La película de Danny Boyle muestra la capacidad tan incompresible de las personas a pesar de cualquier situación. En esta ocasión nos encontramos ante la típica película de zombies. Un virus extermina a la raza humana y los convierte en animales llenos de ira. El trabajo del director llega a buen puerto a pesar de que sus minutos finales no puedan convencer o determinar que 28 días después podría haber sido algo mayor.

Su inicio es sobrecogedor, presentación suficiente para darnos a entender a la perfección sobre lo que va a acontecer en las próximas dos horas aproximadamente. Aprovechable los destacados planos de cada lugar y el sombrío detalle de las ciudades en las que se realiza la acción. Luego está su música aceptable, que aporta un clima perfecto en cada parte. A pesar de su desenlace discutible, hasta ese momento presenciamos una notable película de terror aunque no de el miedo que deseamos esperar. Lo que le hace fuerte al filme es su tonelaje de agobio y desesperación, sin olvidarme de los protagonistas. La elevada e importante ascendencia que consiguen acaba siendo víctima del guión tan descendente.

Boyle hace bien en darnos una pequeña historia de conocimiento entre los personajes principales acoplándola al hecho principal.
Cillian Murphy acaba siendo un superviviente a lo acorralado sin nínguna duda pero obtiene una gran función viendo la clase de trabajos que siempre ha hecho. Luego los demás están correctos y contienen en cada aparición una energía muy positiva.

Esta película puede que sea una de las mejores en cuanto a su tema principal, aunque gire bruscamente en su argumento y deje atrás sus buenos principios, puede considerarse que es un gran avance acompañado de una gran estetica.

No se le escapa nada al nuevo "Spielberg" del siglo XXI en esta nueva entrega tratándose además de una saga poco aprovechada. Y es que va como la seda de momento su carrera como director culminando sus trabajos con una nota muy seria.

Productor, director, guionista y compositor de series tan aclamadas como Lost ( Perdidos ) aquí en España o Alías, realiza una impecable tarea en esta nueva Misión Imposible dotándola con una fuerza increíble, obteniendo un buen repertorio de secuencias de acción consiguiendo íncreibles e incomensurables resultados. Fuerte también es su historia y en ningún momento cae al precipicio como muchas películas de este ambiente. Música compuesta por él mismo perfectamente acoplada. Su trabajo no acaba siendo tan excelente por darnos cuenta y obviamente ser conscientes de que según van transcurriendo los minutos esta "misión" se encuentra una serie de obstáculos y la convierte en una surrealista cinta. Hechos que nos cuesta creer, demasiada imaginación. Y por último destacar a su favor el notable rodaje en uno de los edificios mas emblemáticos de Shangai, (China).

Tom Cruise vuelve en estado puro, igual o mejor que en sus predecesoras dándole a su personaje el carácter tan importante que este requiere. Ving Rhames, Laurence Fishburne junto a Jonathan Rhys Meyers y una bellísima Maggie Q consiguen un necesario y buen trabajo. Philip Seymour Hoffman, el villano en cuestión, le pone las cosas más que dificiles al protagonista haciendo una digna participación.

En definitiva, espectáculo y entretenimiento con sus grandes FX en sus 2h aproximadamente y una nueva demostración de la calidad tan experimentada de este director que ya nos sorprendió con la nueva adaptación de Star Trek y ahora lo vuelve a hacer con esta tercera entrega, con nuevas aventuras del agente Ethan Hunt haciendo de ella una película metida en el ámbito de las anteriores pero pudiendo probablemente ser perfectamente única sin necesitarlas.

A lo largo de la historia en el mundo cinematográfico todo ha ido cambiando, unos pensarán que a mejor, otros que a peor, pero aquí estamos y seguimos siendo testigos de obras no muy extraordinarias pero si lo demasiado convincentes como es en el caso de Snatch, Cerdos y diamantes. Una valiosa película demasiado astuta a las órdenes de Gut Ritchie, recientemente ha llevado al cine Sherlock Holmes y ya prepara su secuela con Robert Downey Jr. de nuevo.
Maneja una buena mano en su historia y nos encontramos ante un montaje fantástico dotándonos de un espectacular entretenimiento a más no poder con una serie de actores detrás que en ningún momento flaquean.

