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Críticas de Lobo_Aullante
4 de septiembre de 2023
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Ante todo tengo que decir que soy un gran fan de la saga Resident Evil. He completado muchos de los juegos de la franquicia y he consumido mucho contenido acerca del lore de la saga. Me encantan los juegos survival horror, la saga Resident Evil y el cine de terror.
Siendo así, mi valoración de esta película no es la de un neófito. La película tiene aciertos y fallos. Funciona más como adaptación para darnos un caramelito a los fans de la saga, con sus referencias y easter eggs, que como película en sí misma.
Como película en sí es mala. Los efectos especiales son verdaderamente atroces, el humor y la historia de amor que se sacan de la manga no aportan nada a la trama, y verdaderamente no saben explicar en absoluto el lore de Resident Evil en el tiempo que dura la película (muy insuficiente para condensar el lore de RE1 y RE2).
Casi todo lo que aportan los "creativos" es una idea pésima. Realmente, no han dado una en cuanto a las licencias que se han tomado respecto a la trama original de los videojuegos. Todas las decisiones han ido a la contra de la calidad del producto. Me explayo en detalles en el spoiler.
Y, pese a todo ello, le pongo un 5. Creo que se merece el aprobado porque, por encima de todo esto, la película de Johannes Roberts respeta el espíritu original de la saga de Resident Evil: la ambientación, el atuendo de los personajes, el homenaje a la serie B, la sensación de indefensión frente al peligro... Está realmente bien lograda. Con limitaciones, quizás no con la mayor calidad... Pero respeta el espíritu original y nos brinda a loa fans la posibilidad de disfrutar de un life action que, sin duda, se identifica con la saga de videojuegos.
Por así decirlo, ha tenido la actitud pero le ha faltado el talento. Sin embargo, después de ver durante décadas cómo se desprestigia a esta franquicia tan querida en los live action, me ha alegrado mucho ver que al menos alguien ha intentado hacer una adaptación razonablemente fiel al espíritu original de la saga.
Me extiendo en detalles de los aciertos y desaciertos en el spoiler.
Siendo así, mi valoración de esta película no es la de un neófito. La película tiene aciertos y fallos. Funciona más como adaptación para darnos un caramelito a los fans de la saga, con sus referencias y easter eggs, que como película en sí misma.
Como película en sí es mala. Los efectos especiales son verdaderamente atroces, el humor y la historia de amor que se sacan de la manga no aportan nada a la trama, y verdaderamente no saben explicar en absoluto el lore de Resident Evil en el tiempo que dura la película (muy insuficiente para condensar el lore de RE1 y RE2).
Casi todo lo que aportan los "creativos" es una idea pésima. Realmente, no han dado una en cuanto a las licencias que se han tomado respecto a la trama original de los videojuegos. Todas las decisiones han ido a la contra de la calidad del producto. Me explayo en detalles en el spoiler.
Y, pese a todo ello, le pongo un 5. Creo que se merece el aprobado porque, por encima de todo esto, la película de Johannes Roberts respeta el espíritu original de la saga de Resident Evil: la ambientación, el atuendo de los personajes, el homenaje a la serie B, la sensación de indefensión frente al peligro... Está realmente bien lograda. Con limitaciones, quizás no con la mayor calidad... Pero respeta el espíritu original y nos brinda a loa fans la posibilidad de disfrutar de un life action que, sin duda, se identifica con la saga de videojuegos.
Por así decirlo, ha tenido la actitud pero le ha faltado el talento. Sin embargo, después de ver durante décadas cómo se desprestigia a esta franquicia tan querida en los live action, me ha alegrado mucho ver que al menos alguien ha intentado hacer una adaptación razonablemente fiel al espíritu original de la saga.
Me extiendo en detalles de los aciertos y desaciertos en el spoiler.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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22 de octubre de 2006
31 de 63 usuarios han encontrado esta crítica útil
No serán pocas las personas que se hayan sentido esfadas al salir del cine, después de ver este engendro de film que mezcla el gore con los cuentos infantiles, dos géneros totalmente incompatibles, y cuya fusión da lugar a un film absurdo y sin sentido alguno.
Y la verdad es que es una pena por que la película explicada en otro tono habría resultado mucho más satisfactoria, ya que la ambientación es realmente bella y cuidada, y los escenarios son fantásticos e imaginativos. Pero la historia en sí tiene poca fuerza.
A esta película se le ha promocionado como si fuera una aventura fantástica, pero en realidad se trata de un drama que muestra la crudeza de la guerra y el sadismo de las personas que tienen libre albedrío por parte del gobierno para hacer lo que les plazca con sus enemigos o la población civil. La película viene cargada con escenas gore, totalmente innecesarias y algunas de ellas dignas de mención por su repugnancia. Claro que, viniendo del sádico Guillermo del Toro, era de esperar.
