Genial esta película francesa que se nos presenta como una puerta abierta
por la que podemos asomarnos a la Francia marginal de primeros del Siglo XX.
.
Excelente ambientación y magistrales actuaciones de todos sus protagonistas,
de entre los que a mi juicio solamente flojea un poco Serge Reggiani, que
no me acaba de convencer en su papel de tío duro milhombres, al vérsele
aparentemente muy desvalido y bastante atolondrado como para llamar la
atención de una avispada mujer como Marie.

Mejor elegida para su papel está Simone Signoret ( Marie ) en una etapa
suya de esplendor y belleza. También todo el elenco del reparto secundario
consigue transmitir gran realismo dentro de la variedad de personalidades que
se muestran. En especial estará Raymond, como ejemplo de amistad sincera.

La película es un oda al amor imposible, a la amistad y a la camaradería de
un pequeño grupo de rufianes y mujeres ligeras, que por aquellos años se
denominaban 'apaches', todos ellos viviendo al margen frecuentemente
de la ley y siendo propensos de frecuentar tugurios y salas de baile de
mala muerte.

Un Reggiani locamente enamorado, probará durante toda la cinta su hombría
y su sentido del honor, incluso al final, y él que no formaba parte del grupo
de granujas, pagará un alto precio en su obstinación de defender a su amada
con un casco de oro por peinado, y al que ella igualmente corresponde sentimentalmente.

Si no la vieron, es muy recomendable, no les defraudará porque es una joya del cine francés.

Repasando toda la filmografía de Adriano Celentano llego
a la conclusión de que esta es sin duda la mejor y la más
divertida de todas las realizadas con Castellano & Pipolo.

Celentano que en aquellos años estaba en su mejor momento,
tanto como actor como cantante, nos muestra todos los atributos
que formaban parte de su personalidad real y también de la cinema-
tográfica, a saber; su cara de mangante con el ceño siempre fruncido,
el ir mal vestido y siempre despeinado.

Igualmente Ornella Muti era una 'patatina' muy cotizada en el
cine italiano de aquellos años, con actuaciones eróticas muy
púdicas, alejadas del destape generalizado del cine italiano
de aquella época, con los Jaimitos y los Banfi, dónde el
'tetamen' y el 'braguerío insufrible' estaban a la orden del día.

La historia muestra un divertido y constante combate entre Muti
y Celentano, con situaciones muy divertidas que provocan la
risa en el espectador, y el continuo cabreo de la Muti que no
tira la toalla dispuesta a doblegar al cenutrio y obstinado
campesino para conseguir enamorarlo y llevárselo al huerto.

Un segundo intento, también con Ornella Muti, se produjo en
'Furiosamente Enamorado' un año después, pero a mi juicio
más floja que la ahora comentada, y que intentando aprovechar
el tirón de esta, no lo consiguió.

Recomendable para pasar un buen rato, sin más pretensiones.

Georges Sarret es un criminal francés no muy conocido, esta película nos
muestra de una forma muy ' glamurosa ' su macabra historia.

Me gusta el cine francés, y aunque la película a recibido desfavorables
comentarios, es una buena película.

Elegantemente bien filmada, con una buena ambientación e interpretación
tanto de Piccoli como de la Schneider, se recrean las andanzas, por otra
parte verídicas, de esta pandilla de criminales cuyo principal interés era el
fraude de las polizas de seguros de vida, a través de numerosas triquiñuelas
matrimoniales creadas con el respaldo de Piccoli, que encarna a un
respetable y bien considerado abogado de provincias.

Llama la atención el lujoso vestuario de Romy Schneider y la belleza
que por aquellos días todavía tenía, y hace sonreir el pensar en la ingenua
Sissi emperatriz corrompida dedicándose a estos menesteres.

Pudieran resultar desagradables las escenas de los baños de ácido,
pero son imprescindibles en la recreación de la historia.

Y aunque los acontecimientos son bastante escabrosos hay numerosos
momentos humorísticos que rebajan la morbosidad de la trama.

Un simpático artista italiano llega a Francia con objeto de
efectuar una restauración por encargo de un buen amigo
potentado francés.

Nunca lo hiciera, puesto que se verá involucrado en una
sucesión de acontecimientos de extrema gravedad.

Para su trabajo cuenta con un amplio elenco de modelos
para posar, niñas de corta edad. Una de ellas desaparecerá
y será asesinada.

Es difícil determinar a veces si la película va en serio o
en broma, puesto que la presencia de Sordi imprime de
una comicidad todo el desarrollo del filme, incluso en
los momentos más dramáticos, como el final.

Buenas actuaciones de los dos pesos pesados, de Noiret
y también de Sordi, ambos unidos por una antigua amistad,
uno con mucha maldad y otro tremendamente ingenuo.

La película se ve con interés, al ser bastante original en su
planteamiento, y creo que puede ser catalogada como una
auténtica tragicomedia.

En este mundo competitivo no es fácil ser el primero, pero en
este caso lo seré, por la primicia de mi crítica, ayudado por
la rareza de la película, y por las dificultades para su visionado.

Cinco estrellas Michelin tendrían que haberle otorgado a esta cocinera,
que al igual que otra que posteriormente hubo en España, se dedicaba
a condimentar sus guisos con matarratas.

Vemos en la película como desde pequeña, siente predilección por
las plantas venenosas y por un ídolo malévolo de Bretaña llamado
Ankou, y que ella afirma le impulsa a dar pasaporte a los mortales.

Hélène Jégado era una mujer hombruna con un fisíco que no hubiera
atraído al cantante Benjamin Biolay, su partenaire en la película, al
cual la diligente sirvienta deja viudo al cargarse a su mujer por deporte.

Completamente alejada de los hechos verídicos, la película está cuidada
en sus detalles y realización, no faltando los trapos en la cabeza de las
mujeres para dar el ambiente requerido de las campesinas del siglo XIX.

Da la impresión de pretender ser un completo pliego de descargo de la
famosa asesina francesa, al querer presentarla como mujer desequilibrada
e inconsciente de sus actos. No les funcionó pues al igual que sucedió en
la realidad, Hélène Jégado fue condenada y ejecutada.