Se pueden decir mil palabras acerca de esta película, pero nadie podrá negar que su argumento es tan real como el mundo en el que vivimos y el mundo al que nos estamos encaminando. In time presenta una clara analogía a la sociedad actual, en la que unos ganan y otros pierden... por ley natural.
Fría, cruda, sincera... nos da un duro golpe en la cara para hacernos reflexionar acerca de esta injusta, pero tan aceptada estructura social. Si reemplazamos el "tiempo" por el "dinero" nos daremos cuenta que estamos en la misma situación, en el mismo orden criminal del mundo. Los que tienen dinero, tienen el poder o al revés, da igual. Los pobres, por otro lado, están condenados a morir o a intentar sobrevivir en un sistema que no está diseñado para ellos, en el que se convierten solo en un medio más.
El que haya leído alguna vez el magistral libro de George Orwell "1984", no podrá evitar encontrar las semejanzas. Tanto Orwell como Niccol plantean un mundo en el que cada centímetro de nuestra vida está siendo controlado y manejado en beneficio a unos cuantos y solo cuando ese "gueto" entienda y sea consciente, las cosas podrán cambiar.
Una buena película, para mi, no es solo aquella que te muestra los mejores efectos, los mejores diálogos, las mejores fotografías o el mejor sonido. Una buena película es aquella, que aún teniendo carencias en todos esos aspectos, te deja con la sensación de que acabas de ver algo importante y logra que después de salir del cine o de tu computadora, te quedes reflexionando sobre su mensaje, sobre sus ideas...
No se si estoy siendo objetiva, seguramente tendrá muchas falencias, no he dicho que sea perfecta... pero es notablemente mejor que mucha otra basura comercial a la que nadie duda en ponerle un 8.

Alguna vez se preguntaron por qué se les pide tanta información personal al registrarse en una red social? Qué hacen con ella? Una enorme base de datos, con qué fin? y por qué páginas como facebook no le dejan eliminar su cuenta definitivamente? Pues estos fueron todos los interrogantes que me surgieron al ver esta película, que puede encasillarse bien en el género de suspenso, y no tanto en el de terror.
Panic Button es una advertencia para todas aquellas personas que deciden remplazar su vida real por una virtual y que muchas veces no encuentran ni establecen la barrera entre lo que es público y lo que debería ser privado, perdiendo la prudencia en los contenidos publicados, enviados o comentados, sin darse cuenta que toda su información puede ser vista no solo por los creadores o administradores de la red, sino por cualquier criminal o psicópata que tenga algo de conocimiento sobre informática.
Muchos dicen que la Internet se puede considerar el triunfo de la libertad de expresión, pero qué tan cierto es esto? hasta que punto somos realmente libres y en qué punto empezamos a ser controlados una vez más?

No voy a decir que es una película estupenda, de hecho podría pensar que se trata de un simple intento de imitación de Saw, donde un grupo de personas es obligado a atravesar un juego mortal para pagar por sus errores. Su acierto, a mi parecer, está en la realidad de su temática, se trata de algo tan cotidiano que nos puede pasar a cualquiera de nosotros, a lo mejor no de una forma tan extremista ni sádica, pero si en su esencia.

Panic Button es un film de bajo presupuesto, en el cual el director evidentemente quiso aprovechar el boom de las redes sociales por un lado y el furor causado por la trama de una película como Saw. Los actores son caras nuevas, que a mi parecer no estuvieron mal. El ritmo de la película tampoco jugó en contra, teniendo en cuenta que su locación es prácticamente estática durante toda la película. Sin embargo considero que algo le faltó al guión, a su desenlace, y a su lógica, ya que muchos detalles no parecen coherentes.
En conclusión una temática original, narrada de forma que la hace ver como una simple copia, cuya idea pudo ser notablemente mejor explotada. Te deja reflexionando y eso es un punto a favor.

Reconozco que fui a ver Operación regalo porque era la única película de la cartelera que aún no había visto, la dejé para lo último deseando que la quitaran de los cines antes de no tener otra opción. ¿Por qué? porque nunca he esperado mucho de las historias navideñas, que generalmente tratan de envolvernos con sus cuentos de fantasía y sus enseñanzas morales reforzadas y repetitivas. Pero vaya sorpresa que me he llevado y es que quién no puede enamorase de Arthur, del abuelo santa y de una cantidad de personajes maravillosos que hacen posible una historia tan inocente, infantil y divertida? Yo no me resistí.

