Tiburón 3D: La presa

Esta película tendría que estar prohibida. ¿por qué? pues porque si la droga es mala y está prohibida esta película también.....actores malísimos, guión de risa, típica como las sevillanas y el gazpacho y previsible como saber lo que viene después de un pedete cuando tienes gastroenteritis.....prohibido verla!!

Un grupo de estudiantes deciden pasar unos días de vacaciones en la casa que una de ellos, Sara (Sara Paxton), tiene cerca de unos pantanos. Pero la diversión pronto se torna en tragedia. Tan pronto como son atacados por un tiburón…

He de decir que ya me habían advertido de lo mala que era esta cinta, pero me suele gustar comprobarlo por mí mismo, aun a riesgo de perder el tiempo con subproductos que no merecen la pena. Subproductos como el que nos ocupa.

Y es que esta cinta resulta previsible (es fácil adivinar quién morirá y quién sobrevivirá) y aburrida a más no poder (las escenas de acción brillan por su ausencia, no hay ni humor ni mucho gore, ni siquiera desnudos gratuitos con los que alegrarse la vista). David R. Ellis debería haberse fijado en otra producción similar pero infinitamente más entretenida: Piraña (Piranha), de Alexandre Aja.

Hace ya unos cuantos años que tomé una decisión un poco dura en cuanto a mi género favorito, el terror. Cansado ya de ver tanto pestiño, opté por ser muy, pero que muy selectivo a la hora de escoger el producto para visualizarlo e intentar disfrutar. Así que donde antes en un mes podía ver 5 ó 6 pelis de terror, hoy día ha pasado a 5 ó 6 al año.

Así que de vez en cuando me tiro a la piscina sin mirar tan siquiera si hay agua o no y me atrevo con cualquier cosa. Lo cierto es que sabía la porquería que iba a ver, pero como era de tiburones y hacía bastante que no veía nada de este tipo, pues manos a la obra.

La peli es más simple que hacer un puzzle de cuatro piezas, el principio te lo dice casi todo y la escena no se le parece a la del Tiburón de Spielberg ni por asomo, aunque lo quieran disimular un poquito. Ya la quedada para ir a la cabaña y el encuentro con los frikies del pueblo me pareció algo forzado y más aún cuando descubrimos el absurdo plan que se traen los notas estos en el pueblo. Esto no se lo creen ni los que tengan una imaginación enorme. El proyecto criadero a manos de estos dos tipos, jajajaja. Perdonen mis risas señores guionistas. Tiene todo los tópicos posibles, jóvenes con ganas de fiestas, por lo que veo a los tiburones no les gustan los abueletes. A diferencia de otras pelis aquí no se verá ni una sola teta, mal rollo en estos bodrios, si la peli es mala y no vemos carne...mejor apaga y vámonos. Las muertes no son ridículas...sino lo siguiente. Por lo visto los guionistas se creen que el tiburón es un pero de presa y se dedica a sacudir a sus presas en lugar de pegar el típico bocado. Correr más que una lancha motora o una moto acuática es la leche. Me imagino que serán descendientes directos de Usain Bolt o algo por el estilo. Los tipos de tiburones, más feos que el Fary comiendo limones y lo que aguanta el chico negro, madre de Dios, yo por menos iba listo. Ah y no se pierdan los saltos acrobáticos de los bichos con aletas, a tomar por saco Yago Lamela.

Resumiendo, una castaña del copón.

Con este estúpido título que le han puesto en España, que incluso podría confundir y hacer que se piense que se trata de un remake del Tiburón de Steven Spielberg, llega la nueva película de David R. Ellis, director de un par de entregas de Destino Final y Serpientes en el Avión. Para ello cuenta con un reparto de rostros jóvenes y en la mayoría de casos desconocidos entre los que se encuentran Sara Paxton, Dustin Milligan, Chris Carmack, Sinqua Walls y Joel David Moore. En realidad no sé porque he perdido el tiempo escribiendo el nombre de cada uno de ellos, será difícil verles ganarse la vida en el mundo del cine si lo mejor que pueden actuar es lo que se ve durante la hora y media que duran en pantalla, aunque por otro lado, su director ha demostrado ser tan inepto o más y no le faltan proyectos en cartera, hasta cuatro.

Decir de qué va es tan simple como decir que es la reunión de un grupo de universitarios en una casa en la playa de uno de ellos, y como no tarda en hacer acto de presencia unos tiburones que se comerán a todo aquel que pillen por delante, seguido de la posterior lucha por sobrevivir de aquellos que tengan más cara de protagonista.

Lamentable serie B (incluso Z me atrevería a decir) con grupo de interpretes que podrían haber sido sacados de Mujeres y Hombres y Viceversa, eso es cuerpo escultural y cabeza de chorlito Dirigida torpemente por un David R. Ellis negado en cada una de las escenas de tensión, mal planificadas, a lo que no ayudan unos efectos especiales de la más baja estofa y la inserción de canciones pop en demasía. Pero lo peor de la película no es la dirección de Ellis, ni sus pésimos caracteres, ni su banal guión, lo peor es que hayan insertado un '3D' en el título sin motivo para ello, pues no hay ninguna escena que esté rodada para tal formato. Encima que nos cuelan semejante despropósito, nos timan.

Por encontrar, tratándose de una película de terror con la que uno espera pasar un rato ameno para echar unas risas, no encontramos ni terror, ni humor, ni siquiera tetas. ¿Qué podemos salvar pues? Poca cosa, siendo generosos el score inicial de Graeme Revell y la muerte del chico que huye en moto acuática (la única elaborada).

Tiburón 3D: La Presa queda incluso por debajo de películas de la productora The Asylum como Shark Attack, que era equiparable en efectos especiales y contaba con mucha más imaginería y humor (os animo a que busquéis algún fragmento suyo en You Tube, carcajadas aseguradas).

Empecemos por decir que le puesto un 1 porque no permite menos, pero si pudiera poner mi nota sería un -1.
Me parece un insulto al cine de tiburones, me ha recordado a "Piraña 3D", una americanada de tíos de instituto forrados con casa en el lago, como la mencionada anteriormente (con diferentes matices).
Es una película de hora y media en la que sólo hay sangre, tiburones saltarines, típicos personajes estereotipados, malos actores, malísimos efectos visuales, en definitiva, una película que sabes qué va a pasar desde el primer al último minuto, pero con un detalle especial, que todo lo que te esperas que vaya sucediendo sucede peor de lo que te esperas.
A modo de conclusión, no se la recomiendo ni a mi peor enemigo.

PD: pobre Spilberg, tiene que estar tirándose de los pelos.