Si Alfred Hitchcock nos hizo presenciar un crimen de manera voyeurista a través de los prismáticos de un curioso vecino, en este thriller el director cántabro nos hace asistir a un espectáculo multi-pantalla de acción en tiempo real.
Es mejor no desvelar demasiado sobre su argumento pues es la mejor manera de verla para no hacerse ideas raras.
Y es que desde su arranque la película te va calando poco a poco hasta que te engancha por completo y no consigues soltarte gracias a su elaborado guión y al buen uso del suspense. Tal vez sus giros le resten verosimilitud al asunto o su (para mi) estirado desenlace. Pero que queréis que os diga, cuando una historia te atrapa de lleno hace que no desmejore el conjunto, y no por ello consigue que olvidemos lo disfrutable que es esta cinta.
A pesar de no haber demasiada gente, debo admitir que mis amigos y yo salimos con buen sabor de boca de la sala, de haber aprovechado nuestro dinero y de que se puede ser original sin que te tomen por tonto.

No cabe duda de que Vigalondo es un director muy particular y con un gran potencial para crear y desarrollar historias.Espero que con la próxima vuelva a hacerme disfrutar tanto como con ésta o "Los Cronocrímenes" (a la espera de ver su anterior trabajo "Extraterrestre"). Si en aquella fueron los viajes en el tiempo, en esta las nuevas tecnologías y los hackers harán plantearse a más de uno el uso de las mismas. Yo desde luego no volveré a dejar conectada mi web cam...