La primera temporada engancha, tiene intriga y una atmósfera que te atrapa y te mantiene en vilo, todas las interpretaciones son muy buenas, la canción con las que termina cada capitulo inmejorable, aunque todo lo que te ofrece el guión lo tienes que digerir sin hacerte demasiadas preguntas, ciencia ficción plagada de agujeros, pero que sirve para que pases un buen rato y tengas unas largas reflexiones sobre la sociedad en la que esta basada el relato.
Mi baja puntuación viene dada por la segunda temporada, y que me plantea seriamente seguir con una tercera. Lenta y tediosa hasta el aburrimiento más descabellado, se nota que la brillantez del libro se pulió en la primera temporada y no tenían pensado continuar, y los guionistas a los que ofrecieron la continuación del relato no acertaron en nada, los giros no llevan a ningún sitio, parece que siempre es un volver a empezar y sigues y sigues esperando a que pase algo novedoso y que cambie la historia y nada, pero bueno, llega el último capitulo y en los últimos 20 minutos pasa algo para que los sufridos y masoquistas espectadores esperen algo de una tercera entrega. Eso sí, las interpretaciones y la banda sonora lo único que la equipara a la primera temporada.

Antes de nada decir que de momento vi las tres primeras temporadas y tengo pensado ver las siguientes aunque asuste un poco eso de los 20 capítulos.
Esta serie ya esta demasiado criticada, pero quiero recordar a los que hacen comparaciones con Juego de Tronos, que por favor no mezclen la mierda con la pomada, o que no fumen ni beban cuando escriben la critica. Acaso comparáis los Tudor con Juego de Tronos, seguro que no, pues con Vikings hacer lo mismo.
Vikings es una serie histórica basada en hechos poco conocidos por la época en la que suceden (entre los siglos VII y IIX), se trata de los primeros pueblos nórdicos del que se dejó muy poco escrito (aun no sabían escribir) y lo que escribían sobre ellos los pueblos saqueados a veces tenia poco que ver con las leyendas e historias procedentes de Escandinavia, y ésto es lo que da juego a la serie, mitad leyenda, mitad realidad e historia de los primeros pobladores del norte de Europa.
Vikings es vibrante desde su inicio, multitud de personajes que van enriqueciendo la serie y haciéndola adorable, siempre suceden cosas. Los escenarios, las localizaciones, la fotografía, los utensilios, el vestuario, la forma de vivir salvaje, el trato al sexo, la fiesta, la familia, todo esta muy cuidado y detallado, no cae en clichés de bárbaros contra cristianos, y se le da el mismo trato a ambos, no siempre los cristianos iban a ser los buenos, no siempre Dios fue mejor que Odín.

Comedia ácida sobre la desidia del ser humano, el atropello emocional y el rumbo de la juventud narrado con excelente cercania y negro sentido del humor. Me parece una comedia diferente y arriesgada con la que me reí a destajo, fuera de lo convencional y lo comercial, compleja y con mimbres suficientes para convertirse, con el tiempo, en una pequeña joya de culto.
El personaje principal,el nini Lázaro (Aimar Vega), es tan reconocible en el "ecosistema" , tan simpático y subnormal que no sabes si odiarlo, quererlo o matarlo. El padre y el hermano, fracasados y amargados casi por igual, también sobresalen en la interpretación.

Si funciono la primera para que vas a tocarla, no valla a ser que demos giros novedosos metamos alguna historia nueva y la caguemos. Netflix tiene poco a lo que agarrarse para garantizar caja a corto plazo, y eso juega en contra de Stranger Things 2.
La serie se ve y divierte a la familia, pero perdió la frescura, la sorpresa, la originalidad y el desparpajo de la primera, porque todo se parece a la primera, se ha hecho poco para algo de lo que se esperaba mucho, eso si, dejando una inmensa puerta abierta a más temporadas y más de lo mismo. Lo mejor siguen siendo los guiños ochenteros, música y estética, hay que agradecer la inclusión del chico "heavy", que no hace ni aporta absolutamente nada, pero que por lo menos lleva buena música en el coche, sin embargo la hermana es un acierto.
Las opiniones sesudas ya están más que deliberadas en otras criticas, así que dejo en spoiler dos curiosidades y nada más.

Estamos ante una película larga dividida en tres actos, que quiere ser un una adaptación original a la ya más que trillada novela de Bram Stoker. No era necesario. Nos plantan a un Conde simpático, interesado por la cultura y galán enamoradizo. El primer capitulo es el salvable de los tres, se puede ver con soltura y te pide el siguiente, pero los otros dos se hacen lentos hasta la extenuación, y el que diga que hay algo de terror, humor, sangre a borbotes o algo interesante de lo que nos quieren vender, no lo entiendo, aunque el director tiene derecho a filosofar con lo que le pete y largarse un final shakesperiano para dejar a sus adeptos con la sensación orgásmica de haber visionado una miniserie sorprendentemente buena.
Lo mejor los efectos especiales, que en la era digital ya empieza a ser corriente, y que habiendo pasta, y en netflix tiene que haberla, no deberían de fallar.