Ya sabía que había algo especial en La Noche de los muertos vivientes cuando la ví por primera vez con 13 años. Ahora que he podido verla otra vez con más conocimiento de causa, entendiendo más el material tanto a nivel técnico como argumental y filosófico es cuando soy capaz de entender la grandeza de esta cinta.

Esto no es una obra de culto, es una obra clásica y punto.

Si queréis escuchar un análisis en profundidad, dadle un tiento: http://www.ivoox.com/terror-no-tiene-podcast-episodio-46-audios-mp3_rf_25838955_1.html

La primera entrada de la saga de Nami Matushima la Escorpión es sin duda una película tremendamente particular. Para empezar existe una dualidad extraña a la hora de encarar la temática del rol femenino. Por un lado podemos ver que es una obra con una protagonista fuerte, que no teme a nada y que es capaz de enfrentarse a todo tipo de adversidades, así como hacer frente al malvado hombre que la traicionó. Por otro...bueno digamos que hay muchos desnudos y sexo lésbico... algo normal siendo una "women in prison" que tiene mucha influencia del pinku eiga.

Sin duda una de los mejores puntos de la película es la sublime interpretación de Meiko Kaji. Pero además hay muchos otros aspectos interesantes, como la fotografía de la película y lo bien que juega con los colores y los efectos de cámara en muchos momentos. Es sin duda una película visualmente atractiva.

Lo malo quizás sea su guión y edición. Por un lado todos los acontecimientos de la carcel parecen algo desconectados los unos de los otras, dándome a entender que el guión se estructuró más pensando en distintos "torture pieces" no muy bien entrelazados en los que Matsu tiene que sobrevivir, más que creando una historia de supervivencia coherente. Y después, el segundo climax de la película, la venganza que todo el mundo espera, se siente muy apresurada y no tiene impacto emocional, ya que muchos de los personajes que aparecen, y sufran la ira de nuestra protagonista, no los conocemos y son despachados rapidamente en un par de minutos, dejándonos con un final algo insatisfactorio.

Pese a esto, la cinta es maravillosa y me ha dejado con suficiente buen sabor de boca como para querer volver a por más en esta saga. Muy recomendada para los amantes del cine de culto, especialmente si os guste el asiático.

Para tratar un tema tan interesante como el que Cropsey se plantea, creo que hasta cierto punto su trabajo es algo fallido en mi opinión.

Para empezar la exposición de todos los detalles de la historia es algo errática y caótica y en algunos momentos me costaba seguirla, pues no sabía si iba a centrarse más en la leyenda urbana o en los casos reales que sucedieron más tarde. Esto se debe sobretodo porque no se establece una conexión lógica entre ambos fenómenos más allá de exponer sus semejanzas, pero teniendo a mano un tema tan interesante como las leyendas urbanas (que en este caso además inlfuenciaron a muchísimas obras), psicología e histeria de masas, casos reales perpetrados por personas con serios problemas mentales,...me da pena no ver que se hiciera una reflexión más profunda al respecto.

Aún así, el documental puede hacer las delicias de los fans del género.

31 ha sido mi última decepción con Rob Zombie después de que Lords of Salem no consiguiera darme lo que buscaba. Me gusta la idea de que el director haga lo que quiera y se deje llevar por su mundo interior y locura, pero lo cierto es que su nueva cinta no nos cuenta nada nuevo o interesante (de hecho es casi volver de nuevo a su primera película), y está contando de forma pésima.

Sí, como viene siendo habitual en Zombie, tiene elementos interesantes, sobretodo a la hora de mostrarnos a los psicópatas; y la actuación de Richard Drake es magnífica (especialmente comparada con la basura que tienes que soportar en otros momentos). Pero la película apenas se siente tan violenta como se nos quería vender (por una mala edición y trabajo de cámara sobre todo) y su trama es bastante insulsa e insustancial.

31 podría haber sido una cinta muy interesante a pesar de que no es más que un refrito de viejas ideas; pero a estas alturas ya no sé si los estudios se meten en el trabajo de Zombie o es este el que no se da cuenta de las cagadas que hace y las oportunidades que pierde...

Aunque Night of the Comet sea otra de esas películas que no solemos recordar tan a menudo en nuestro momentos de nostalgia ochentera, pero sin duda es una pequeña joyita a tener en cuenta.

Lo más curioso de la cinta es lo increiblemente tan autoconsciente que es en su trama y personajes. Tanto es así que hasta parece ser una parodia en sí misma del cine ochentero (aunque con obvias referencias también a la ciencia ficción "drive-in" de los cincuenta). Esto es especialmente evidente en esa representación tan insustancial de sus dos protagonistas, ambas con un encanto y química especial, y en la forma en la que ambas se relacionan con el mundo que las rodea y el resto de variopintos personajes que lo pueblan.

Cierto es que si esta cinta se hiciera a día de hoy el chiste sería mucho más precioso y afilado, sin embargo, la película destila una magia especial como pocas películas.

Muy recomendada para los nostálgicos.