Cosas de marcianos es una de las mejores sit-com americanas de humor. Como ha dicho jastarloa, ridiculizan cosas humanas que nosotros vemos simples y rutinarias sin caer en la risa fácil. Además de esto, la caracterización de los personajes me parece estupenda: El jefe paranoíco, la seductora que se aprovecha de sus "dotes", el tonto-listo y el pubér en fase de pruebas.

La película me pareció del montón, entretenida y vacia con dos superestrellas, osea, te dá lo que esperas. Pero la actuación de Mel Gibson me pareció malísima... escenas que rozan lo ridículo, Gibson haciendose el paranoíco... No se como explicarlo, pero me dejó mal sabor de boca.

Supongo que gran parte de la decepción que me llevé fué por los dialogos, que a veces eran muy cutres y digno de películas de Van Damme (comentarios graciosos que no son graciosos en mitad de la comisaría, x. ej.), pero no sé que me dá que es el doblaje, que queda muy mal.
Por lo damás, el film dura dos horas y media, que se pasan en seguida, muy agusto y con la cabeza todo el rato pensando, que no es nada fácil.
Por último, decir que no me parece en absoluto una película de mafias, sino que de género policíaco (que a mí me parece muy diferente).

Knoxville y sus amigos vuelven a hacer de las suyas... ¿Que la primera te pareció una basura americanada para niños tontos? Pues en la segunda no vas a encontrar nada diferente a lo anterior, esto no es "El ciudadano Kane" y lo sabes. Gamberradas varias, un humor mas escatológico y menos loco (para mí, lo que falla en la película), pero con otras secuencias para descojonarte tú, y probablemente quien hace las pruebas (al lío con el tobogan-toro).

Es un videoclip de una hora... con las capacidades de aquella época. Si te gusta Pink Floyd, pues será una gozada, pero en mi caso me aburrí en varios momentos. Aunque sea interesante verla (se puede decir que es el primer musical de un grupo de Rock moderno... ¿no?), tanta mamarrachada psicodélica a veces da para atrás.