Ni un pelo de listo fuí yo cuando la vi. En mi descargo diré que me cogió después de una siesta y con pocas ganas de buscar el mando a distancia...ya lo se, es una disculpa pobre.
Amalgama de tópicos concatenados con niño peludo como epicentro de la masacre de neuronas que conforma este disparate. Tópicos sin gracia. En estas comedias suele haber algo que las rescata de la total inmundicia total, algún chiste, gag, personaje... En esta no lo encontré. No sabía si me repugnaban más los pijos de Harward o el niño peludo y el casi siempre repelente Brendan Fraser.
Que la divinidad los cuide, a vosotros os dará hora y media de vida mejor si no la veis.

Correcta adaptación, ágil y comedida (porque en realidad el texto se presta para un desbarre importante) de un libro que es un auténtico asalto a la inteligencia. Dan Brawn tuvo suerte, se hizo millonario escribiendo estas cosas. Pero no nos lamentemos, el mundo es así y el dinero, al parecer, no da la felicidad, pero es posible que ayude al autor a la abstinencia. Espero que le pase lo mismo a Paulo Coelho, en realidad no lo leo, pero me molesta hasta ver su careto en una página de una revista que cae circunstancialmente en mis manos a causa del tedio propio a la espera en la peluquería.
Roma es muy bonita aúnque este tipo por poco acaba con ella. Lo más increible son esas persecuciones explosivas sin un solo muerto por atropello; el que conozca esa magnífica ciudad se dará cuenta de que esa es la parte más inverosimil de la historia (más que un San Fermín en Sevilla).
Si la ves con deportividad hasta puede que te eches unas risas.

Tiene toda la razón el compañero ´Hrundi_Bakshi´. El verdadero misterio de Ginostra no está en la trama, conocida de antemano -de hecho el capo mafiosi se permite el lujo de manosear lomos de caballo, sólo, en el monte sin protección y sin inmutarse cuando un coche para y sale un tipo, Keitel, con una pinta de poli que te cagas.

El verdadero misterio es como con estos mimbres -hasta el niño actua bien-y en Sicilia que pretende sin conseguirlo que sea un personaje más, se pueda hacer un bodrio de tal magnitud. Keitel, MacDowell, F.Neri, Asia Argento... aún deben estar buscando al tal Pradal para hacerle una vendeta.
Y es que como buen francés no podía dejar la cosa normal, tenía que dar supuesta trascendencia moral a la história; no vale un relato sobrio,serio, no digo documental -pero sería preferible. Que la tuvo que cagar, vamos.
Un tres porque...no se, por el volcán.

Como la puta vida de nuestros congeneres; quizás no de nuestros vecinos...o tal vez si. Que la historia se ubique en Ucrania (ex República soviética que está saboreando las mieles del capitalismo liberador), y en Alemania (país este que nadie discutirá nos lleva unos cuantos años de adelanto en lo que a desarrollo se refiere), la hace más cruda a nuestros adiestrados ojos. Los conflictos nos afectan en función directamente proporcional a la distancia que de los mismos nos aleja.
Salvo alguna licencia de guión la película es bastante redonda, buenos actores (los dos niños enamoran por su candidez y por la desesperación que se lee en sus preciosos ojos), buena dirección y fotografía y duración justa. Lo único que no me gustó es la licencia de guión que por razones obvias no voy a desvelar.
En la selva capitalista salvaje nuestra única esperanza es mantenernos unidos. Una persona en esta selva es únicamente su medio de vida. Sin él no somos nada. Y que nadie nos engañe con el estupido eufemismo de que somos de la clase media; nosotros al igual que Barbu, Mimma o Caruso somos de clase obrera y nuestra calidad de vida depende de nuestra capacidad de estar unidos, organizados y del salario.
Lo único que nos puede diferenciar de las bestias es la dignidad y el orgullo de que todo lo que tenemos lo conseguimos con nuestro esfuerzo y sin explotar a nadie.

Somos demasiado autocomplacientes. La película está bien construida, pero se asienta en un guión imperfecto y tramposo. En conjunto sabemos lo que se nos quiere mostrar y no sólo lo comprendemos, sino que lo compartimos y nos hace sentir muy, pero que muy bien sentimos lástima por lo que tuvieron que pasar los pobres alemanes de la RDA, como si nosotros disfrutaramos de una democracia plena desde el s.XVII. Sentir lástima por los demás es una de las cosas que más reconforta a los seres húmanos. Es patético, imbécil y amoral, pero es así.
Alguno dijo en su crítica que la STASI empleaba métodos terroristas con los ciudadanos al igual que KGB...Pero nadie comenta que el gobierno español aplica una política antiterrorista que incumple los derechos humanos e incluso nuestra constitución y que todos aceptamos sin rechistar. En la RFA un notable número de miembros de la banda Baader-Meinhof se suicidaron "casualmente"el mismo día. El gobierno -o lo que sea- colombiano se pasa por el forro de las verendas partes, tanto la legalidad internacional como los derechos humanos. ¿Que dice A.I?. Se critica desde occidente que el presidente de Venezuela (por cierto electo -sin pucherazo según organismos como la ONU,nada sospechosos de revolucionarios- y por amplia mayoría), haya cerrado una cadena de tv.que se dedicaba a desprestigiar al gobierno con falacias -según sentencia judicial-; pero casi nunca se dice, y si se hace se comenta como anécdota, que Silvio Berlusconi controla todas la tv.de su país. Privadas y públicas.
Al final todos vivimos en un gran gulag, y nos reconforta que nos dejen decir cosas como esta en internet aúnque mañana nos que demos sin trabajo, la gente se muera de hambre cerca de nuestras casas protegidas por cuerpos de seguridad cuya ocupación real es conservar la propiedad privada de los burgueses y zurrarle a los trabajoadores que defienden sus intereses en una manifestación.
Quiero decir con esto que el sistema socio-político-económico de los llamados países del "Socialismo Real" sean un ejemplo a seguir. Ni mucho menos.
La mejor conclusión que se saca -y muy bien retratado- es la corrupción del poder cuasi absoluto; tentación en la que a no pocos les gustaría caer...