Resident Evil 2: Apocalipsis

No sé si seguirá el argumento del juego o no, tampoco me importa, pero lo que si ví en esta película es que querían exagerar todo al máximo, unos zombis modernos que corren como gacelas y luchan como Bruce Lee, y por si fuera poco crean a uno que es superpoderoso y para a cabar con él tienen que arrasar toda la ciudad, demasiado para el cuerpo.
Ya sabemos que es una película de terror-ciencia ficción y hay muchas cosas que se pueden permitir en esta clase de películas, pero es que no acaba uno de centrarse viéndola.

Una buena película de zombies siempre debe de tener demasiados muertos vivientes, en todos lados; afortunadamente, Resident Evil 2 mejora la saga con cientos de zombies por todos lados, sangre, suspenso, momentos de tensión y por sobre todo acción, mucha acción.

Por lo visto el realizador ha pensado que poniendo a Mila Jovovich dando increíbles saltos acrobáticos al estilo Mátrix iba a bastar para enganchar al público. Mucha acción y poco contenido. No llega a la suela del zapato de la primera.
Prescindible

Segunda parte del popular videojuego llevado a la gran pantalla, "Resident Evil". Aviso que como apenas lo conozco paso del tema de si es fiel al mismo o se lo han inventado o si cambian la naturaleza de Nemesis o lo que sea. Dicho lo cual, se percibe una ligera diferencia respecto a la original. Allí hay tensión, sorpresa y una trama estructurada. Aquí se descuida de todo esto en pos de una atractiva pirotecnia visual aunque con unos zombis que si no dan miedo por su lentitud, su cantidad les hace ser inquietantes. El ambiente opresivo más o menos se mantiene con mucha acción, aventura y el juego pseudolésbico con una agraciada Jill (Sienna Guillory).

Por lo demás, "Resident Evil 2" es muy animada, como no, pero también recoge el punto más discutido de su predecesora y lo potencia. Alice (Milla Jovovich) va demasiado sobrada, lo que quieras que no le resta tensión. Sigo pensando que si fuera más normal y menos valiente hubiera quedado muchísimo mejor. Aquí incluso la han dotado de más poderes y cualidades sobrehumanas fruto de unos oscuros experimentos genéticos. Su poder y su belleza llegan a tal nivel que he llegado a pensar que la han convertido en una diosa de la religión griega. Atención al momento toallita, mirando sexy a la cámara y poniendo malo al que la vigila. Es que está guapísima.

Secuela de la entretenida primera parte, dirigida por Michael Anderson, estamos ante la típica segunda parte donde se ha pasado olímpicamente del guión (pensando que con el de la primera entrega ya bastaba) y poniendo en su lugar más zombies, más efectos especiales, más explosiones, más muertes y más sangre. Ni siquiera estamos ante una trama verosímil, porque se podría haber dedicado más atención al tema del encubrimiento del desastre a modo de "segunda historia" en vez de justificar este hecho de forma pueril y simplista. Lo único bueno es el guiño para los freakies de la saga de la aparición de Jill Valentine, con el mismo aspecto y vestuario que en el juego. Decepcionante.