Grandes actores, empezando por el gran cerebro del atraco, pasando por el lastre del plan y su mujer, y el resto de compinches.

Dirigido con maestría, sin ningún momento flojo, y muchos de los que se quedan grabados (a esto ayuda la cantidad de veces que han sido imitados). La película no tiene pausa, pero la intriga hace que desees que vaya más rápido aún.

Gran guión sin excentricidades que hace creer que perfectamente podría haber estado basado en un atraco real (no con las medidas de seguridad actuales claro está).

Perfectamente montado, incluyendo las escenas clave que repiten el momento cumbre desde el punto de vista de cada uno de los protagonistas.

Y desenlazado con una gran escena...

Según va comenzando la historia y van apareciendo todos sus elementos, parece que estás entrando en una película de las grandes. Pero según comienza a desenlazarse, nos damos cuenta de que es otra vulgar película francesa. Me quedo sin duda con la primera película de Dominik Moll, con la gran actuación de Sergi Lopez. En esa otra película se podía ver un divertido humor negro, por contra, esta película la veo negra, muy negra.

Me gustan las películas que me hacen sentir, y esta me ha provocado miedo, me ha metido en tensión, me ha hecho sentir intriga, me ha puesto una sonrisa con sus giros sorprendentes y enfado cuando se terminó. Y no hay mejor síntoma que el que una película se te haga corta.

Merece la pena por algunos de los temas propuestos que no habías visto en películas de este género. Pero son desarrollados en algunos momentos de manera tan absurda que piensas que el director se está intentando reir de nosotros o que nos encontramos ante una película infantil. Por tanto quedémonos con la parte buena, cojamos los temas que plantea y desarrollémoslos en nuestra cabeza, con poco saldrá algo mejor que esto.

Si has vivido tu momento ERASMUS, te sentirás identificado con buena parte de las situaciones, y te gustaría haber vivido el resto de escenas. Guión divertido y a pesar de lo que pensarán algunos: realista.