La publicidad es engañosa. Según el tráiler "Sinister" se erige como el evento cinematográfico más terrorífico del año. Pero al salir de la sala uno se siente defraudado. Además, no ayuda que se utilicen los nombres de otras dos películas de terror modernas con el único fin de atracción de público.
El film muestra una historia ya empleada trillones de veces en previas películas de terror, pero dejando entrever algunos puntos de originalidad. No obstante, Scott Derrickson, quien juega a meternos miedo y tensión en el cuerpo, solo hace eso: jugar. Solo muestra, no indaga. Solo prueba, no insiste.
"Sinister" intenta ser un viento huracanado de aire fresco al género de terror y "found footage", pero se queda en un simple soplido.

Oliver Stone ha decidido adaptar a la gran pantalla una novela de Don Wislow. Fiel (o no) adaptación, debe tenerse en cuenta lo que el Sr. Stone ha conseguido: mantenernos interesados durante todo el trayecto sin que en este ocurra nada destacable.
Es una película dura, pero no dura de escenas: dura de contenido. Es realista, o como el título, salvaje. En ella prima lo esencial y lo básico. No busquen escenas de acción impactantes, ni giros inesperados de guión, ni personajes memorables (a excepción del de Benicio Del Toro), ni diálogos apabullantes. Aquí lo importante es el film en su estado más puro.
Así pues, Salvajes no es una película al uso.No es un largometraje fácil de recomendar ni de explicar. No es un thriller. No es una película de acción... Es una historia de amor, un film noir sobre qué seríamos capaces de hacer por amor aderezado con una visión modernista de la marihuana y la mafia mejicana.

"Only Lovers Left Alive" es una película difícil. Difícil porque tiene un ritmo lento, muy lento. Difícil porque los diálogos están llenos de referencias y guiños a la literatura, historia y música que deben conocerse para apreciarse. Difícil como sus personajes.

"Jim Jarmusch" coge a los vampiros de toda la vida (los que no pueden resistir la luz del sol, temen al ajo y se matan con una estaca de madera) y los planta en la época moderna. Esta pareja de amantes no brillan y van a la universidad, son supervivientes de la vida que buscan nuevos estímulos ya que, cuando lo has vivido todo, ¿qué te queda?

"Tilda Swinton" y "Tom Hiddleston" nos brindan una actuación soberbia. Ella como una hippie literaria devoralibros amante de la vida, filosófica, despierta y ansiosa por aprender conocimientos nuevos. Él como un músico underground apagado, coleccionista de instrumentos y estancado en el pasado al que solo crear música le ayuda a seguir adelante.
Son el Yin y el Yang. Y curioso que se llamen "Adam" y "Eve"...
Mención especial a "John Hurt", espectacular como siempre, aunque "Mia Wasikowska" no aporta absolutamente nada.

Así pues, "Only Lovers Left Alive" pasará desapercibida para muchos y solo sabrá apreciarse por muy pocos. Es una película que pretende hacernos entender que la vida, aunque eterna, es una lucha constante por la supervivencia en la que tenemos que intentar disfrutar y aprender de todo lo que nos rodea. Su banda sonora, fotografía, actuaciones y diálogos ayudan a que nos adentremos en la vida de estos dos enamorados y entendamos que nunca debemos perder la esperanza, seamos amantes o no.

VAYAN A VERLA: si quieren gozar de cine (muy) inteligente.
ABSTENERSE: si esperan ver una película de vampiros al uso.

La cultura general dice que "Isabel Coixet" es muy particular y su arte debe mirarse de un modo especial.
Si bien eso es cierto no implica que todas sus películas tengan que mirarse con buenos ojos, ya que también puede hacer films malos se miren por donde se miren. Y este lo es. Y mucho.

Empecemos por sus puntos positivos: los secundarios. Aunque no salvan al film de la catástrofe si que su brillante actuación ayuda a que no tenga un cero de puntuación. "Rhys Ifans" como padre enfermo (papel que ya mostró dominar a la perfección en "Mr. Nobody"), "Jonathan Rhys Meyers" como profesor de arte dramático y "Geraldine Chaplin" como vecina extravagante dotan a la película de un poco de identidad, y consiguen que tengamos en cuenta lo que hacen o dicen.
Mención especial a los créditos finales y su banda sonora, sobradamente mejor que la película entera.

Entonces toca analizar el resto del film: el guión se tambalea y muestra un sinfín de historias y situaciones que nunca llegan a su resolución, el género baila entre el thriller psicológico y el thriller sobrenatural sin potenciar ninguno de sus aspectos y quedándose en tierra de nadie, la resolución final es totalmente previsible y vacía y los 86 minutos de duración que ostenta resultan una eternidad.

Así pues, "Mi Otro Yo" es un experimento fallido de intento de cine de autor que ha acabado en despropósito. Un desastre de sobrenaturales proporciones con nombres conocidos como reclamo que nuestra mente intentará borrar.
Se trata de un conjunto de escenas inconexas que no llevan a ninguna parte.

VAYAN A VERLA: si son verdaderos fans acérrimos defensores de Isabel Coixet haga lo que haga.
ABSTENERSE: el resto.

Gareth Edwards va a extremos. Debuta con una magistral película como lo es "Monsters" y fracasa estrepitosamente con "Godzilla". Si el bicho en cuestión existiera de verdad se habría ocultado en el fondo del mar avergonzado...

Lo mejor de este film son sus (escasos) momentazos de fotografía, bellísimas escenas que impactan y se quedan grabadas para siempre. Se nota el mimo puesto en cada uno de los nombrados fotogramas, el cuidado de cada mínimo detalle y el hecho de no poder evitar quedarse con la boca abierta y soltar un sonoro "¡wow!".
Y no me refiero a las escenas de acción, qué va. De esas hay pocas y olvidables.

El drama humano tampoco ayuda. Se ha contratado a un elenco de actores conocidos que se dedican a interpretar lo mejor que pueden un papel que no se creen ni ellos. El resultado de su interpretación es una historia que acaba sin tener importancia, y que provoca esperar con impaciencia las escenas de acción. Pero cuando llegan tampoco sacian del todo. No impresionan.

Como puntos positivos (dejando a un lado los ya mencionados momentos fotográficos) puede decirse que el nuevo look de Gojira es impresionante, y que se nota que el director tiene algunos interesantes métodos recurrentes: nunca enseñar del todo, centrarse en los sentimientos de los protagonistas y humanizar a los monstruos.
No obstante, eso le funcionó bien en su primera película indie de bajo presupuesto. Ahora estamos delante de un gigante blockbuster que al utilizar esas fórmulas le quita espectacularidad y le añade defectos.

Se aprecia el querer hacer algo distinto, pero con un monstruo de tales dimensiones no funciona.

VAYAN A VERLA: Si son verdaderos fans del animalito.
ABSTENERSE: Si esperan presenciar monstruos liándose a tortazos a lo "Pacific Rim".