Es una película que puede mantener su ritmo de principio a fin. Su humor es tragicómico. Con mucho de surrealismo y magia, es contada una historia frecuente, exagerada o contextualizada de una manera difícil de imaginar. Muy bien en sus roles Penélope Cruz y Carmen Maura.

En ésta película se observa la falta de compromiso de seres humanos a los que se les otorga la sagrada misión de declarar culpable o inocente, a un joven por homicidio en primer grado. La condena consiste en la pena de muerte.
Difícil condena que arbitrar que provoca varias situaciones conflictivas en el debate. Tiende a parecerse a una obra de teatro, por transcurrir casi toda la película en un solo ambiente. Porque no tiene artificios de ninguna naturaleza, sólo es cada actor y su interpretación de su personaje todos muy bien logrados. Excelentemente dirigida y puesta en escena. Deja como cuestión planteada, la eficacia o no del régimen de jurados del sistema judicial, aunque no da salida. En nuestro país piensa llegarse a ese sistema porque se considera más democrático. Tal vez hay aspectos que no se toman en cuenta, como éste, que seguramente en muy fácil de que suceda. Película muy buena en contenido y actuación.

Me resultó una película de terror de las más escalofriantes que he visto ... no por la temática, ni la puesta que es muy parecida a muchas películas del género de casa encantada, sino por el ritmo de la película, que logra mantener la atención aterradora constante del espectador.

Eliseo Subiela continúa con su temática, poética, nostalgiosa de los crímenes de la dictadura, pero sin compromiso. En contexto similares a sus otras películas, ahondando en la sicología del protagonista ( Darío Grandinetti) con voz en off de sus propios pensamientos, mezclados siempre con poesías de Benedetti, todo recuerda a la gran película "El lado oscuro del corazón", pero en esta ocasión es repetitiva su composición y no logra convencer a nadie.

Película plagada de sinceridad, de simplicidad, de cotidianeidad en la vida de adolescentes, donde el protagonista es gay. Muy buenas actuaciones y escenarios. Buen guión. Muy fresca, vemos la película desarrollarse sin grandes sobresaltos; hasta que algo cambia los planes de Simón. Empieza a sufrir, su "destape" no podrá ser de la forma en que lo planeó. Se va a alejar en principio de sus mejores amigos lo que que se sorteará. Es una hermosa familia la que contiene al protagonista al igual que la escuela como Institución. Vamos a terminar con un final sumamente emotivo. Me encantó. La recomiendo totalmente, luego de ver tanto sufrimiento en el cine por la lucha del orgullo gay, ésta película manifiesta un cambio de época muy esperanzador en la construcción de relaciones más sanas entre todos los jóvenes heterosexuales o no.