores entregas (o debería decir los posteriores entregas), se montan una historia épica bastante buena en el aspecto de los efectos especiales y todo eso, y en definitiva, que es un precuela bastante conseguida.

Que grandes verdades oculta esta divertidísima serie. Con tan sólo cinco personajes principales, consigue un argumento de los más sencillo y completo a la vez.
Todos, o casi todos, tenemos un lado friki en el interior. Unos lo tienen muy grande, otros lo tienen apenas reconocible, pero nadie se salva de esta característica tan humana.
Sheldon me encanta, la forma de expresarse, es increíble. Para decir "aspirina" prefiere decir "ácido acetil salicílico", es magnífico. Las manías o obsesiones que tienen, pueden llegar a ser demasiado exageradas, pero de algún modo todas las personas tenemos alguna de esas manías, aunque un poco menos acentuadas. Y cuando juntas a este personaje con el de Penny, completamente diferente, acaban produciéndose los gags más graciosos de toda la serie.
Y además de todo esto, le añades al friki tímido, al friki salido, y al friki cuerdo que pone un poco de normalidad en ese círculo, y acaba formándose una de las series más completas, graciosas y buenas de los últimos años.

Y a día de hoy, aún no he visto la última temporada...

Me gustan este tipo de películas, te presentan a un personaje principal, el cual conoce a otro u otra o ambos el cual/es se muestran supersimpáticos con el protagonista. A veces es una relación de amistad, a veces una relación de amor, o a veces ambas, como ocurre en esta película. En resumen, que al final resulta que donde dije digo, digo Diego, a ninguno de los personajes resulta ser quien era. El prota ha sufrido un engaño de sus supuestos "amigos" para un fin concreto, y al final todo se acaba resolviendo medianamente bien sin que el prota sufra ningún mal mayor.

Buena película esta, con una historia curiosa y entretenida, con un final atractivo, unos personajes de los que sólo me decepcionó la chica, algo sosa, y me gustó bastante Hugh Jackman en un papel diferente a los que nos tiene acostumbados.