Le llegaría una gran oportunidad a Brad Pitt de seguir demostrando el buen actor que era en su momento y es a día de hoy haciendo que nos partamos el culo de risa con su personaje. Incluso no saliendo todo lo que deseamos en el film, lo borda gracias a su amplia y extensa gama de recursos actorales.
Brutal Vinnie Jones sin olvidar al correcto Jason Statham haciéndose un hueco en la industria.

Giros inesperados y secuencias importantes a la altura de una comedia con tintes de thriller y acción harán que esta película se convierta en una de tus imprescindibles cintas para tu videoteca.

Una historia demasiado compleja y simple para uno de los mitos más famosos en el cine de aventuras. No entiendo muy bien cual era el cometido de esta película porque llevar otra vez a la gran patntalla a Robin Hood es una hazaña complicada después de todas las anteriores versiones del príncipe de los ladrones. Y es que esta nueva aventura escasea, a parte de la falta de acción y de un guión mejor elaborado sus actores intentan dar lo mejor de sí mísmos pero aunque lo consiguen a media altura no pueden llegar a ese clímax como para que salgas del cine satisfecho cien por cien. Incluso hasta su duración que no es corta, más bien extensa los productores se podrían haber ahorrado algun minuto que otro.

Ridley Scoot nunca falla, su estética, su buen hacer detrás de las cámaras, salva este nuevo trabajo al lado de un Russell Crowe que después hablaré de él como de los demás actores. Intenta profundizar en los personajes pero no lo consigue. Acierta en las localizaciones pero cambia constantemente el ritmo de la cinta trasladándonos de un sitio a otro. Aún asi se nota la mano de uno de lo directores más dotados profesionalmente en esto del cine.

Un elenco interesante, con un protagonista que logró sorprendernos con aquella obra grandiosa llamada Gladiator, y es que Crowe no está en su mejor papel pero como siempre intenta y consigue a la perfección doblegar a los demás interpretando a un Robin Hood algo light pero convincente. Luego está Cate Blanchett que con su belleza consigue trasladarnos a traves de la pantalla esos planos tan maravillosos y nos regala una aceptable participación. Y el tercero en discordia destaca por si solo, Mark Strong nos deleita con una actuación como pocos pueden hacerlo interpretando al villano y dándole ese toque de tiranía sin ninguna fisura.

En definitiva, un film que prometía ser obra maestra y que está lejos de llamarse así, con la última colaboración de dos monstruos de esta industria, una historia algo compleja y con escasas dosis de buen cine, una fotografía notable y música raspando el aprobado. Como inicialmente había pronunciado, no es suficiente.

Buen dírector, (Martin Campbell) buen actor, (Mel Gibson) y buena historia.
Una película de las de antaño en las que su protagonista arrasa con todo lo que tiene delante, y todo gracias a un destacable guión muy detenido dando a entender su historia a la perfección hablando del mundo tan amargo y cruel de la corrupción y sus altos cargos. Su minúscula acción contrasta con sus buenos diálogos y situaciones. La vulnerabilidad de esta cinta cae en su afán por que todo salga a flote pero no puede ser así, la hace caer en el tópico de lo imposible y lo irreal, pero aún asi es bastante entretenida.

De los actores solo cabe hablar de uno porque todo el reparto sigue su línea de regularidad al completo. Y es ahí dónde aparece en escena un Mel Gibson, que es lo suyo pero hace ya tiempo. Como siempre no defrauda y hace que sigas pensando que puede seguir interpretando este tipo de papeles pero los años no pasan en balde y en mi opinión debería dejar el legado a un puñado de actores que vienen pisando fuerte.

Entretenida cinta de acción con una perfecta historia acompañada y un Gibson que como siempre te fascinará..