04/04(06/01/17) Con motivo del reciente fallecimiento de la actriz Carrie Fisher me he decidido a ver de nuevo esta épica cinta de aventuras galácticas que elevó al Olimpo de los Reyes de Hollywood a George Lucas (la dirigió y escribió) , hacía mucho que no la veía, y la experiencia ha sido nefasta para la exitosa cinta, la idealización que tenía de ella ha quedado muy dañada tras la revisión, sus costuras no aguantan el metraje, sus carencias son abrumadoras, empezando por su infantilismo disneyano, personajes acartonados en su superficialidad, meros arquetipos sin fondo alguno, desarrollo con más agujeros que un queso gruyere, los deux machine ocurren porque sí, con una galaxia que parece más pequeña que mi despensa, se producen encuentros azarísticos “sorprendentes”, comportamiento de personajes caótico, parecen sufrir de ataraxia, nadie sufre lo más mínimo por la muerte de otros, no hay dilemas morales, el villano Darth Vader es imponente en imagen, pero su proceder de malo es propio de una ursulina tira-pellizcos, la emoción resulta bastante maniquea y forzada, con unos diálogos pastelosos y sin fuerza alguna, aderezado con un clímax final que visto hoy día roza lo sonrojante (por lo menos para mí), el revisionarlo ha sido una puñalada a mi inocente niñez. La nostalgia del recuerdo de mi adolescencia ha sido atropellada por mi visión presente de mi yo adulto. Por supuesto que no todo es malo, está su extraordinaria puesta en escena, todo un hito con el que Lucas ha influenciado a muchísimo del cine que se ha hecho desde entonces, con un sublime diseño de producción, unos efectos especiales creados por su debutante compañía ILM, con un universo propio de planetas, naves espaciales, estaciones-satélites, interiores de naves, batalles interespaciales, seres disfuncionales (ejemplo el popular bar heterogéneo), macroexplosiones, ello con una imaginería de un mundo de caballeros inspirados en los del Rey Arturo, con sables, donde el acero es cambiado por el láser.

Relato de aventuras que bebe de lo clásico en que un héroe inocente, inicia una odisea tanto física (en su viaje de su granja en Tatooine, al Halcón Milenario, la Estrella de la Muerte, o la Luna Yavin 4...), y espiritual-iniciático, en que este puro ser debe liderar la justicia, en lo que es una clara y sempiterna batalla entre el Bien frente al Mal, afrontado todo de un modo sencillo y simplista, sin dobleces, o blanco o negro, la Luz frente a la Oscuridad. Todo esto aderezado con las notas de humor muy blanco rayando lo bobalicón (siendo benévolo), por parte de los dos afamados robots androides (RD-D2 y C3PO), y más tarde, este sí más adulto, por parte de Harrison Ford y su excelente han Solo, aportando mordacidad, cinismo, pragmatismo divertido (ello junto a su fiel pseudo-yeti Chewbacca), lástima del final maniqueo que le hacen protagonizar, impropio de su personalidad de superviviente.

La puesta en escena si es un pilar se mantiene fresco a pesar del tiempo, Lucas fue un pionero revolucionario, visionario supo ver por donde iría el cine comercial en las siguientes décadas, su Icónica compañía Industrial Light and Magic ha sido todo un mástil de proa que ha ido en vanguardia del cine. Todo un Hito. Impresionante caracterización y maquillaje, Antológico el mítico Darth Vader, cuyo casco está inspirado en el de los samuráis japoneses. El formidable diseño artístico es obra de John Barry (“La Naranja Mecánica” o “Superman”), creando 30 conjuntos, con planetas, naves espaciales, cuevas, salas de control, cantinas, y corredores de la estrella de la muerte; rodando en interiores de estudios en UK, y en exteriores de Túnez (Tozeur, Matmata, Chort el Djend), Turquía (Cappadocia), Guatemala (Tikal), EE.UU (Valle de la Muerte en Nevada y Marin County en California). Capítulo aparte merece la Colosal música de John Williams, baste decir que el Instituto Americano de Cine 's situó en la lista de mejores bso de películas en el número uno de los tema más reconocible de la historia del cine.

Lucas escogió para dos roles relevantes a dos actores clásicos: Alec Guiness dota a su rol de mentor de Luke de hidalguía y majestuosidad, con un aura que brilla a su alrededor, lástima de su patético final. Guinness era uno de los pocos miembros del reparto creían la película sería un éxito, negoció acuerdo para el 2% de la quinta parte brutos las regalías pagadas a George Lucas, que lo hizo muy rico en la vida posterior. Estuvo de acuerdo en tomar la parte de Kenobi con la condición de no hacer ningún tipo de publicidad para promocionar la película; Peter Cushing es el otro veterano ilustre, regio como el Gran Moff Tarkin, único que habla de tú al pérfido Darth Vader, aporta su flema y poderoso carácter; Harrison Ford como Han Solo es el que mejor partido sacó a su rol de pícaro contrabandista, el único que despegó en su carrera convirtiéndose en un icono de Hollywood, con su humor sardónico, su cinismo, su arrogancia, con este papel nació un Mito; Mark Hamill es Luke Skywalker, ello por el hecho de que Lucas favoreció la selección de actores jóvenes que carecían de experiencia, le dota de inocencia, de una mirada cándida, limpia, demasiado plano en su rol, sin matices; Carrie Fisher como la princesa Leia, tan plana como Hamill, aunque en su favor está un buen y divertido duelo (aunque escaso) duelo con efluvios screw-ball con Harrison Ford... (sigue en spoiler)

Pero: El guión y su desarrollo no aguanta mínimo análisis; Obi Wan Kenobi llevó a Luke a Tattoine para adiestrarle, pero sin explicación alguna Obi se tira 20 años sin tener contacto con él, porque? Un sinsentido; Los droides llegan a Tattoine con el mensaje secreto, y con lo grande que es cualquier planeta estos robots son vendidos Luke Skywalker, hermano de Leia, la que envió el mensaje, bueno de esto nos enteramos en secuelas posteriores;