Película de muy mal gusto y de guión deleznable debido a que es racista, machista, violento....Sin embargo si te la planteas como una comedia para reirse y nada más, a mi me parece una joya. Siempre he opinado que las mejores comedias son las nacionales porque siempre hacen más gracia las situaciones que te puedes encontrar en tu calle o con tu gente, y esta película cumple con ello a las mil maravillas. Además a diferencia de sus secuelas aquí los golpes SI que tienen gracia y las interpretaciones de los actores principales: Santiago Segura, Javier Cámara y Tony Leblanc son magistrales.
Sí, la película es cutre, está hecha con muy poco dinero, pero con un guión adecuado y que no se convierte sólo en una sucesión de sketches espléndidos que es lo que hay que buscar en estas películas. Abstenerse incondicionales del buen gusto y buenos modales.

Debo de admitir que desconozco por completo la literatura de Asimov, por lo que no voy a juzgar si la película se ciñe a no a la novela homónima, no obstante creo recordar que los creadores del film repitieron de continuo que sólo habían tomado unas ideas básicas de la novela para el film y por tanto quizás deberían haberle cambiado el nombre.
En lo que respecta a la película me gustó mucho la idea central del argumento y lo bien llevado que está el ritmo de la película, todo ello junto a unos efectos especiales tipo "no hemos reparado en gastos" que te llevan sin problemas a creerte que estas en el futuro.

Lo realmente penoso del film es que el protagonista sea un Will Smith, que con su cara de chiste jamás podrá valer para un papel que si hubiese sido para Tom Cruise, Matt Damon, Edward Norton, etc. nos habría dado lugar a un clásico de la ciencia-ficción.

Mi primera sensación tras ver la película es que presenta una bonita historia de la vida de una persona de principios del siglo pasado con sus aventuras, amores, tristezas, su participación (breve) en la guerra y con la peculiaridad de que nace viejo y va rejuveneciendo con el paso del tiempo. Esto me recordó mucho a, quizás os sorpredais, "Forrest Gump". Sin embargo, si aquel personaje me pareció entrañable y cercano, Benjamin Button me pareció muy lejano, podría decir que parece un personaje de una poesía, en sí muy bonita pero que hace que la historia se vea como de lejos, en ningún momento me identifique con los personajes y en ocasiones el guión, tan "poético" me hace salirme de la película y en ocasiones hasta mirar el reloj, este inconveniente se ve además favorecido por la continua presencia de Julia Ormond que va leyendo la historia de Benjamin en su diario.
En definitiva, se trata de un resumen de la vida de una persona, y como la de cualquiera es una historia interesante, más aún si narramos en ocasiones etapas que nos han ocurrido a todos: el primer amor, la primera experiencia sexual, el primer viaje...hasta aquí todo muy bien, el problema es que el protagonista carece de la simpatía o mejor, de la personalidad que nos lo haga atractivo y queramos conocer más de él, de manera que en ocasiones estamos deseando saber más y en otras ocasiones estemos deseando que la historia pase a otra cosa.
No obstante el buen hacer del director y del director de fotografía logran envolverlo todo de una atmosfera de cuento-poesía que le dan un trato muy "artístico" al conjunto, aspecto a lo que contribuye también el tono de la narración o voz en off de Brad Pitt.
Es una poesía muy elegante y muy bien filmada que merece la pena verse, pero también es cierto que demasiado almibar en ocasiones empalaga.

Siempre he dicho y seguiré diciendo que lo más importante de una película es un guión original, y éste es de lo más original que he visto. Un matrimonio vive en su cenit, son ricos, tienen una gran casa, y el es un muy reputado abogado, vamos que han vivido por completo el sueño americano. Sin embargo llega el personaje de James Spader, que está obsesionado con el sexo y derrumba ese matrimonio que en lo único que se basaba era en una mera fachada de opulencia, pues el amor había desaparecido. TODOS los actores están estupendos y los diálogos son tan reales que te da la impresión de ver una historia que podría pasarle a los vecinos de al lado. El ritmo del film está estupendamente llevado por un gran Soderbergh, de modo que en ocasiones estamos concentrados en la pantalla deseosos de saber que contestará el personaje a continuación. Magistral y real como la vida misma. Su influencia posterior se nota en otra gran película como fue American Beauty.

Una historia que consigue marcar como pocas. Sobre todas las cosas una sublime dirección de Mel Gibson que consigue combinar un espléndido guión, una excelente fotografía y una música "mágica" para proporcionarnos de lo mejor en escenas de combate, discursos pro libertad y de levantamiento de los pobres contra los poderosos así como secuencias llenas de emoción que hacen que los 140 minutos de película pasen como si el film durase 80.
Imprescindible.