Al margen de esto, hay una historia fantástica pero sin ningún tipo de sentido, típica y de desarrollo lineal y predecible, ya vista, y sin ninguna substancia ni nada nuevo que aportar al género, tan simple que podría haber sido escrita por un niño pequeño. La verdad es que no hay por donde cogerla, el mundo mágico que nos vendieron en la campaña de promoción únicamente se deja ver en momentos puntuales, empañado por un drama que nadie esperaba ver al entrar en la sala, y rematado por una gran cantidad de escenas repugnantes y desagradables, que de haber prescindido de ellas, la película habría ganado muchos puntos.
Realmente esta película no deja buen sabor de boca, no te llegas a encariñar con ninguno de los personajes, que están pésimamente desarollados, y algunas situaciones además son verdaderamente ridículas. En definitiva, un guión lleno de trampas. Lo único que es difícil de entender es que halla recibido una acogida tan buena por parte de la crítica, y todavía más, que la gente que opina sobre ella la alabe, ya que al salir del cine mi sensación fue que a los espectadores no les gustó nada, e incluso oí comentarios que no la dejaban en muy buen lugar. Supongo que habrá sido casualidad, aunque no soy el primero que hace esta observación en esta web.
Conclusión, El Laberinto del Fauno decepciona, ya que al menos a mí me había creado ciertas expectativas, y he salido ciertamente desilusionado del cine. Mi consejo es que no vayáis a verla. Pero en fin, cada uno tiene sus preferencias. Sarna con gusto no pica.
Y la verdad es que es una pena por que la película explicada en otro tono habría resultado mucho más satisfactoria, ya que la ambientación es realmente bella y cuidada, y los escenarios son fantásticos e imaginativos. Pero la historia en sí tiene poca fuerza.
A esta película se le ha promocionado como si fuera una aventura fantástica, pero en realidad se trata de un drama que muestra la crudeza de la guerra y el sadismo de las personas que tienen libre albedrío por parte del gobierno para hacer lo que les plazca con sus enemigos o la población civil. La película viene cargada con escenas gore, totalmente innecesarias y algunas de ellas dignas de mención por su repugnancia. Claro que, viniendo del sádico Guillermo del Toro, era de esperar.
Al margen de esto, hay una historia fantástica pero sin ningún tipo de sentido, típica y de desarrollo lineal y predecible, ya vista, y sin ninguna substancia ni nada nuevo que aportar al género, tan simple que podría haber sido escrita por un niño pequeño. La verdad es que no hay por donde cogerla, el mundo mágico que nos vendieron en la campaña de promoción únicamente se deja ver en momentos puntuales, empañado por un drama que nadie esperaba ver al entrar en la sala, y rematado por una gran cantidad de escenas repugnantes y desagradables, que de haber prescindido de ellas, la película habría ganado muchos puntos.
Realmente esta película no deja buen sabor de boca, no te llegas a encariñar con ninguno de los personajes, que están pésimamente desarollados, y algunas situaciones además son verdaderamente ridículas. En definitiva, un guión lleno de trampas. Lo único que es difícil de entender es que halla recibido una acogida tan buena por parte de la crítica, y todavía más, que la gente que opina sobre ella la alabe, ya que al salir del cine mi sensación fue que a los espectadores no les gustó nada, e incluso oí comentarios que no la dejaban en muy buen lugar. Supongo que habrá sido casualidad, aunque no soy el primero que hace esta observación en esta web.
Conclusión, El Laberinto del Fauno decepciona, ya que al menos a mí me había creado ciertas expectativas, y he salido ciertamente desilusionado del cine. Mi consejo es que no vayáis a verla. Pero en fin, cada uno tiene sus preferencias. Sarna con gusto no pica.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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¡Patos!
4 de octubre de 2006
8 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
Sin grandes pretensiones, "Algo pasa con Mary" es una comedia diferente, que nos brinda una disparatada y absurda historia de amor, con un protagonista inocente y tontorrón, papel hecho a medida para Ben Stiller, que no puede dejar de pensar en Mary, la chica de la que se enamoró en el instituto, la cual no ha podido olvidar muchos años después.
Un buen día, seguro de que ella es la chica de sus sueños, decide emprender su búsqueda, sin embargo, no será el único que desea ver a Mary rendida a sus brazos.
Con un humor descarado y facilón, la película da un soplo de aire fresco, y renueva el género de las aburridas, recatas y lamentables comedias románticas a las que el cine norteamericano nos tenía tan acostumbrados.
