Muchos de nosotros vemos como nuestra vida avanza de temporada en temporada (no de año en año), asociamos recuerdos del pasado al partido de fútbol que se jugaba aquel día y hemos sacrificado muchas cosas por poder ver un determinado encuentro, por eso esta película me produce ese raro sentimiento de ver cómo alguien puede captar mi (nuestra) forma de ver la vida tan fielmente.

Lo que hay que aconsejar antes que nada es la lectura del fantástico libro de Nick Hornby en el que se basa, "Fiebre en la gradas", un interesantísimo retrato de un jóven aficionado inglés que relata diferentes momentos de su vida salpicados por su amor por el Arsenal y la asistencia a Highbury cada fin de semana. La película en sí es correcta sin más, no destaca especialente por ningún valor en concreto pero es entretenida y se deja ver. El aficionado al fútbol disfrutará con el personaje interpretado por Colin Firth y su inseparable amigo y compañero de grada, al que da vida el ahora tan en boga Mark Strong, y el espectador menos interesado en el deporte rey tendrá que poner su atención en la historia de amor entre una culta y algo snob profesora de colegio y un supporter enfermizo del Arsenal que vive por y para el fútbol.

Yo, como fiel aficionado al fútbol, recomiendo verla.

Para mi es la mejor película que ha hecho Spielberg desde Inteligencia Artificial, porque con "La Terminal" y "La guerra de los mundos" la verdad es que se lució.

Los movimientos de cámara de Spielberg son de referencia y la fotografía de Kaminski es también impresionante; realmente cuando ves "Munich" te parece que estés viendo una película rodada en 1972 o 1973, la imagen es más cierta que la propia realidad, y la ambientación y el vestuario se merecen un sobresaliente. La música cumple muy bien aquí su papel, que es el de acompañamiento, porque no hace falta música para hacer que ninguna secuencia de la película resulte más trascendente. Así que técnicamente, 10 para "Munich".

Y en cuanto a los actores, pues la verdad es que lo hacen muy bien. Cada vez me gusta más Eric Bana (en Troya tiene que enmendarles la plana a todos los demás), y Daniel Craig cumple de sobras (a ver que tal le van las cosas cuando se ponga al servicio secreto de su majestad). Igual algunas secuencias sobran un poco, como la del padre del contacto francés, pero así podemos ver a Michael Lonsdale.

No me voy a meter en temas de guión o de posicionamiento del director hacia el tema, porque te puede llover de todo. Como parece ser que Spielberg es un manipulador de la leche, supongo que el oscar se lo llevará la demagogia de los "village people" del far west.

Fui a ver esta película convencido por dos amigos, y es la única vez que mediada la película me han entrado ganas de largarme de la sala... y desearía haberlo hecho.
La película es una mezcla de "Blade", "Matrix", "El señor de los anillos", "Torrente" y cualquier videojuego de lucha, todo ello pasado por la trituradora y metido con calzador de una manera que nunca he visto.

El argumento es la mayor paranoia que ha parido mente humana: luchas entre antiguas civilizaciones por preservar el bien o hacer triunfar a la oscuridad, vampiros malos, vampiros buenos que matan a los vampiros malos, hombres oso, mujeres pantera y demás fauna de pelopicopata que no viene a cuento de nada, tramas y subtramas sin sentido que te distraen del objetivo principal del bodrio....

Y así podíamos estar horas y horas. Lo peor de todo es que se oía que iba a haber más secuelas, una de ellas rodada en Estados Unidos. Si es verdad, Hollywood tiene la misma vista que Rompetechos.

Yo también tenía muchas ganas de que me gustara Superman Returns, principalmente porque todo lo que se venía haciendo ultimamente en el terreno de las películas de superhéroes era revisitaciones de los filmes originales o nuevas sagas, y ésta anunciaba la continuación de las aventuras del hombre de acero desde donde lo dejó en Superman II.

Y es una pena que la cosa no ha avanzado nada, la historia sigue en el mismo punto, o peor. Superman vuelve desde Krypton después de cinco años de ausencia en la Tierra, y prácticamente no hay explicación alguna acerca de lo que le movió a irse (al no haber explicaciones, tampoco hay apenas evolución en el personaje de Superman, que sigue siendo el mismo). Al no incidir el guión en este aspecto -que sería el más interesante y el que haría avanzar la saga y llevarla a otros campos- se centra en los cambios a los que tiene que hacer frente Superman a su vuelta a la tierra (que se reducen casi exclusivamente al cabreo de la nueva y sosa Lois Lane por la huida a la francesa de su supermedianía de acero) y la nueva cabronada a la que le somete Lex Luthor.

En fin, que lo mejor de la película son los títulos de crédito (por hacernos recordar la película de Richard Donner) y algunas imágenes icónicas, como la de Superman acercándose a la luz del sol para recobrar fuerzas.

En cuanto a los actores, bien Brandon Routh (si su personaje es algo soso es porque el guión no le da más margen de maniobra), regular Kevin Spacey y mal Kate Bosworth (por la antipatía que provoca, ella es la auténtica villana de la película, y además Parker Posey es mucho más guapa que ella) y su sorpresa-retoño.

La verdad es que he inflado un poco la nota (habría sido quizás más justo darle un 7 o 7'5), pero los buenos recuerdos que me trae la película le han hecho subirunos puntillos.

Es una de esas típicas películas de los 80 de aventuras para niños, de las que ya no se hacen, y que todos hemos visto de pequeños cada vez que la reponían por la tele. Ahora mismo no podría decir el título de ninguna película estrenada en los últimos años con las mismas características de "Los goonies". Lo interesante de esta película (y de muchas otras parecidas hechas en la década de los 80) es que a pesar de que el argumento muestre unos hechos bastante estrambóticos e improbables, la película es muy coherente y se toma el guión con seriedad (dentro de que es una película con humor). Muy buena dirección de Richard Donner -al que por lo visto los niños se las hicieron pasar moradas- que demuestra que puede tocar todos los terrenos con bastante éxito y mostrándose tan suelto en este género como en el de terror con "La profecía", el de aventuras con "Superman", el de acción con "Arma letal" o la comedia con "Los fantasmas atacan al jefe".

La apertura de la película -con la huída de los Fratelli de la cárcel- demuestra la soltura de Donner en escenas de acción y consigue en muy pocos minutos dibujarnos a cada uno de los protagonistas.

Aunque no tiene mayor importancia, son muy divertidas las broncas y las peleas entre la madre de los Fratelli y los dos hermanos (muy bien interpretados por Joe Pantoliano y Robert Davi).

El único fallo es que hay partes de la película que te remiten a otras escenas que finalmente fueron eliminadas del metraje, por lo que en un primer momento puedes pensar que te has perdido algo por el camino.