Grata sorpresa con esta serie. Partiendo de la simpleza del videojuego pereciera difícil sacar algo bueno que no fueran las típicas escenas montadas por ordenador. Pero unos guionistas con ganas han conseguido montar unas tramas simples pero bien elaboradas. Se acabaron los grandes guionistas que partían de grandes obras y dejaban que el director sacara una buena o mala película para pasar a buenos guionistas con historias mediocres que hacían que el director destacara si sacaba una buena película. Ahora a los guionistas les dan un videojuego y a ver si sacan algo que permita hacer una serie. Generalmente la serie se alinea con la simpleza del videojuego y solo los fans del mismo se animan a hacer la crítica, que suele estar basada en si han cambiado el color de piel de un personaje, el sexo o los gustos sexuales del original.

Los capítulos de Fallout muestran muchas diferencias en calidad, bien sea por el guionista o por el director que hay detrás de cada uno, pero en su conjunto es aceptable. Por supuesto los dilemas éticos que plantean son para ejercicios de instituto como no podía ser de otra manera partiendo de un videojuego y los retratos de los distintos personajes forman un pastiche muy kitsch, muy de serie B con dinero.

No se si en el juego será igual pero la serie capta no muy tarde quien es el personaje que tiene más tirón, el dual de Walton Goggins, y así lo demuestra el cierre de esta temporada.

La falta de ambición ha hecho que esta película solo pueda ser visionada en España porque fuera muchos de sus diálogos carecerán de sentido. En ese aspecto podemos decir que es cine "garbancero".

La película rezuma mala baba por todos los lados y no deja a casi nadie sin salpicar: el primer Podemos, las antiguas triarquías de los pueblos, formadas por el alcalde, el cura y el médico, que hacían y deshacían a su antojo a costa del resto del pueblo, las subvenciones europeas que aprovecharon todos los partidos para su beneficio, la moderna ecología, que se olvida sobre como hacer tomates para consumir, la auto-flagelación de los machos sin saber por qué tienen que hacerlo, y muchos más temas. Tantos que parece que un guion excesivo lo hubieran tenido que recortar mucho para lograr la duración de una película estándar. Hay series con un guion infinitamente más corto que dan para 6 u 8 capítulos y esto me hace pensar que hubiera sido mejor serie de lo que ha sido como película.

Muy buenas las escenas de exteriores de pueblo donde se contempla de verdad lo que es la España vaciada por la apuesta por el ladrillo y el sol y playa y que está llevando a la crisis alimentaria actual.

Se hace evidente que hay muchas películas que se filman pensando directamente en las plataformas "on line" y siguen el modelo de lo que siempre se ha llamado serie B americana. Guion basado en algún libro de éxito en supermercados, mucho movimiento corporal, que no es lo mismo que acción, y nulo respeto a fotografía, dirección o vestuario, por poner alguno de los elementos de una película.

Las escenas de peleas muestran el estereotipo que dice que después de cien patadas en la cabeza, incluyendo varias con un extintor, o después de tres puñaladas y cinco tiros se puede seguir dando bofetadas con el otro. Igual de estereotipados que muestran a los políticos (corruptos) o a los ex-asesinos o invasores (honrados, engañados y traumatizados).

Me han resultado curiosas las referencias a la situación de Sudáfrica después del apartheid tantos años después de que se acabara hace exactamente 30 años, porque la mayoría de los actores que aparecen tienen menos de esa edad. Pero poco se puede esperar de algo que solo sirve para llenar la cuota semanal de estrenos de Netflix y para acompañar el insomnio o un día de mal tiempo climatológico.

La película me parece bien dirigida y aceptable por parte de los actores y sin embargo la historia me parece como el agua, incolora, inodora e insípida.

El título me parece el menos apropiado porque en ningún momento se hace una anatomía ("Análisis o examen minucioso de algo" -RAE) de una caída. Realmente no se hace una anatomía de algo en concreto: la pareja, la familia o lo que sea. Donde, además, se hace la historia desde una de las partes exclusivamente.

Cuando termina la película me doy cuenta de que no es una historia de un juicio, que solo ocupa una parte del metraje, ni de una pareja, que ocupa otra parte, ni de un niño espacial, que navega por toda la película pero de forma superficial y artificial. Si se hace una película donde la historia tiene que ser lo importante, como en este caso, habría que haber matizado más.

Voy a copiar unas palabras del usuario "jbono" que resumen de forma concreta y concisa esta película:

"...Aunque está lejos de ser una obra maestra, ofrece una experiencia cinematográfica sólida en el género de acción, con una buena producción, una buena banda sonora, buenos actores, increíbles localizaciones, planos bien ejecutados y, sobre todo, algo que aprecio mucho en el cine atención al detalle en aspectos que el público general podría pasar por alto..."

Y eso es todo. Una historia de ficción (sin ciencia, por favor) mediocre y que el director quiere mejorar, y un embolsado de lujo. Empezando por el márketing que se había puesto en marcha desde antes del estreno. Ni mejor ni peor que la primera parte. Simplemente distinta, lo que es de agradecer al director y tan raro en las secuelas, precuelas y paracuelas.

Lo mejor de esta película es que hay que verla en pantalla grande para apreciar lo que la producción quiere resaltar, la ambientación, la música, los planos amplios.

Lo peor es un guion que desconozco si tiene algo que ver con el libro del mismo nombre que no he leído pero que es de una simplonería del cine que solo está interesado en ganar dinero. Y no me parece el caso de Denis Villeneuve con esta película.