Serie Británica en que a grandes rasgos versa sobre Servicio de inteligencia británico, en plan MI6 (La Checquy), que cuenta entre sus filas con diferentes personas con peculiares poderes sobrenaturales (llamados EVA)

La trama empieza en que nuestra protagonista (Myfanwy) se despierta sin memoria rodeada de cadáveres en lo que se llama el “accidente del puente”, el primer capítulo se desarrolla a un ritmo rápido y engancha. Myfanwy tiene dos opciones, dos llaves, empezar una nueva vida desde cero o intentar descubrir su pasado y quien es.

Los primeros capítulos vemos como Myfanwy hace vida normal, ocultando a sus compañeros de trabajo en la Checquy el hecho de que ha perdido la memoria y va haciendo pesquisas para descubrir quién es. Desde un inicio se nos deja caer que alguien de la propia Checquy le ha traicionado y no es trigo limpio. Luego podemos apreciar que dicha organización la Checquy, tiene detractores en la sociedad y un movimiento de resistencia, ya que sus métodos de captación y entrenamiento de los EVA no es del todo ortodoxo y quizás poco ético. Hay flashbacks de como Myfanwy fue captada por la Checquy cuando era adolescente.

A la ecuación hay que sumar una mujer del Servicio de inteligencia americano que se suma a a la investigación del “accidente del puente” sin ser invitada, y da bastante juego al asunto y el grupo mafioso “Lugat”, que por lo visto entre sus negocios esta la compra-venta de EVA’S al mejor postor, para acabar de liar la trama.

Por lo que tenemos un thriller típico de servicios de inteligencia ( con traiciones, rencillas, algún giro imprevisto…) en que la protagonista ha de averiguar quién y es y su pasado con la particularidad que los miembros de su grupo de trabajo parece ser que tienen poderes (poderes a priori no muy peligrosos para la sociedad). Por lo que es más bien una serie de espías en su 80% y un poco “aderezado” con un 20% de historias de super-héroes

Miniserie chilena de 6 capítulos basada en hechos reales, ambientada en la Chile de los años 70 en pleno apogeo de la dictadura de Pinochet. Los protagonistas son una aparente familia feliz, primero tenemos a Mike en el papel de padre, un gringo que trabaja de ingeniero electrónico, Mary, en el papel de madre, una reconocida escritora que se codea con la jet-set artística, y luego, a sus hijos Cony y Simon, con quienes conviven en un lujoso chalet en el exclusivo barrio de "Lo Currro" de Santiago de Chile.

Pero esos aparentes padres de familia en realidad trabajan para el DINA ( el servicio de inteligencia chileno entre los años 1973-1977). Más involucrado en la causa lo esta Mike que Mary, ya que el primero esta en primera línea de fuego realizando "operaciones de campo", mientras Mary más bien no se ensucia las manos y se limita a justificar moralmente todo lo que esta realizando Pinochet por el bien del país.

Algo que me choca desde los 5 primeros minutos de inicio de la serie es que en ese aparente lujoso chalet donde el matrimonio vive con sus hijos, a escasos 100 metros de la piscina, el taller es usado por el DINA como centro de torturas, algo que me parece un tanto arriesgado viviendo con dos niños, e inverosímil.

Que nos encontramos en estos 6 capítulos? lo típico de de series de policía secreta en momentos de dictadura, espionaje, traiciones, torturas, misiones en países exteriores, todo lo necesario para acabar con todo aquel que supusiera un enemigo del estado chileno. Todo esto visto desde la perspectiva del bando de los partidarios de la dictadura de Pinochet y de quienes pensaban que todo comunista debía simplemente desaparecer.

La ambientación y fotografía están bastante cuidadas para teletransportarnos a como debía ser la vida en los años 70 en Santiago de Chile y respecto a los actores, la mayoría cumplen, quitando a Mike (Andres Rillon), que no sé si es que su papel de "gringo-mata comunistas" le exigía ser así de frío, o que simplemente el actor es así de inexpresivo.

A modo de anécdota al final de cada capítulo sale como por espacio de un minuto, grabaciones reales de televisión de esa época, algunas con relación a los hechos reales que ocurren en la serie, y que añaden un poco de drama e interés al asunto

Tenía ganas de ver esta secuela en formato serie de la película australiana ROMPER STOMPER de 1992, que sin ser un peliculón, si recuerdo que me gustó porque cuidaba con detalle todo el tema de la estética Skin Head y sus personajes principales eran creíbles en sus papeles de malvados Neonazis Australianos.

