Curioso. No se me había ocurrido que una declaración judicial se pueda teatralizar. Pero a saco, sin añadir ni quitar nada, palabra a palabra. Aunque no es una película de juicios propiamente dicha, podría entrar en este subgénero.

Si entramos en el contenido en sí, es para echarse a llorar. Vivimos en una distopía gatopardiana en estado puro. Cambiarlo todo para que nada cambie.

Si en vez de la declaración para hacer la película hubiesen querido hacer una miniserie de TV estilo Borgen, podrían haber añadido desde el señor que vestido de cura secuestró a la familia de B, los martillazos a los ordenadores, los pagos en diferido, las declaraciones en el Congreso y no se cuantas cosas más. Corrijo, más que Borgen esto parecería Breaking Bad.

Como obra fílmica está la mar de bien. Casablanc y Solo lo bordan. Quizás la caracterización de Casablanc es algo fallida, ya que sus patillas parecen falsas y recuerda más a Lobezno que a B.

Es curioso el título. B. La inicial del encausado y la referencia a la contabilidad oculta. Y muy cinematográfico, aunque da cierto yuyu. Borau dirigió en 1975 una trama política en un país sudamericano titulada "Hay que matar a B". Menos mal que los relacionados con el caso debían ser poco cinéfilos ...

Es medianamente habitual que ante tanta fiesta navideña surjan comedias negras, personajes faltones, algo que ataque una fiesta tan enraizada a nivel familiar y que disfrutan especialmente los niños. El humor negro irreverente siempre acecha. Bad Santa, El Grinch, Pesadilla antes de navidad, 'Christmas Bloody Christmas' , el robot maníaco vestido de Santa Claus en Futurama, 'Noche de paz, noche de muerte', e incluso los gremlins ... cualquier excusa es válida para reventar, cual destroyer, una fiesta tan señalada ... este pequeño corto va a la zaga. Es una gamberrada de tomo y lomo. No tiene mucho guión. Mezclar los seres primordiales de Lovecraft con el venerable anciano vestido de rojo tiene su gracia. Hay claras referencias a "El laberinto del fauno". Es un divertimento jocoso para los adultos, pero los niños mejor que no lo vean. O quizás sí, en el fondo, rezuma espíritu navideño ( y no son las babas...).

Empezamos mal cuando la traducción al castellano del título "The capture of bigfoot" es "La leyenda del Yeti". ¿Que co** tienen que ver los bigfoots con los yetis cuando ni siquiera están en el mismo continente? Misterios de la distribución en VHS.

Estamos ante una producción de Bill Rebane, con todo lo que ello significa. Terror setentero de malo a mediocre, independiente y con efectos de risa. Aquí veremos al bigfoot desde el principio, embutido en un traje peludo blanco que recuerda al Mugato de Star Trek TOS, salvo por el cuerno. Quizás reciclaron el traje. Es raro un bigfoot blanco, cuando siempre tiene un pelaje castaño. No entiendo porqué lo llaman "Arak" ...

La película tiene un guión lleno de subtramas absurdas, de personajes que parecen de la nada, como el indio, para salvar a los protagonistas, o unos rednecks imbéciles que viven en lo que parece el Bar de Moe de los Simpson, de hecho hay una pareja de masillas malos que parecen Lenny y Carl. El policía no tiene la más mínima gracia y los buenos son clichés manidos. Realmente, parece que no saben qué hacer con varios de los personajes, que simplemente deambulan por la cinta.

De todos ellos destaca el malo de la película, el "empresaurio" Olsen, paradigma del emprendedor estadounidense que pisa a cualquiera, amenaza y ataca a la autoridad, provoca varias muertes, tortura a un accidentado, atropella a quien le molesta, amotina a la población y no duda en matar, para cumplir su "sueño americano", tener un bigfoot enjaulado.

La película es un delirio en el montaje, completamente inconexo y con escenas desordenadas. Pasamos de la noche al día y viceversa. Para darle algo de interés, tendremos al monstruo atacando a personas, así porque sí., ya que la presunta venganza se resolvía en los primeros cinco minutos del filme.

No obstante hay que agradecer que rodase en paisajes nevados reales y que los actores se tuviesen que mover entre la nieve, con lo incómodo que es. Incluso hay persecuciones de coches en las carreteras cubiertas de nieve.

"The capture of bigfoot" es un producto malo aunque esforzado. No se pueden pedir peras al olmo.

Las películas sobre gente aislada y un misterio han de tener buenos guiones y estar muy bien escritas. Sobre todo si añadimos el componente de la ciencia-ficción. "Moon" (D. Jones, 2009) es una maravilla, al igual que "Naves misteriosas" (D. Trumbull, 1972). El filme que tenemos entre manos bebe de otros también aceptables, como Oblivion (J.Kosinski, 2013), El Bosque (M. Night Shyamalan, 2004) y 10 Cloverfield Lane (D. Trachtenberg, 2016), de los cuales toma prestados la ambientación del lugar y la locura de la situación, asi como las dudas sobre los que es real y lo que no. Incluso, afinando, toma prestados elementos de una desconocida película australiana Zona 39 (J. Tatoulis, 1996). Hay otro filme, modesto y del mismo año, Atomica (D. Merrilll, 2017), que parece formar un programa doble con el filme alemán.

S.U.M.1 sin embargo es fallida. Aunque mantiene el interés, no acaba de arrancar la historia. No se comprende porqué tienen que estar aislados en esa misión, ni porque no tiene contacto ni con amigos ni con familia, o, simplemente, ve la tele o algunas pelis. Son personas que, originalmente, viven bajo tierra pero el espectador no tiene claro si realmente el protagonista viene de una ciudad real o de una cubeta criogénica. Tampoco 100 días es una enormidad de tiempo ¡son poco más de tres meses! La película se centra en el análisis psicológico, más bien en la degeneración, de una persona aislada y bajo presión. No está mal, pero tampoco es de esas que recuerdes, recomiendes ni vuelvas a ver. Pasa por tus ojos y poco más. Y sí, tendrá sorpresas finales y algo de acción, pero poquita.

El falso documental y el metraje encontrado tiene en la abducción alienígena uno de sus temas favoritos y recurrentes. Por ello es difícil, conforme se estrenan nuevos filmes, hallar cosas nuevas o sorprender. Hay un claro riesgo a refrito en el ambiente. Ya en los años 80 y 90 se estrenaron los filmes titulados "Abducción alienígena", pioneros en el tema, original y remake rodados por el mismo director. Una familia sufrirá la ira de los hombrecillos grises. Ya en el siglo XXI, "Phoenix forgotten" aprovechan un suceso real y paranormal, unas luces en el cielo nocturno de dicha ciudad, para ofrecernos otro film de metraje encontrado donde los sucesos se intuyen, pero no se ven claramente.

Éste que tenemos entre manos, "Alien abduction" va de frente con el título. No hay capacidad a la sorpresa. Aprovecha una leyenda, sobre unas luces que a principios del XX se veían en Brown Mountain, para construir un fin de semana de pesadilla para una familia. Ya sabemos lo que les va a pasar, la gracia está en la manera de contarlo. Y sí, tiene secuencias logradas, como todo lo que rodea a la llegada al enigmático túnel, de esas escenas inquietantes y acongojantes, o la de los cuervos. Por lo demás, una vez aislados en el bosque, es una de tantas. Especulen sobre el orden de las desapariciones, la solución en el spoiler.

La película es entretenida, pero lo que cuenta está muy visto, así que solo le valen a los fans de estos filmes o a quién no haya visto otros de similar estilo. Y hay una escena postcréditos.