La historia va de un Santa Claus que acude a unos métodos muy modernos para alcanzar la flamante tarea de entregar regalos a todos los niños del mundo en la noche de navidad, pero a pesar de los esfuerzos se les ha olvidado una niña, hecho que se convierte en el punto de partida para una gran aventura emprendida por el hijo cobarde y bueno de Papá Noel, su abuelo, su reno y una elfina bastante particular encargada de envolver los regalos. Desde el principio hasta el final la historia logra envolverte en su magia y su ternura, y logra que al salir de la sala de cine aún conserves esa tonta sonrisa en la cara que te hace sentir un niño de nuevo.

El final es predecible, pero qué más da? no se puede reprochar un final cuando toda la cinta logra alegrarte tanto. Quizás no estoy siendo objetiva y no me importa serlo, si un film consigue llegar al corazón de sus espectadores lo demás es añadidura y eso hace Operación regalo, te mantiene pegado a la pantalla, siendo tu única desconcentración los niños de la sala que estallan en sus carcajadas y aplausos.
Se trata de una película infantil que resulta apta para todas las edades, solo si estás mentalmente preparado a pasar un buen rato y a reirte de lo lindo.

Básicamente no espero mucho de las comedias románticas y si embargo me encanta verlas para pasar el rato, distraerme y echar una que otra risa. El problema esencial de estas películas es que no se arriesgan a ir más allá de sus propios estándares, solo se limitan a repetir los clichés de las anteriores y proporcionar al publico una historia que los haga sonreír con un amor netamente idealizado.
De "Dime con cuántos" me gustó el simple hecho de que su protagonista no es la típica niña buena en busca del amor, ni tampoco la mujer cansada de las relaciones y dispuesta a no enamorarse. Anna Faris interpreta a una mujer real, como podemos ser nosotras o como pueden ser las demás, o quién no tiene una amiga o conocida que sea como ella? Así, imprudente, exagerada, despreocupada, pero sobretodo aquella que se ha acostado con más hombres de los "socialmente" aceptables.
Así es la vida real, las buenas mujeres no son perfectas y no tienen que serlo. Como dice la película solo tienen que ser ellas mismas. Esta es la parte que más rescato del film, su sinceridad, el demostrarnos que también nos podemos enamorar de una protagonista con defectos.

De ahí en adelante es más de lo mismo, el hombre mujeriego que encuentra a la mujer de su vida y deja de serlo, la madre incomprensiva que trata de buscar el mejor partido para su hija, la hermana perfecta, la típica noche de desliz con la pelea posterior, y finalmente la reconciliación. Nada nuevo para todos nosotros.

Un film por y para Anna Faris, indudablemente!

Me he quedado con un sin sabor después de ver la cinta, en el punto concreto en qué en realidad no se si me gustó o la descarto, y tampoco tengo claro por qué.
One day narra una conmovedora historia, cuya principal cualidad es que es real, real y cruda como la vida misma, y es que el amor y las relaciones humanas no son como las pintan en las irritantes y comunes comedias románticas de la época, esas que se esfuerzan por idealizar algo que no necesita ser idealizado, pues así con sus amarguras y defectos es lo más característico y bello de la humanidad.
Emma y Dexter son dos jóvenes que se quieren con un cariño neto y a menudo enfermizo, se necesitan el uno al otro para vivir, pero esperan dos décadas para entender que se aman y que deben estar juntos, demasiado tarde dirán muchos, pero eso es lo que hace que la película sea tan especial.

Más allá del amor, la película se refiere a muchas otras situaciones humanas que nos tocan una fibra interna. El chico que soñaba con la fama y el dinero, lo consigue, pero lo pierde...y es que así es la vida; nada dura para siempre y en el malévolo mundo de la televisión los años se convierten en el principal enemigo de un presentador o actor. La chica humilde, que gracias a su inseguridad se impide alcanzar el éxito que siempre pudo tener en sus manos, al final se decide y logra saborear un poco de lo que nunca tuvo ni soñó.

No estamos frente a una comedia romántica como cualquier otra, creo que por eso me ha gustado tanto, porque significó mi reconciliación con el género. Sus altibajos y su capacidad para mezclar acertadamente lo dramático y lo cómico son, sin lugar a duda, su salvación. Anne y Jim, fenomenales, quién se puede resistir a amarlos después de esta película?

y sin embargo no puedo ponerle un 8, un 9 o un 10... su duración es innecesaria, se pudo conseguir un mejor resultado omitiendo tantas situaciones repetitivas que se presentan a lo largo del film. Siento que al principio las cosas suceden tan lentamente que al final de la película Lone Scherfig pretende abarcarlo todo en a penas unos minutos, un final que pudo haber sido mucho más magistral, reducido a un instante simple de drama. La última escena de Dexter y su padre, debo decirlo, es absolutamente genial.