Desde el Laboratorio Nordic Food en Copenhague, vemos como dos chefs exploran el uso y el sabor de los insectos en diferentes países del mundo: desde hormigas a una termita reina en África (además de saltamontes en Uganda cazadas de noche con luces potentísimas que crean graves problemas de visión), a larvas en Australia o México, pasando por avispones gigantes en Japón o el "queso podrido" de Cerdeña...
Ambos buscan sabores y texturas, e intentan comprender las diferentes culturas que emplean estos insectos dentro de su alimentación regular.
Sin embargo, el último tercio de este documental de 70 minutos reflexiona sobre la necesidad o no de una explotación masiva de los insectos comestibles en granjas como solución para proporcionar proteínas y otros nutrientes en la escala requerida por una población en crecimiento: ¿es la solución para encontrar un sistema sostenible de alimentación a nivel global?, ¿o es el propio sistema el que debería cambiar?. Y finalmente, ¿que buscan las grandes multinacionales como Nestlé o Cargill al introducirse con fuerza en la entomofagia?

Film de vocación evangelizadora que narra el transcurso del Camino de Santiago (Ruta del Norte) para once peregrinos que vienen de la Parroquia de Santa Ana en Arizona, Estados Unidos, con el padre Sergio al frente. Cada uno tiene su historia y sus motivaciones y se enfrentan no sólo a la dureza física del Camino, sino a sus fortalezas y debilidades anímicas y a sus convicciones espirituales.
Bien rodada, con fantásticos paisajes (que incluyen también Covadonga p.e.), se sigue con interés. Para mi sobre todo por el aspecto humano, como los roles van cambiando en el grupo, como sufren... es auténtica en ese sentido.
Hay unas animaciones intercaladas que explican de forma sencilla (infantil incluso) diferentes cuestiones históricas. Aparte de estos "dibujitos", será la visión cristiana, no ocultada por otra parte de la película lo que puede echar atrás a algunos espectadores. Pero si sois peregrinos o pensáis serlo (seáis creyentes o no) os lo recomiendo por su autenticidad.

Mosén Bruno existió realmente en el siglo XIX en el Pirineo aragonés, y fue un cura de pueblo muy peculiar por su carácter pícaro, que dio lugar a numerosas anécdotas. Este corto de 30 minutos aprovecha ese personaje para que un investigador americano (si, hijo de Don Johnson y medio hermano de Dakota), llegue a Saravillo y conecte con "los lugareños".
Es muy agradable de ver y se nota el cariño del director y guionista Maxi Campo, que junto al humor y los fantásticos paisajes hacen su visionado recomendable.

Si hay alguien importante en la historia de la televisión en España ese es Narciso (“Chicho”) Ibáñez Serrador. Se le recuerda mas por programas como "Un, dos, tres... responda otra vez", por donde desfilaron no sólo grandes humoristas y presentadores, sino que también sirvió de trampolín para gente como Victoria Abril, Silvia Marsó, Lydia Bosch...
Su primer gran éxito fue el programa Historias para no dormir. Eran episodios de terror que comenzó en 1965 y que el propio Chicho se encargaba de presentar (un poco a lo Alfred Hitchcock presenta). “El asfalto”, en el que Ibáñez Serrador era el director y guionista bajo el pseudónimo de Luis Peñafiel y que está basado en un relato de Carlos Buiza, fue premiado en el Festival de Televisión de Montecarlo con la Ninfa de Oro al mejor guion en 1967, lo que supuso también el primer galardón internacional para TVE en toda su historia.
Al que vea este mediometraje mezcla de crítica social y surrealismo, le recordará a Larra (el “vuelva usted mañana”), al “Brazil” de Terry Gilliam, o “La cabina” de Mercero.
A destacar la sencillez de los decorados en los que intervino Mingote (y que sorprenderán al no avisado) y la música de Waldo de los Rios, que nos introduce al genial Ibáñez Menta (padre de Chicho) que lentamente se hunde en el asfalto sin remedio.

Daniel Costelle e Isabelle Clarke son los directores y guionistas. De ambos es también la serie “Apocalipsis; la 2ª Guerra Mundial” (2009), así como “Apocalipsis: El ascenso de Hitler” (2011), o “Eva Braun en la intimidad de Hitler” (2007) entre otros documentales.

Son cinco capítulos cronológicos, de casi una hora de duración cada uno. Las imágenes, de muy buena calidad, están coloreadas, pero con bastante acierto se hace de una manera suave, no exagerada.

Me ha parecido un trabajo riguroso que nos acerca la “Gran Guerra” justo un siglo después de que, un 28 de julio de 1914, el asesinato del archiduque Francisco Fernando de Austria en Sarajevo fuera la excusa que dió origen al conflicto.
Es una guerra mucho menos conocida que otras, y también poco tratada en el cine (con alguna notable excepción como “Senderos de Gloria”). Es muy curioso conocer que el Kaiser Guillermo II, el Zar Nicolás II de Rusia y el Rey Jorge V del Reino Unido eran primos. Y es increíble comprobar como “jugaban a la guerra” de la mano de sus (la mayoría) orondos generales. Y más increíble ver como muchos hombres se lanzaban a la guerra como un rebaño feliz tras unas consignas de patriotismo que escondían los intereses de unos líderes en busca de sus sueños imperiales. Y es que entre las razones que explican el ambiente prebélico están la existencia de esos imperios, como el austrohúngaro, el otomano, el ruso o el británico. Este último sería el único que sobrevivió tras la guerra y que daría origen a un nuevo orden mundial, con los Estados Unidos como gran potencia y la aparición de los fascismos, la URSS o el auge de los nacionalismos... amén de ese Tratado de Versalles que puso fin a la 1ª G.M. pero dió origen a la 2ª G.M.
Lenin, Rasputin, Petain, el Barón Rojo o el mismo Lawrence de Arabia son protagonistas también de esta güera. Y aparecen personajes que luego serán importantes en otros momentos históricos, como Hitler y Goering, Churchill, el futuro presidente de USA Truman, Rommel o Patton...

Las imágenes captan la extraordinaria dureza de esas batallas de trincheras. La enorme potencia de fuego que daban las nuevas tecnologías, así como la utilización de guerra química a gran escala o las condiciones de vida miseras de los soldados, todo junto, hacen que la frase “carne de cañón” se pueda utilizar para esta conflagración de la manera mas literal. Un documento extraordinario para ver e intentar entender esa sinrazón.