Lo que quiero decir es que esta película es una comedia "rom-com", no es una obra maestra del cine independiente y los que vayan a verla tienen que ser conscientes de eso. A mi personalmente me gustan las comedias románticas y esta me ha gustado pero sé que muchos dirán que es el mismo argumento de siempre, pues sí y no. Obviamente no hay grandes sorpresas en la trama, Ella es una jefa tiránica (aunque tampoco haga nada más que ser algo borde mientras están en la oficina) y él su secretario-asistente-portacafés sumiso y fiel. Ella necesita casarse para tener el visado de trabajo en Estados Unidos y convence a Andrew a base de sobornarle con un ascenso y el miedo a perder su puesto de trabajo. Son la típica pareja que se odia pero con el paso del tiempo y las extrañas situaciones que viven en Alaska van conociéndose de verdad. La familia de él es genial, la abuela la mejor, no en vano fue una chica de oro. Hay gags típicos de comedia, hay un perro, repeticiones y el encontronazo fisico, que aunque te lo esperas es bastante gracioso.
Es una película perfecta para el verano, si te gustan las comedias románticas. Los dos actores principales lo hacen bien, los secundarios lo mismo. Ella está en su salsa y él promete mucho. Entre Sandra y Ryan hay más química que en muchas de las parejas de las últimas películas de este tipo y es una película que no se hace larga, que ya es mucho decir en los tiempos que corren
Es entretenida, divertida y sin grandes pretensiones, de modo que si no te gustan las comedias románticas piénsalo, pero si te gustan no te la pierdas

Es una película entretenida para toda la familia, Brendan Fraser retoma el tipo de personajes que le hizo famoso en la saga de la momia y nos recuerda que es un actor que cae bien en pantalla. Es una película de aventuras, magia y referencias constantes a los clásicos de la literatura. Me gustó ver al cocodrilo de Peter Pan y aunque no es una película del otro mundo, garantiza pasar un buen rato. Si tienes sobrinos o niños y quieres animarles a que lean más es una excelente opción para llevarles al cine.

El trailer me tenía en ascuas y ahora que he visto la película aún no tengo claro si me ha decepcionado o no. Hay algunos aciertos, varios cambios (lo que no tiene que ser malo) y algunas ausencias. Falta un poco más de química entre los personajes, Mulder y Scully se pasan el día discutiendo porque sí, primero ella le anima a aceptar el caso luego se pasa el resto de la pelí intentando que lo deje pero no me quedó muy claro el motivo por el que cambio de actitud en un nanosegundo. Luego está el hecho de que apenas colaboran, están más tiempo enfadados que ayudandose el uno al otro como solían hacer y que era una de las cosas que me enganchó de la serie, el hecho de que eran un equipo que no funcionaba si faltaba uno. Mulder comenta en la película que él es sólo una mitad del equipo y eso queda claro en la historia.
Amanda Peet promete pero su papel es demasiado simple, hay un breve segundo en el que parece que ella va a jugar a ser una rival contra Scully, parece mostrar interés por Mulder, se fija en que se ha afeitado, Scully la mira mal, la cosa parece interesante pero se queda ahí. lo mismo le ocurre a Xzibit, que no creo que tenga más de 5 líneas y la mitad de ellas son francamente malas. Billy Connolly ya es otra cosa, aquí sí que han intentado hacer algo con el personaje, aunque tampoco es tan bueno como algunos de los secundarios que aparecieron por la serie en el pasado.
Ahora bien, mi verdadero "pero" a la película es el personaje interpretado por Callum Keith Rennie. No es una crítica al actor, ni mucho menos, le he visto en Battlestar Galactica y en otros trabajos y es un hombre que se desenvuelve en la ambigüedad como nadie pero aquí interpreta a un personaje plano, anodino, que corre y golpea, a menudo parece sobrenatural, pero al final sólo es un ruso enamorado. No sólo es un personaje uni-dimensional sino que carece de coherencia y no ofrece un verdadero reto. Si se hubiera enfrentado al tandem Mulder-Scully de finales de los noventa la película hubiera durado menos de 30 minutos.

Quizás he sido muy dura con el film, es cierto que soy fan de la serie y esperaba fuegos artificiales, sin embargo, no me arrepiento de haberla visto ni mucho menos, me encantan estos personajes y volver a verles, saber qué ha sido de sus vidas es suficiente razón para ir al cine. La película está llena de guiños a los fans, mencionan a Samantha (sin venir mucho a cuento, pero eso ya era un fallo de la propia serie) a William (eso sí venía a cuento), a los medium de la serie como a Clyde Bruckman, sale el famoso poster, los lapices en el techo cuando Mulder se aburre, etc. Definitivamente, si sacan otra película iré, aunque el malo sea de cartón piedra.


Atención: es recomendable quedarse hasta que terminen los créditos, hay una pequeña despedida de nuestros personajes favoritos que resulta de lo más veraniega después de tanta nieve.

Yo me reconozco, a mi pesar, una fan de la comedia romántica, pero he de admitir que las últimas películas que se han estrenado de este género en USA dejan un tanto que desear. Me ocurrió lo mismo con 27 vestidos, que me quedé pensando que faltaba algo. Aquí tenemos un inicio curioso y prometedor, los personajes típicos, un mujeriego guapo y rico y una mujer encantadora, lista, divertida, guapa y encima se llevan a la perfección. Él trata a las mujeres como kleenex (o mejor aún, como los cartones sujeta-cafés del Starbuck) y ella espera pacientemente. Hasta ahí nada nuevo pero hay algunos toques nuevos e interesantes. Me gustó el proceso en el que él empieza a echarla de menos porque ella está en Escocia y el móvil no parece querer ayudar, ver cómo la charla con los amigos va modificándose a lo largo de la película y de un grupo de tíos que sólo hablan de juergas y baloncesto, al final encuentran su "lado femenino". Incluso la "venganza de la falda escocesa" es bastante buena. Pero hay muchos otros momentos en los que el humor absurdo de las comedias románticas se torna a veces demasiado infantil y simplón, hay personajes que salen por eso de rellenar hueco porque no deben tener ni dos líneas, el novio escoces es un elemento de decoración que carece de personalidad y es totalmente irreal, vamos que ni la chica habla con él.

Había oído maravillas de la serie y sobre todo de la interpretación de Rhys Meyers, hay que reconocerle el enorme reto que supone interpretar a uno de los artistas más imitados del planeta, todos conocemos las convenciones de imitadores de Elvis de Las Vegas y hay mucho nivel. Pero la serie se hace un tanto pesada, se centra demasiado en aspectos un tanto "culebrón" de la vida del cantante y actor, a veces le retrata como un llorón, que no sabe vivir sin su madre, no digo que lo fuera o no...obviamente no le conocí pero hay momentos muy propios de un serial malo. El último capítulo es más interesante, da datos menos conocidos y bueno, hay buenos interpretes, se ha invertido tiempo y dinero en un producto que no es malo pero que podía haber sido mejor o al menos, más entretenido