Una comedia desternillante con tres o cuatro secuencias puntuales en las que más de uno se debe haber partido el pecho, tanto que, muy a pesar de los detractores de esta innovadora película, algunas de ellas ya han pasado a la historia de el cine.
Y es que en Algo pasa con Mary, el grosero y patético humor de los Farrelly se convierte extrañamente en el principal reclamo de la película, algo así como si todas las situaciones brillantes que han imaginado e imaginarán en su vida, vinieran a su cabeza únicamente durante el tiempo en que duró la producción de esta película.
Como valor añadido, la película hace homenaje a la magia del amor sincero sin resultar empalagosa, más bien al contrario, consigue transmitirnos sin caer en ningún tópico del género el mensaje de que todos tenemos una alma gemela.
Divertida y entrañable, un servidor la recomienda como antídoto a todas las miserias de la vida.
Un buen día, seguro de que ella es la chica de sus sueños, decide emprender su búsqueda, sin embargo, no será el único que desea ver a Mary rendida a sus brazos.
Con un humor descarado y facilón, la película da un soplo de aire fresco, y renueva el género de las aburridas, recatas y lamentables comedias románticas a las que el cine norteamericano nos tenía tan acostumbrados.
Una comedia desternillante con tres o cuatro secuencias puntuales en las que más de uno se debe haber partido el pecho, tanto que, muy a pesar de los detractores de esta innovadora película, algunas de ellas ya han pasado a la historia de el cine.
Y es que en Algo pasa con Mary, el grosero y patético humor de los Farrelly se convierte extrañamente en el principal reclamo de la película, algo así como si todas las situaciones brillantes que han imaginado e imaginarán en su vida, vinieran a su cabeza únicamente durante el tiempo en que duró la producción de esta película.
Como valor añadido, la película hace homenaje a la magia del amor sincero sin resultar empalagosa, más bien al contrario, consigue transmitirnos sin caer en ningún tópico del género el mensaje de que todos tenemos una alma gemela.
Divertida y entrañable, un servidor la recomienda como antídoto a todas las miserias de la vida.
11 de mayo de 2007
3 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
A estas alturas, con esta tercera entrega de la saga de Sam Raimi sobre las aventuras del hombre araña arrasando en las salas y batiendo récords de taquilla, supongo que a nadie le quedará ya duda de que estamos ante la mejor adaptación de un cómic que se ha llevado a la gran pantalla.
Sam Raimi nos sabe transmitir como nadie la esencia de Spiderman, la esencia de Peter Parker, el héroe más humano. Detrás de la máscara de Spiderman se esconde un muchacho sencillo y con un gran sentido de la responsabilidad, alguien con quién podríamos cruzarnos por la calle, o encontrarnos en el andén esperando el metro. Lejos de su alter ego, Spiderman, Peter Parker es una persona cercana a nosotros, una persona que comparte nuestros problemas. Tiene malos días, problemas con su pareja, estudia para labrarse un futuro profesional, tiene sus inseguridades y sus dilemas morales. Es el héroe siempre dispuesto a ayudar, cuyo motor no es la venganza sino la ética y el sentido de la justicia. Spiderman es el héroe moral.
En esta tercera parte, Sam Raimi nos vuelve a regalar su genial enfoque de Peter Parker, desde la perspectiva con tintes cómicos que nos ofreció en las otras dos películas. Esta mezcla de humor e ironía, ejectutada a la perfeción con Tobey Maguire en el papel de superhéroe un tanto pardillo, enamorado como siempre de la mujer de sus sueños, Mary Jane Watson, interpretada de nuevo por Kirsten Dunst, cuyo papel le viene también como anillo al dedo. El tándem Tobey Maguire y Kirsten Dunst funciona a la perfección, ya que tienen una química especial dentro de la película e interpretan muy convincentemente todos esos conflictos de pareja tan cotidianos y a la vez tan mágicos.
De nuevo, Raimi se centra en la vida personal de Peter Parker para contarnos una historia trepidante que no dejará indiferente a ningún seguidor de la saga. La película es más espectacular que nunca, el seguimiento de la cámara durante las batallas y las escenas de accíón brilante, con unos planos que dejan la boca abierta. Los efectos especiales brutales, realmente inmejorables, incluso llegan a dejar a los de las otras dos obsoletos. El diseño de los villanos también esta relamente muy logrado, en especial el de Venom, que bien seguro que es el Venom que todos los seguidores de Spiderman han imaginado siempre en sus cabezas.
