Y más después de ver este documental. Es increíble ver lo plano que tienen el encefalograma los adolescentes estadounidenses, la importancia que tiene la popularidad, el stress absurdo al que se ven sometidos... y lo más increíble es que, realmente, ¡los estereotipos se cumplen!

Pero que aquí no se salva ni el apuntador, ojo, que los padres también son de traca. Normal, llevan generaciones y generaciones comportándose bajo el mismo patrón.

En resumen, me he reído mucho y me he asustado mucho, porque el control de la primera potencia mundial reside en manos como las de los personajes de este documental. ¡Que Dios nos ampare!

Tengo... no, DEBO hacer crítica de esta película.

No es que Noriega sea un actorazo, nunca me lo ha parecido, pero tampoco me disgustaba. Sin embargo, este film me lo ha destapado como lo que es: un actor de tercera. ¡Por favor! ¡No sabe hacer de malo! Se cree que con decir las frases apretando los dientes vale, pues si quiere caracterizar a un personaje haciendo sólo eso va listo. El tonto lo clava, claro que si tampoco sabe hacer de tonto apaga y vámonos.

Grandes actuaciones aparte (sólo salvo a Flora Martínez), la película es como el 99% de las películas españolas: tetas, tetas y más tetas. Pero que vamos a esperar de una peli ambientada en un club de alterne... Guión vacío, previsible y de final ridículo.

Imaginé que no sería gran cosa, pero no creía que fuera a tener tanta razón. No le pongo 1 estrella porque por lo menos es corta. ¡Oh, sorpresa! ¿No fue nominada a ningún Goya, verdad?

No conocía la original. De hecho, fue gracias a Filmaffinity que la encontré, buscando la crítica de esta regurgitación llamada remake.

Gracias a Dios vi antes la original, porque si llego a hacerlo al revés... desde luego te has lucido Kenneth.

En serio, cojamos una balanza. En un plato, Laurence Olivier. En otro, Jude Law. ¿Soy el único al que se le rompe? ¡Por favor! ¿Y la ambientación? ¿Y el toque cínico? Sé que las comparaciones son odiosas, pero es que es para odiarla, como comparar jamón de bellota con jamón de york.

Michael, en su línea, de los mejores actores que hay y habrá. Me gustaría saber cómo se prestó a semejante mamarrachada.

A punto estuve de dejar de ver la película por lo sosa que es al principio, llena de gags absurdos pero, a mi entender, nada divertidos. ¡Menos mal que no lo hice! La película va ganando en humor y el tramo final, totalmente disparatado, es de lo mejor de Gene Wilder.
No obstante, si viste "El jovencito Frankenstein" puede que te quedes decepcionado, ya que a pesar de tener mucho reparto similar no es tan buena.

Y una película de intriga que no engancha, no puede ser buena. Es muy lenta, y el final predecible. Las actuaciones eso sí, me gustaron, pero si la historia no acompaña... se convierte en un film pasable.