Estimable película de serie "B" de la Columbia, dirigida por el hábil artesano Rudolph Maté.
Protagonizada por la bella y sensual Pier Angeli, que aquí interpreta tres canciones, y Philip Carey en esta ocasión mejor actor que en otras películas como secundario. La trama, con algunos aspectos de cine negro, está bien desarrollada, con diálogos interesantes. Las escenas de acción muy bien resueltas. Lástima que el estilo narrativo, muy ágil en la primera parte, decaiga en el último tercio de la película.
Destacar, como fallo de guión, la increíble recuperación de la cojera del protagonista durante esta parte final. Rodada en Marruecos y con el llamativo technicolor de la época.
La recomiendo para pasar un rato entretenido.

Lo mejor que tiene esta película de Harold French es con diferencia
la soberbia interpretacion de Claude Rains.
El inicio es prometedor, pero va decepcionando con imperdonables
fallos de guion que culminan en un final totalmente descabellado.
La realizacion es correcta, filmada en un color chillón y antinatural.
A destacar la aparición en un corto papel de una joven Anouk Aimée.
Para "fans" de Claude Rains.

Lo mejor que tiene esta película de Mauro Bolognini son sus intérpretes. El guion de Pier Paolo Pasolini es interesante. Incluye una exposición del enfrentamiento entre clases sociales representadas por Tomas Milian y sus amigos por un lado y por otro el resto de los personajes principales.
Lástima que la realización de Bolognini sea un poco plana y no consiga transmitir demasiada emoción al relato.
De todas formas creo que es interesante su visionado.

Deliciosa comedia, dirigida, protagonizada, y con guion propio del gran Nino Manfredi. En ella se nos narra en tres partes bien diferenciadas, la infancia con "milagro" incluido, y su posterior influencia en la vida del protagonista que queda marcado por este hecho.
En la segunda se narra su entrada en un monasterio, con una descripción muy lograda en clave de humor de su
estancia en él.
En la tercera parte se narra su vida después de abandonar el monasterio y su encuentro con un libre pensador,
(estupendo Lionel Stander), que le ayudará a superar sus traumas infantiles.
Las tres partes están estupendamente enlazadas y tienen en común su humor con “mensaje”.
Muy recomendable.

Me ha gustado ese film de Abdellatif Kechiche sobre todo por ser una película sin artificios. Cuenta una historia de amor lésbico, sin elipsis y con gran realismo. Transmite la emoción fundamentalmente a
base de miradas dentro de abundantes primeros planos. Ni siquiera se ayuda de la música incidental que acompaña a casi todas las películas. La interpretación de las dos protagonistas es magnífica, sobre todo la de Adéle Exarchopoulos con su limpia mirada.
La fotografía es pulcrísima. Las 3 horas justas de proyección no se me hicieron excesivas, salvo quizás en su parte central.
Lo mejor: El tratamiento tan realista de la historia y las interpretaciones.
Lo peor: La primera escena de sexo entre las protagonistas, demasiado larga.