Esta película del director del Paciente Inglés y la gran Cold Mountain, cuenta la impresionante historia de Ripley (encarnado por Matt Damon, en el que para mi ha sido su mejor papel). Desconozco la obra literaria, pero el film demuestra que debe ser una maravilla.
La personalidad de Ripley, está estudiada al detalle. Su carácter difícil su oculta homosexualidad y su forma de afrontar las situaciones difíciles mantienen a un espectador atónito ante un personaje que va más allá de convencionalismos. En esta obra hay que destacar la gran interpretación de Jude Law, quien con un personaje secundario, logra captar toda la atención en la función. Patrow, correcta en su papel, no sale muy bien parada en este film ya que los personajes de sus compañeros de reparto, se comen al suyo en la pantalla.
Una historia hecha con maestría y llena de ritmo, que vale la pena ver y conocer que puede esconderse tras las apariencias de personas, aparentemente normales. Muy recomendable.

Divertida comedia que sin grandes pretensiones, consigue entretener y mantener el ritmo en todos sus noventa minutos de duración. Es muy importante destacar el buen trabajo de los actores donde sobresale una excelente Leonor Watling, que ensalza esta ligera comedia a cotas muy superiores, sus diálogos son sin duda la chispa de la película. Algo histriónica y acelerada, recuerda su elaborado papel al mejor Woody Allen. ¡Pena de premios que olvidaron a esta gran actriz en ese año!
Con estructura algo surrealista y bastante convencional (sobre todo al final), esta comedia tiene algo especial que la desmarca de la típica comedia costumbrista. Llámese guión o Leonor, solo me queda dar las gracias por hacerme pasar un buen rato viendo cine (riéndome con los personajes y no, de los personajes, como últimamente suele pasar).

Vanilla Sky es una película que fue muy criticada en su momento, tenía todos los ingredientes para la polémica: un remake de una gran película Española (Abre los ojos), una pareja protagonista que traspasó su amor fuera de la pantalla (creándose el sonado triángulo: Kidman-Cruise-Cruz) y que estaba en el punto de mira de la crítica Hollywoodiense. Aún así la película funcionó entre el público recaudando mas de 100 millones de dólares. ¿Por qué tubo éxito? Yo humildemente tengo mi respuesta, la película está muy bien dirigida y en base al éxito de Abre los ojos el director Crow prefirió ser fiel a la obra original… todo un acierto desde mi punto de vista. Vanilla Sky pone nuevos decorados, personajes y nueva y mejor música a la obra de Amenábar y retoca aquellos aspectos de Abre los ojos que la hacían confusa… cerrando la película de una forma muy correcta y distinta, con la que el espectador se siente más informado acerca de la historia. La escena final cuando van subiendo el rascacielos resulta conmovedora (ver pasar tu vida por minutos).
En cuanto al gran reparto de la película: Cruise está correcto en su papel, Cruz repite más americanizada por lo que nos resultará más distante a los españoles (tiene momentos buenos y no tan buenos en la peli, sus emocionantes lágrimas al final contrastan con una escena de histeria claramente prescindible). Cameron Díaz también está correcta aunque yo destacaría a kurt Rusell y el actor que hace el papel de Fele Martínez, para mí los más convincentes.
En conclusión Vanilla Sky se puede interpretar como una copia de Abre los ojos. Yo más bien la vi como un homenaje a esta obra muy bien adaptada al escenario estadounidense.

Trece campanadas es un thrilers de suspense donde un gran Juan Diego Botto, nos aporta la visión que tiene un esquizofrénico al límite del abismo. La película que cuenta con un reparto excepcional: Luis Tosar, bien en un mal papel demasiado similar al de Te doy mis ojos, Mata Etura dulce y sensual también en un papel bastante parecido a lo que hemos visto de ella hasta el momento, una Elvira Minguez impactante… Laura Mañá limitadita y el descubrimiento para mí de Rosa Alvaréz muy bien en su personaje.
Intrigante, visual (muy buena ambientación), con cierto sentido del ritmo, en esta película fallaron las formas. Situaciones demasiados exploradas ya, sin aportar mucho al género. Un final al que le falta originalidad, demasiado fácil. Y situaciones de la película donde se roza lo absurdo: Juan Diego Botto hace cosas demasiado raras incluso para un esquizofrénico, la escena de las manitas por ejemplo. No obstante la película se deja ver… y es aconsejable para pasar el rato entretenido, no mucho más.

Inconscientes son la mayor parte de los espectadores que vayan a ver esta película, lo son porque esta historia ambientada en principios de siglo, no deja indiferente a nadie: Personajes cómicos al borde del precipicio, situaciones que sobrepasan la barrera de lo natural y un ambientación muy cuidada definen esta película cuyo principal atractivo radica en sus actores protagonistas:
Leonor Watling, quien compone un personaje en la línea de a mi madre le gustan … y lo hace como solo ella sabe: dándole clase y gracia a un personaje inimaginable en otra actriz. Luis Tósar, se desmarca de los personajes oscuros que inundan su filmografía para dar luz a un personaje vulnerable y mucho más cómico, que nos aporta una nueva dimensión en su talento. Mercedes Samprieto.