Ya cuando vi que la serie tenía un 4,3 de puntuación fue un mal augurio, y a los quince minutos de visionado del episodio piloto sabía que la cosa no iba a mejorar. En esos quince minutos iniciales ya vemos que la cosa va a ir de los constantes ataques y revanchas que hay entre dos grupos violentos, los Neonazis (los patriotas) y los de ultra izquierda-anarquistas (los Anfifa). Para mi el problema de esta secuela es que no es nada creíble, en ningún aspecto, ni en a trama ni en los personajes. No llegas a conectar con ninguno de los personajes de alguno de los dos bandos ( antifas/patriotas),

A ratos parece que se esta viendo más una serie de adolescentes de horario de sobremesa con las típicas peleas de bandas callejeras, cuernos y vendettas dirigida a un público juvenil que no una serie de adultos ambientada en temática de banda Skin Head. Y es que el tema que "a priori" parecía que iba a ser el central de la serie ( las andanzas de un grupo de neonazis en Australia en la época actual) a veces queda relegado a un segundo plano, eclipsado por unas subtramas que no aportan nada y parecen puro relleno,

A veces da la sensación que solo porque de tanto en cuanto se ve que los protagonistas del bando de los patriotas van tatuados con simbologia Nazi uno recuerda que esta viendo la secuela de película ROMPER STOMPER, y para sumar a la decepción, el vínculo o nexo con la película predecesora es mínimo.

Grandes expectativas tenía de ver estas nuevas hazañas del detective Julien Baptiste, o lo que vendría a ser una tercera temporada de la Mini-serie "the Missing", que tan buenas criticas cosechó en sus dos anteriores entregas, sobretodo en la segunda. Me considero de las personas que se quedaron enganchadas a la trama e intriga de sus dos anteriores temporadas, y con pesar he de decir que esta vez Julian Baptiste no me ha cautivado, ni sorprendido como en el pasado.

Y creo que ahí esta el principal problema de esta temporada, vemos a un Julien Baptiste bastante despistado e incluso atontado, ya no impone ni sorprendre con sus conjeturas e indagaciones como antes, vale que está jubilado y los años le pesan, pero en esta entrega su "mente detectivesca" pasa a estar años luz de las otras temporadas.

Entonces ya tenemos un punto negativo al tener un protagonista que ya no cautiva ni sorprende como anteriormente. El segundo punto negativo son los secundarios, no se logra a empatizar, a conectar con ninguno de ellos. En la primera temporada creo que todos empatizamos con aquel pobre padre que perdió a su hijo en un descuido en unas vacaciones por Francia y en la Segunda temporada con aquella familia que unos 10 años después volvía a tener esperanzas de encontrar a su hija con vida, ese "intringulis" en ver que pasó con aquellos pobres niños desaparecidos, con el consecuente sentimiento de angustia al ponerse en la piel de esos padres, en esta temporada no existe, no te ves rápidamente los episodios para llegar al final para aclarar que diantres les sucedió.

Con lo que vamos al tercer punto negativo, la trama. Para mí, aparte de no atrapar y enganchar, al menos no hasta al punto de sus anteriores entregas, aparte peca de intentar meter muchas subtramas y personajes que no acaban de conectar con la trama principal, como un "totum revolutum", todo muy cogido de puntillas, y a veces con situaciones poco creíbles.

En definitiva una buena seria de intriga y policíaca pero que dista mucho del nivel alcanzado con las dos temporadas de "The Missing"

No suelo ver series que tengan una puntuación inferior a 5 en esta página, pero el hecho de que en otra plataforma similar a Filmafinitty tuviera buenas críticas y el hecho de que estuviera rodada en Australia, señal normalmente de poder disfrutar de bonitos planos de paisajes me hizo darle una oportunidad.

A los 20 minutos de empezar a ver el primer capitulo, uno ya se da cuenta de las carencias que tiene la serie y ya puede intuir que no esta ante una serie digna de recuerdo.

Como he leído en otras criticas, la nota característica de la serie es que es todo previsible, que nadie espere un gran giro de guión ni nada similar. También decir que toda la trama, que transcurre en 8 episodios, se podría haber resumido en uno. Impera la sensación de que del capitulo 2 al 7 (ambos inclusive) es pura "paja" y muchos minutos de metraje son totalmente innecesarios. Aparte todo el rato los protagonista van como el perro y el gato de aquí a allá (del pueblecito pesquero a la comuna hippie de los Tidelanders y viceversa) sin ton ni son, apenas toda la trama discurre en esos dos escenarios.

En esta ocasión la nota que tiene esta serie es más que merecida.