Evidentemente hay que ir a ver la película concienciado de que no se va a encontrar en ella algo innovador o trascendental, ni nada que reinvente el género. Quién espere una obra maestra o un futuro clásico mejor que se quede en casa. Ésta es una película comercial, divertida, y de sobras espectacular para que merezca la pena ir al cine para verla. Spiderman 3 es la digna secuela de la saga de Sam Raimi, un genio capaz de llevar al cine con tanto acierto el exitoso personaje creado por Stan Lee, el superhéroe más querido por todos.
Sam Raimi nos sabe transmitir como nadie la esencia de Spiderman, la esencia de Peter Parker, el héroe más humano. Detrás de la máscara de Spiderman se esconde un muchacho sencillo y con un gran sentido de la responsabilidad, alguien con quién podríamos cruzarnos por la calle, o encontrarnos en el andén esperando el metro. Lejos de su alter ego, Spiderman, Peter Parker es una persona cercana a nosotros, una persona que comparte nuestros problemas. Tiene malos días, problemas con su pareja, estudia para labrarse un futuro profesional, tiene sus inseguridades y sus dilemas morales. Es el héroe siempre dispuesto a ayudar, cuyo motor no es la venganza sino la ética y el sentido de la justicia. Spiderman es el héroe moral.
En esta tercera parte, Sam Raimi nos vuelve a regalar su genial enfoque de Peter Parker, desde la perspectiva con tintes cómicos que nos ofreció en las otras dos películas. Esta mezcla de humor e ironía, ejectutada a la perfeción con Tobey Maguire en el papel de superhéroe un tanto pardillo, enamorado como siempre de la mujer de sus sueños, Mary Jane Watson, interpretada de nuevo por Kirsten Dunst, cuyo papel le viene también como anillo al dedo. El tándem Tobey Maguire y Kirsten Dunst funciona a la perfección, ya que tienen una química especial dentro de la película e interpretan muy convincentemente todos esos conflictos de pareja tan cotidianos y a la vez tan mágicos.
De nuevo, Raimi se centra en la vida personal de Peter Parker para contarnos una historia trepidante que no dejará indiferente a ningún seguidor de la saga. La película es más espectacular que nunca, el seguimiento de la cámara durante las batallas y las escenas de accíón brilante, con unos planos que dejan la boca abierta. Los efectos especiales brutales, realmente inmejorables, incluso llegan a dejar a los de las otras dos obsoletos. El diseño de los villanos también esta relamente muy logrado, en especial el de Venom, que bien seguro que es el Venom que todos los seguidores de Spiderman han imaginado siempre en sus cabezas.
Evidentemente hay que ir a ver la película concienciado de que no se va a encontrar en ella algo innovador o trascendental, ni nada que reinvente el género. Quién espere una obra maestra o un futuro clásico mejor que se quede en casa. Ésta es una película comercial, divertida, y de sobras espectacular para que merezca la pena ir al cine para verla. Spiderman 3 es la digna secuela de la saga de Sam Raimi, un genio capaz de llevar al cine con tanto acierto el exitoso personaje creado por Stan Lee, el superhéroe más querido por todos.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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30 de agosto de 2008
5 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Con un pulso magistral para el suspense, Stanley Kubrick nos brinda una inquietante película que explora en profundidad la complicada psicología de las relaciones de pareja. En Eyes Wide Shut se funde la fantasía del deseo con aquella oscura atracción que produce en nuestro subconsciente aquello que nos resulta ajeno y desconocido.
El despecho, los celos o la fidelidad hacia la pareja, son algunos de los temas que Kubrick pone en bandeja en esta fascinante película que nos descubre algunos de nuestros propios fantasmas que temen ver la luz. En Eyes Wide Shut la verdad y la mentira están separadas únicamente por un fino velo que resulta casi transparente, y todo se tambalea alrededor del delicado borde de aquello que separa lo real de lo imaginario.
Trabajo complejo de un Kubrick que nos muestra su faceta más personal. La ambientación de la película es inmejorable, seductora e intrigante, y en todo el metraje está presente la mano de Kubrick, que rinde tributo a su propia genialidad.
El despecho, los celos o la fidelidad hacia la pareja, son algunos de los temas que Kubrick pone en bandeja en esta fascinante película que nos descubre algunos de nuestros propios fantasmas que temen ver la luz. En Eyes Wide Shut la verdad y la mentira están separadas únicamente por un fino velo que resulta casi transparente, y todo se tambalea alrededor del delicado borde de aquello que separa lo real de lo imaginario.
Trabajo complejo de un Kubrick que nos muestra su faceta más personal. La ambientación de la película es inmejorable, seductora e intrigante, y en todo el metraje está presente la mano de Kubrick, que rinde tributo a su propia genialidad.
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