Un 6 (Interesante) y mucho es.
Realización minimalista, poco más que unas habitaciones y pantallas de TV.
Tampoco hacía falta más, dado que el planteamiento es el de una obra de teatro. Un escenario y dos o tres actores.
Un obra de teatro filmada, con buena técnica y ritmo, muy centrada en los diálogos -no puede ser de otra manera, así es el teatro- y entretenida, que no es poco.
La historia no es nueva ni novedosa, en esencia la creación de la vida a partir de la materia inanimada, el hombre convertido en Dios creador. Ya hemos visto varias similares y el planeamiento suele ser siempre el mismo; una primera fase, la puesta en marcha de la idea de la creación; una segunda fase, la evolución de lo creado al margen de lo previsto y, una tercera fase de descontrol y final, el ser vivo creado a imagen y semejanza de su creador: en este caso el ser humano, otras veces un dinosaurio que se come a todo el mundo.
Cada vez me da más coraje el "final bailado" que tanto se ha puesto de moda, sobre todo si no se sabe bailar. Mejor haberla dejado preñada, un final más ingenioso que hubiera despejado cualquier duda de humanidad. Además, así tendríamos una segunda parte: el Bebé código. ¡Toma ya!
Lo mejor son los diálogos con diferencia aunque en la primera parte haya mucho lenguaje chorra-informático.
Los protagonistas están algo teatrales pero muy acertados, especialmente en la ultima parte.

La película tiene dos partes claramente diferenciadas.
La primera, la más larga, de casi 100 minutos es muy aburrida, hermosa pero aburrida, porque no sucede prácticamente nada. Magnífica fotografía, hermosos paisajes, encuadre originales, pero nada más, como narración no lleva a ningún sitio y resulta muy pesada y lenta. Casi parece un documental de estos de paisajes inhóspitos, osos,salmones y similares.
La segunda es muy distinta, de 30 minutos, es la que te despierta. Visualmente igual de hermosa que la primera, pero con mucho ritmo, intriga y excelente tensión contenida. Es la que realmente tiene CINE. Por eso le califico con un Interesante (6).
La dirección quiere ofrecer un lenguaje visual original e impactante y lo consigue, demuestra una gran técnica y buen gusto, pero se pierde en el ritmo de la narración y en la exagerada rigidez de los protagonistas.
La historia es interesante, no da para mucho pero está bien desarrollada, es truculenta y resultona. El pastor religioso que va a a hacerse cargo de una iglesia en una aislada isla, perdida en el quinto pino, en la que sus escasos habitantes-feligreses viven con sus propias normas y aplican sus propias reglas.
Los intérpretes están correctos, algo rígidos y contenidos

Lo que tenemos actualmente en el panorama cinematográfico es tan estúpido que esta película, sin hacer grandes cosas, se mueve en el nivel de interesante (6) a bueno(7).
Si te acercas a un enano pareces más grande.
Una producción impecable pero muy vista, nada novedosa.
Una dirección ágil, con buena técnica, fotografía y ritmo, y con más de un agradable detalle visual. Tiene momentos de buen Cine, que no es poco.
Una historia algo vista. Una urbanización utópica, para familias, en la que vivir idílicamente, en la que nadie se cuestiona nada, hasta que alguien sí se lo cuestiona y se plantea escapar. En todas estas historias la única intriga que hay es la forma en la que manipulan a las personas o si realmente son reales o virtuales, y si podrá o no escapar, entiéndase...
No queda claro el final, o por lo menos no me quedó claro a mí, que barajo varias explicaciones del mismo, que aquí no voy a exponer. Que cada cual se quede con la que más le guste.
Creo que la directora no acertó en la "solución final".
Buenas y convincentes interpretaciones, fueron los grandes pilares en los que se basa la película.

Un cinco (5) que no es poco en los actuales momentos. No llega al seis (6) porque para ello tendría que tener algo de CINE, lo que es CINE, y no lo tiene.
Es un producto muy bien hecho, muy bien pensado, que da lo que promete: acción y entretenimiento.
Buena realización, a lo Indiana Jones, bonitos paisajes, y razonables efectos especiales.
Una dirección eficaz, con muy buenas ideas -hay secuencias visualmente muy interesantes, sobre todo al principio- dedicada totalmente a imprimir un ritmo endiablado. Siempre está sucediendo algo.
Una historia que es un despiporre, una auténtica diarrea mental, alucinante y disparatada, gazpacho entre Rambo y la Jungla de Cristal, pero sin brillantez en los diálogos, que son casi inexistentes; el que más habla es el perrito.
Y unos protagonistas que lo único que tienen que hacer es de nazis malos, sádicos violadores y asesinos, junto con nuestro protagonista que se dedica a mirar fijamente con cara de mala leche y estar todo el rato lleno de mierda y sangre por todas partes. Si fuera médico en el Centro de Salud se acabarían las listas de espera.
Resumiendo: me entretuve un buen rato y me harté de reír de tanto disparate.
Y si quiere ver CINE busque otra película.

No es para tirar cohetes pero tampoco está como para destrozarla.
Simplemente es una película simplona, infantil, y agradable, que no pretende nada más que entretener.
Producción económica, todo ya visto. Pobre pero honrada.
Una dirección que trata de no aburrir, de crear un ambiente algo cómico, de imprimir ritmo y que no se haga pesada. Creo que lo consigue, por lo menos no es vulgar, ni chabacana, ni impera la juvenil estupidez típica de las películas USA.
Una historia algo vista, los padres abducidos, el hijo cerebrito que espera la vuelta, la pérfida del instituto, la familia feliz, etc.Digamos que muy original no es.
Unos protagonistas agradable aunque algo afectados en las actuaciones; así como exceso de comicidad.