De haber firmado esta película, pongamos....Amenabar se estaría hablando hoy de una obra maestra del cine español y de un taquillazo. Al haber sido dirigida por un tal Guillem Morales, pasó prácticamente sin pena ni gloria por las pantallas y yo mismo la descubrí en vídeo. Pues bien; el guión es original, los actores muy buenos y la dirección excelente. Lo único que uno no entiende tras ver esta película es cómo su director no es hoy en día reconocido como se merece. Es capaz de mostrar al espectador dos puntos de vista diferentes, por un lado te asusta con la idea de que alguién está en tu casa (poniéndonos en la piel del prota) y por otro nos hace sentir unos okupas en casa de otros. Pocas películas consiguen que uno se meta dentro de la pantalla y sienta lo que siente el protagonista, pues bien, ésta pelí te hace vivir cada segundo como si estuvieras dentro gracias al buen saber de su director que sabe colocar la cámara con una grandísima maestría. Por favor que siga haciendo películas este señor!!

Sobre el guión decir que juega a despistar de manera descarada y cuando crees haberte perdido algo descubres demasiado por las pistas tan claras que te dan y el abuso de los flashback repetitivos que no aportan nada nuevo (con uno habría bastado) Will no está tan bien como en su anterior drama y es entonces cuando te preguntas ¿Porqué se habrá metido en este fregado? Zapatero a tus zapatos, Will Smith es de lo mejor en su faceta de héroe, en hombre de acción, en comedia...pero en drama deja mucho que desear.
La realización resulta angustiosa con primeros planos de dos actores que pierden mucho tan de cerca, se salvan un par de detalles de gran director que no puedo contar para no adelantar nada. En definitiva la película resulta un tanto aburrida (sobre todo la relación entre los dos protagonistas que no logra interesr a nadie y en la que se recrean hasta el hartazgo)