Larga para nutrir el morbo de la gente. No critico el morbo, todos tenemos. Critico la duración de la serie, que peca de ello como en muchas tramas que vemos ahora en numerosos documentales sobre crímenes.
A pesar de ello, visceral, intensa. Te deja un sabor de boca agrio, por no decir asqueroso. No sólo por los asesinatos de jóvenes honradas, sino porque no sirve la justicia. No sirven los juzgados populares, no sirven los medios de comunicación, no sirve la presunción de inocencia, los policías quieren terminar el caso, no buscar la verdad, el juez no tiene poder. Nadie paga por destruir la vida a una persona....
Ahora si, yo no estoy exento de todos esos fallos. No sirve la justicia, porque somos humanos. Y que una serie te haga reflexionar así y te dejé cabreado, ya ha conseguido algo y merece verse.

Fantavillosa película, con el alcohol como eje conductor, pero sin mensajes buenistas ni simples. Llena de aristas donde pensar desde muchos puntos de vista: psicológico, social, educatico, antropológico... Sobre la vida, sus ciénagas infernales y sus montañas de éxtasis.
Como diría Calvero (Candilejas): "la vida no ha de tener sentido; la vida es emoción, sentimientos, vivencias".

Producto vital para un país como España. Una serie patriota que viene a nutrirnos de orgullo y morriña. Luces y sombras en un patriotismo narrado en una serie con sombras y luces. No es perfecta, pero es necesaria y con una producción de alta calidad. Fallos en las relaciones entre los protagonistas, clichés que bajan la puntuación y desvían tu mirada fijada y llena de interés en los asuntos interestatales, globales, históricos, conspiranoicos... Reparto de calidad, mezcla de nacionalidades y de edades. Me canta alguna interpretación, pero en general fetén. Sobran uno o dos capítulos, o sobran más bien minutos. Sin embargo lo bueno que nos trae está por encima de los fallos audiovisuales.
Gracias Amenábar por la primera serie de calidad que rezuma patriotismo a la española.

Profundamente superflua, no aporta nada interesante a las miles de historias sobre parejas y las fases de una relación. Celos, discusiones, locuras matrimoniales... No empatizo con ninguno de los personajes. No me interesa la historia que cuenta y guía la trama. Eso sí, soberbia actuación de Peter Coyote. Lo único que salva una película sin alma.
Dos enamorados que pasan por las fases típicas, que están algo trastornados y acaban bastante más trastornados. No me interesa.
Película erótica que hace las delicias del ego del director y de los pedantes amantes de lo que se supone que tiene que gustar a los pedantes: películas de culto porque así lo deciden, arte contemporáneo que sólo entiende un drogado, música para fumar, amantes de la moda menos funcional... Todo fachada, todo muy falso.
Un ascal vamos.

Sin ser la mejor de Pixar(de todas formas cada cual tiene su favorita), sí puede ser la que posea el mensaje más potente. La animación es prodigiosa como todo el trabajo del estudio, pero falla en las zonas de comedia. Se le perdona. Una vez me dijo mi padre: "Dios es grande en las cosas grandes y máximo en las cosas pequeñas". Nunca lo entendí...hasta hoy.