David Fincher ya venía pisando fuerte en sus anteriores películas. En esta casi roza la perfección. Todos los elementos que conforman una historia en la pantalla encajan. Un magnifico guión, brillantes diálogos, excelentes actores (menuda cantera de jóvenes), y un ritmo y un pulso firme en la dirección acompañado siempre de una banda sonora de lujo que se hace indispensable para remarcar la atmósfera de la trama.

Visión esplendida de los jóvenes centuriones actuales que van a marcar con sus creaciones nuestro futuro mas inmediato y que al fin y al cabo debajo de su ímpetu innovador siguen siendo seres humanos necesitados de aquello que quieren potenciar rompiendo barreras: amor y amistad. Facebook como tantas otros portales en internet es una gran herramienta y como todas las herramientas siempre estarán muy frías comparadas con un buen abrazo. No se la pierdan.
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