Niña que cambia de ciudad y de instituto y después de un día decide que no se adapta.
Constante ridiculización del hombre y el recurrente pensamiento futbolero.
Los homnipresente personajes femeninos que manejan el cotarro y son listos e inteligentes, mientras tanto el sentimiento del miedo es bobo y torpe y el de la furia un ser masculino embrutecido y sin control.
La alegría dirige todo y es la que manda junto a un ser odioso gordo y con gafas que es la tristeza.
Chistes ridiculizando al hombre hacen gracia, si hubiera sido al reves la película ni se hubiera estrenado.
Penosa manipulación sobre la adolescencia y los recuerdos y sentimientos.

J. R. R. Tolkien debe estar removiéndose en su tumba.
Han prostituido su obra, introduciendo personajes que jamás aparecerían en sus escritos.
Elfos negros, negrolas, hobbits negros, mujeres empoderadas, faltan asiáticos, suramericanos y trans y sobre todo lesbianismo.
Hoy en día el cine consiste en meter con calzador personajes del nwo y muchos efectos especiales, dónde desaparece el arte escénico, la actuación y todo queda resumido en frases hechas por ordenador, sin alma.
Un desastre.

Sencillamente vomitivo.
Es un insulto hacia las víctimas del terrorismo vasco de ETA.
No se puede ser más miserable y rastrero que Évole, dando voz a un criminal.
Jamás se debería haber permitido la emisión de este nauseabundo panfleto de apología del terrorismo.
Usan la palabra "conflicto" para justificar los asesinatos de la banda ETA. Es peor si cabe que justificar el holocausto a manos de Adolf Hitler.
Ningún ser que se considere humano puede justificar esto.
Durante la entrevista para colmo confiesa un crimen del que no se sabía la autoría, la desfachatez de este monstruo es total.