Genial como casi siempre, nuestro querido y admirado director inglés.
Capaz, - como siempre - de mantenernos en vilo en todo momento a través de una atrayente historia.
En este caso las tribulaciones de una bella y desdichada mujer
( Hitchcock siempre sabía cómo hacernos admirarlas), que en su deambular desgraciado tiene la suerte de encontrar un hombre que la va a querer, salvar y curar gracias al amor.
Ese amor a prueba de bomba, al que el protagonista no renuncia jamás, y que pone por delante a todos los obstáculos que ella provoca, enseña que amar significa creer en la valía del otro y protegerle siempre, a pesar de las adversidades.
Gran trabajo de todos los actores en particular claro está el de los principales Sean Connery y Tippi Hedren, en particular el Sr. Connery, que con pelo y sin barba, luce como extraordinario galán.

Estupenda película, donde brillan Kirk Douglas y Kim Novac.
A buena altura están también todos los demás actores, muy bien dirigidos todos ellos por el director Richard Quine, que maneja además la cámara de manera sabia, regalándonos unos planos siempre acertados.
Los dos protagonistas principales, bordan sus papeles con la infidelidad y el enamoramiento como tema principal de la película.
Muy recomendable, en particular para los admiradores de Douglas, que somos legión.

Una vez más, saboreamos una fantastica película del gran Luis Buñuel.

Nuestro genio aragonés, sabio con la cámara, nos lleva a un viaje donde hay drama, humor del bueno y una historia de pasiones humanas que orbita en torno a una bella y coqueta mujer, deseada por todo caballero que tiene la mala suerte de toparse con ella.

Las historias de hombres "atrapados" por el deseo irreprimible del "bello sexo",
las tenemos por cientos en el cine, pero claro no todas son iguales, y ésta te atrapa desde los primeros planos, (hay que descubrirse con la escena inicial donde la protagonista sale de la cárcel; Buñuel la enfoca desde abajo, de frente, presentándola
como una vil reptil, para que vayamos haciendo boca, jeje) hasta la magnífica escena final.

Actores que trabajan a la perfección, desenvueltos, creíbles totalmente. No podría destacar ninguno porque los disfrutas a todos; incluyendo los animalitos de la hacienda mexicana.

Nada que objetar a la música, montaje, ritmo... todo es perfecto para mi gusto.

Buñuel hizo muchas películas con "bandera" mejicana, y se suele decir que son "menores" ; nada más lejos de la realidad.

Por suerte hizo muchas. Ahí están, eternas, para que que las disfrutemos.

Pasable película del vasco Pedro Olea; director valiente al que tocó torear con la censura franquista y artista con mucho oficio.

Acertado trabajo de los actores en general con una Concha Velasco desconocida a la cabeza, que aunque un tanto rígida en sus andares, se luce hasta casi sorprender, No así Ingrid Rubio, sosita ella.

Destacan música, fotografía, sonido y ritmo, y para mi gusto le sobran excesivos primeros planos.

Como escenas para no perderse, por anecdóticas, aquellas "subidas de tono" de la actriz principal, que conociendo un poco su forma de ser y los tiempos que le tocó vivir, le costarían un mundo.

También resultan interesantes los "noticieros" en la lejanía, críticos con la situación social de un país africano, y no menos curioso oír también análisis sobre tipos de interés y armonización fiscal...de los doce! en 1996.

Otra buena sorpresa? Los Marismeños cantando "La Zarzamora" en un corto plano secuencia, homenaje al flamenco, sabiamente ilustrado por el vasco.

En fin, una peli para pasar el rato, con suficientes ingredientes para que no aburra.

Una vez más el Sr. Ozon nos deleita con su buen estilo de hacer cine.

Sabe donde poner la cámara y hacernos disfrutar con bellas imágenes, esta vez en el mar, la playa, atardeceres,
y actores en moto.

Una interesante historia que saca a relucir un aspecto de las relaciones amorosas, los enamoramientos y su problemática.
Muy bien interpretado por dos actores desconocidos que hacen creíbles sus papeles, con buena fotografía, paisajes y música, siempre al nivel del buen gusto de este director, tan francés también en esta película.

Recomendable para los amantes del cine galo, que con su particular toque, nos seduce a tantos.