Partir

¿Qué tienen en común las películas “Cuatro bodas y un funeral, “Misión imposible”, “El paciente ingles” y Partir” cinta que nos convoca?. La estupenda actriz Kristin Scott Thomas, quizás una de mis favoritas lo cual ha hecho que rescate este film . Esta británica de mucho carácter y de mirada nostálgica, presta toda su experiencia y capacidades para encarnar a Susana, una acomodada mujer esposa de un médico que quiere volver a ejercer su profesión de kinesióloga una vez criados a sus dos hijos. Con la ayuda de su esposo prepara una consulta contratando para ello albañiles capacitados. Uno de ellos es Iván, un español que entabla rápidamente una amistad con la mujer que se siente atraída a primera vista desencadenando un amorío que se saldrá de toda norma para dejar a su esposo, una vida llena de comodidades y a sus propios hijos.

La directora Catherine Corsini arma una interesante película utilizando un esquema clásico en el cine: el marido, la mujer y el amante, y la reacción de la esposa que decide dejarlo todo para vivir su pasión, una heroína que se atreve a lanzarse a su aventura generando una empatía por el espectador. El deseo y la pasión son los temas centrales del film que nos habla de qué es y de qué sucede cuando este sentimiento entra de golpe en la vida corriente moviendo los cimientos de de una persona común. La historia esta cargada desde su inicio con un tinte dramático, avizorando que algo trágico ocurrirá desde la intensidad de los amantes, las secuencias exhibidas que pronto podrían terminar y abruptamente. El tema social, el exitismo y las dificultades económicas también son un tema poderoso dentro del film. El deseo y la felicidad enfrentadas a la comodidad y posición social dentro de una sociedad eminentemente consumista y preocupada por esos temas. El personaje recorre emotivamente un pedregoso camino hacia una vida llena de sobresaltos económicos donde por cierto el ex marido se encarga de destruirla y bloquear cualquier acceso incluso a empleos con tal de que vuelva al hogar. Una cinta en torno a los triángulos amorosos seducen siempre, aunque a veces resulten algo predecibles al menos esta en especial se deja ver principalmente por el tremendo comedido de Kristin Scott Thomas hablando ahora en francés, al español protagonista de “El laberinto del fauno”, Sergi López y el francés Yvan Attal. Mucha atención con el final.

Esta historia está planteada en un clima, casi se podria decir hitchkoquiano, todo sucede en plan flash-back, luego de una primera escena en la que una mujer se levanta de la cama y suena un disparo.
Las referencias filmicas y literarias son diversas, no podemos dejar de pensar en Trouffaut o en Tolstoi o Flaubert. Sin embargo, Catherine Corsini, directora de un guión propio, consigue una narración absolutamente cinematográfica, sólo las palabras necesarias, el texto sale a la luz a partir de un sabio trabajo de la imagen... Cuenta con la magnífica fotografía de Agnes Godard!.
Hay escenas de una magnífica resolución, sólo comentaré dos: un plano lejano donde se ve un primer acercamiento. El otro, un momento en que ella dice a su amante"Pideme que me vaya". Cuando el se aleja y lo dice, el rostro de Kristin Scott Thomas es absolutamente extraordinario...Son esas actrices que saben decir con su rostro...
Le he puesto un 7 pero hay que pensarlo como casi un 8...

Aunque esperaba más, la película me ha gustado bastante. Lo mejor sin duda, la interpretación de la excelente Kristin Scott Thomas. Sublime y Maravillosa. Lo peor, a pesar de la supuesta quimica existente entre Kristin y Sergi, no me pegan como pareja.