No es solo que Mario Casas no sea un buen actor, algo en lo que, por otra parte, casi todos coincidimos, sino que el hecho de estar al lado de un actor de la altura interpretativa de Antonio de la Torre, reduce su interpretación a una auténtica mierda (con perdón de la expresión). Su personaje debería ser eliminado del guión, ya que no aporta absolutamente nada. Es el único que ni tiene aspecto de Policía ni se comporta como un Policía.... Por mucho empeño que ponga.
Por otra parte la historia no está nada mal y las dosis de realismo que aporta la hacen bastante atractiva.
No esta nada mal.

Creanme si les digo que habré visto esta película, por lo menos, 20 veces o más, y la última vez que la vi sería hace unos 15 años. Con esto que quiero decirles......... Que quien no la haya visto y le guste el cine como se hacía antes, disfrutará, sobre todo si es un niño.
Guerreros, princesas, reyes (sale el rey Arturo), piratas, vikingos, magos (sale Merlín), torneos, honor.......... Que más se puede pedir.
Recuerdo que me la grabó mi padre en formato VHS a principios de los años 80, y la veía cada vez que estaba aburrido en casa.
Una maravilla de las que ya no se hacen.
Disrutela quien no la haya visto, y quien ya la ha visto que la disfrute todavía más.

La verdad es que esta película me ha agradado mucho y, para ser todo un western clásico debe de ser uno de los pocos que no había visto aun.
La verdad es que, dependiendo de por donde se comience a analizar la película, nos encontramos ante dos westerns bien distintos, me explico: Si la analizamos desde el principio se trata de otra peli clásica del oeste con sus buenos y sus malos (y alguno que no parece ni lo uno ni lo otro)...... Y sus indios. Pero si la comenzamos a analizar desde su final nos encontramos ante el que bien pudiera ser el primer western crepuscular de la historia.
El principal personaje de la película, a mi modo de ver, es el protagonizado por Randolph Scott, ya que es de quien no se sabe mucho pero de quien nadie duda de que tiene mucho que contar, y parte de ello, solo parte, se nos va diciendo a lo largo del metraje.
El resto de personajes están bien definidos y, como en cualquier película antigua del oeste, hay de todo, pero el personaje realmente importante e interesante es el que protagoniza Randolph Scott, uno de mis actores favoritos de pelis del oeste quiza hoy demasiado olvidado.
Un gran western y un gran descubrimiento por mi parte.

Evidentemente me refiero a Charlize Theron, que en esta peli sale total y absolutamente preciosa (lo cual no es difícil ya que normalmente es así), pero en esta ocasión lo que la hace especial es ese plus de maldad y dramatismo que aporta, ya que, en mi opinión, y por salvar algo del argumento de la película (que no es demasiado bueno), es precisamente lo que no se nos cuenta y únicamente se medio-insinua, y no es más que el hecho de que la maldad de la reina encarnada por Charlize Theron, no es algo innato, sino producto de acontecimientos traumáticos durante su infancia (esto y su interpretación hace que este personaje destaque sobremanera sobre los demás, algo no demasiado difícil en este caso).
En cuanto al resto de personajes....... En fin, las interpretaciones son mediocres y el guion no es que sea un prodigio precisamente.
Lo que sí me ha gustado bastante de la peli es su aspecto técnico y la fotografía.
Para terminar...... puede decirme alguien si conoce a alguna persona que no esté totalmente convencido de que Charlize Theron es, por lo menos, 100000000000000000000000 de veces más guapa que Kristen Stewart..... Yo creo que no.

Nos encontramos ante una de las mejores películas de DeMille y una de mis películas favoritas de siempre.
No puedo dejar de pensar cuando la veo de nuevo (hace años que la tengo en VHS, Todavía!!!!!!!, y de vez en cuando la vuelvo a visionar) en aquellas lejanas tardes de sábado, domingo o días festivos en que esta (y otras memorables clásicos de aventuras) eran proyectadas una y otra vez en la primera cadena de televisión, y los agradables momentos que se pasaban viendo la misma.
Gary Cooper en su mejor momento, Paulette Goddard preciosa como pocas veces... Que más se puede pedir!
Por lo demás y aunque no estemos ante una de las mejores películas de la historia del cine, al menos si estamos ante una de las más entrañables y, al menos en mi caso, de las que más recuerdo.
Se la recomiendo a todo el mundo sin duda. Disfrutarán con ella como yo he disfrutado!