La chica danesa

Acudí a ver la película un poco por obligación y con nulas esperanzas de llevarme algo positivo. Sin embargo, he de ser justo y la verdad es que me sorprendí. Salí enamorado y conmovido con el papel interpretado por Alicia Vikander. Pocas veces he sentido tanta empatía por un personaje, hasta el punto de sufrir con ella los desdenes de la chica danesa. Cuánto hay que querer a una persona para pasar de ser una esposa enamorada a una amiga sujetabolsos y no torcer el gesto, no echar nada en cara y seguir adelante siendo el principal apoyo de la otra persona. Además la carita de muñeca de Alicia lo eleva todo a la enésima potencia.
Ahora vamos con el amigo Eddie. A mí siempre me ha parecido un actor con la calidad interpretativa de Fran Perea y que su único registro es poner una sonrisa de medio lelo a todas las situaciones. Se te ha muerto el pez = sonrisa de medio lelo; te ha tocado la lotería= misma sonrisa; vaya atasco de narices= alelado.
Para la película de Stephen Hawking (con todos mis respetos a una persona mil veces más inteligente que yo) pues te puede dar, el problema viene cuando hay que transmitir. Con su alexitimia característica es imposible que conmueva nada ni que te haga identificarte con su personaje y lo que consigue es que si tienes que compadecer a alguien sea a la pobre que lo tiene que aguantar.
Pero no es de ahora, su actuación en Los Miserables fue idem y en Los Pilares de la Tierra de lo que daban ganas es de que se le cayera la Catedral encima. Triunfa porque tiene una apariencia particular y lo raro atrae pero como actor no destacaría en Gym Tony.

Me sorprenden algunas de las críticas que he leído en esta página. Decir que Rednayme devuelva el oscar me parece de un desacierto total.
Te puede gustar o no el tema, la película, pero no se puede negar que la actuación de Eddie Rednayme es una maravilla.
Los dos protagonistas están de Oscar. Y la película es una maravilla. Sublime, enternecedora, conmovedora, con una fotografía, banda sonora, que acentúan esa gran puesta en escena.
Eddie rebosa talento. No hace falta que hable para transmitir. Es un actorazo.
La recomiendo. Sé que el tema de la transexualidad seguirá siendo tabú para muchos que tal vez vayan a ver la película con remilgos y por eso leo esas críticas tan poco sinceras y desvirtuadas. Eddie hace un papelon. La pelicula no trata de homosexualidad, no. Y es una historia verdadera ocurrida en los años 20 del siglo XX en Dinamarca.
Para mí es una gran película, Y deseo con toda mi alma que Eddie Redmayne se lleve otra vez el Oscar.. Está especular, brillante, conmovedor.... Sublime.

Hace muchos años, siendo poco más que un adolescente, alguien me dijo:

"Jamás conseguirás escribir bien si en cada párrafo no entregas tu legado interior"

Esta película me ha recordado a aquella frase, porque Tom Hooper no ha entregado su legado interior cuando la dirigió. Esta diseñada para gustar, pero carece totalmente de alma. Me recuerda a un bello videoclip efectista pero vacío. Aquí todas las piezas encajan pero parecen de metacrilato.

Una lástima muy lastimosa.

No es una película para todos. Y no es para todos no por la película en sí, sino por la mentalidad que tenga cada quien. Probablemente quienes tengan algo en contra de la transexualidad o la homosexualidad no la entenderán. Es más, les parecerá ridícula. Porque por desgracia temas así siguen siendo un tabú en nuestra sociedad, incluso en ocasiones se juzga algo sin conocer todos los pormenores o sin comprenderlo en su totalidad.
La sinopsis de la película se basa en la historia real de Lili Elbe/ Einar Wegener, la primera persona conocida a la que se practicó una cirugía de cambio de sexo.
Redmayne ya demostró su valía interpretando a Stephen Hawking. Y en esta ocasión llega a superarse de nuevo. Asistimos a una lenta transformación: un hombre que poco a poco nos muestra la mujer que lleva dentro. Sus gestos, forma de andar y expresiones faciales, tanto al inicio como al final, nos hacen ver que se trata de la misma persona y que Lili siempre estuvo ahí.
El mayor apoyo de Lili va ser la que era su esposa, Gerda (Vikander). Mi profunda admiración tanto a la verdadera Gerda por todo su amor incondicional y a la actriz Alicia Vikander.
Si ambos actores son buenos por separado, juntos en pantalla te atrapan. Cada escena que comparten logra transmitir los pesares de uno y del otro, su amor y su unión.
Muy merecida la nominación de los dos a los Óscars.
Me quedo con unas cuantas escenas (más en spoiler).

Como muchos dramas que comienzan como un juego sin decantar en las consecuencias, "La chica danesa" (2015) es la recreación de una novela de época que juega con tabúes, los prejuicios y la subjetividad del arte en la Europa de principios del siglo XX, aún marcada por los conservadores y la tibia ventana de apertura de los artistas y sus respectivas nubes.

Eddie Redmayne pone a prueba su versatilidad una vez más y en el ejercicio el resultado es discutible, mientras su coestelar, la angelical Alicia Vikander es el toque de delicadeza -y a la vez de carácter- para esta historia de provocación, ambigüedad pero también de amor y comprensión.

Puede estar ambientada hace cerca de un siglo pero la incomodidad se siente en el aire al ver el film. Ese sentimiento es quizás el que a la vez es un plus pero también una contra. Esto porque genera una emoción, una sensación extraña. Lo malo es que ello bloquea al resto de las emociones, no las deja fluir, ni a favor ni en contra de la trama y de la entrega de los intérpretes.

También consignar que dos horas bajo esta citada premisa agota un poco. A "La chica danesa" le sobran quizás veinte minutos luego de exponer bien sus puntos y bien podría haber anticipado el anunciado desenlace.

Para la evaluación, si el rol de Alicia Vikander es principal o secundario. Como sea, es ella el real timón de la película.

Recomendación:
Interesante. Un poco agotadora. Transita por senderos al límite de lo permitido pero logra zafar en gran parte por el equilibrio de Alicia Vikander.

=Cité de Lord Buyinski= www.buyinski.wordpress.com