Una película saturada de escenas sexuales, brujería y bastante terror. Quizá las nuevas generaciones no comprendan este tipo de terror o escenas incoherentes, pero para la época en que fue estrenada el "sinsentido" era algo esencial en los filmes de terror. Quizá tampoco sea atractivo en cuanto a efectos especiales pero vuelvo a lo mismo, para la época en que se produjo y el país de donde proviene no se puede exigir gran cosa, del mismo modo, las actuaciones no son tan buenas pero sí rescatables. En fin, a quienes gozamos del cine de terror de vieja escuela ya estamos acostumbrados a las escenas cutres.

Lo que si les puedo asegurar de este filme, es un buen diálogo, una buena fotografía, y una excelente historia. Si ustedes han visto el bebé de rosmary de Roman Polanski, y disfrutaron de la película, entonces ésta es para ustedes. Una trama similar, un ambiente similar, personajes similares, pero no, tampoco es un plagio o una imitación.

Las películas turcas han dejado de ser lo que décadas atrás eran, unos filmes clase z, remakes que hacían de cada película popular estrenada por Hollywood, qué más que verse como un film profesional, fuera de Turquía, el único interés en ver esos churros, no era otra cosa más que el morbo de criticar las pésimas producciones de esa nación, quienes además carecían de ideas originales para hacer sus propios guiones y en lugar de ello filmaban un remake estadounidense tras otro.

Pero ya no más. Turquía ha dejado esa sombría carrera fílmica para brincar a las superproducciones en el campo de terror, donde sus filmes que antes eran tercermundistas ahora arrebatan terreno a un cada vez más decadente cine de terror estadounidense, posicionándose como uno de los países con mejores películas de terror en la actualidad, que además han dejado de lado el guión americano para construir historias con base a leyendas y mitos de us propias tierras, añadiendo al séptimo arte la cultura ocultista y oscurantista de dichas tierras.

Este flme, representa no sólo un retroceso al cine de alta calidad sobre posesiones, fantasmas, hechos paranormales, exorcismos que ya no giran en torno a historias repetitivas, que sin importar que ya sean 6 entregas hasta el momento bajo el mismo guión conceptual, cada entrega conserva una esencia única y original haciendo ver los filmes predecesores como historias casi independientes dando a la saga en general un ambiente poco repetitivo.

Desde las actuaciones que han mejorado bastante a filmes como Seytan, cameos muy profesionales que con su movimiento y rápidos cambios de cuadros o ambientaciones desde la enfocación simple hacía un enfoque subjetivo logran crear tensión en el espectador, a lo que también podemos añadir buena historia con buenos diálogos, excelentes efectos especiales, fotografía de alta calidad que fuera del movimiento de cámara también hay que dar merito a los colores, ángulos y luces. Bueno y casi lo olvido, muy buen maquillaje.

Si bien la segunda parte fue mejor que la primera en los aspectos de asesinatos, efectos especiales y gore, pero peor en el aspecto argumental, está parte es sin duda la peor de las tres. Primeramente contiene varios huecos argumentales, desde las primeras escenas sin lógica hasta como ligan el filme con la película anterior. Si bien la primera fue la de mejor argumento, este filme carece de lógica, no se explica nada, sólo hay muertes sin sentido. En cuanto a la producción también es la peor de todas, disminuyen el gore, los encuentros sexuales clásicos del género desaparecen casi por completo, el reparto es muy pobre, entre otros detalles más. También se añade a esta secuela un humor negro que no era característica de las precuelas.

En fin, en realidad no sé si catalogar esta película realmente como mala, pues siendo una película slasher parece que todos estos detalles salen simplemente sobrando, pues al espectador de dicho género fílmico ese tipo de detalles crute parece ser lo que le fascinan.. como suelen definir algunos las películas de culto: "son tan malas, que se vuelven buenas". Incluso los huecos argumentales y las muertes sin sentido, además del humor negro parece ser ya una categoría intrínseca del género y sus secuelas.

Me habían dicho que la única película buena de la saga era la primera, sin embargo he terminado de ver la segunda y no es mala, o por lo menos me gustó, aunque tampoco la pondría como una obra maestra.

No, no es un filme con escenas saturadas de gore, pero sí es tan violenta como Chainsaw in Texas o Halloween. Si usted espera ver algo violento como Cannibal Holocaust o A Serbian Film se equivoca al tipo de violencia de la que quiero hacer mención. Este film es violento no por cargar litros de sangre en cada toma, sino por la interpretación de los protagonistas, quienes siendo muy jóvenes son todos unos psicopatas que adoran de matar una y otra vez (aclaro que esto no cuenta como spoiler pues desde el inicio de la película se sabe quién es el asesino), sin sentir remordimiento alguno, sin pensar en quién pueda ser la victima, y muy por el contrario parecen gozarlo fríamente, como Leatherface o Michael Myers, quienes matan por matar sin tener razón alguna de ello.

También carece de ese humor que muchas veces contienen las películas de género slasher que disminuyen el suspenso en algunas partes del filme, en está ocasión no es así, cada escena tiene suspenso a gran nivel (obvio sin olvidar que pertenece al tiempo de los 80's), tal vez no sea tan violenta como Terrifier pero en su momento de seguro causó gran impacto al público.

Si usted busca un terror libre de sangre es muy probable que esta película sea de su agrado.