El mayor peñazo al que jamás he tenido la desgracia de enfrentarme en una sala de proyección.

Estaría orgulloso de la revisión que la factoría Disney hizo de Hamlet. Es la mejor película de animación de todos los tiempos.

Hay quien empieza a colocar a Eastwood a la altura de los más grandes. A mí no me convence. Es una buena película, con notables actuaciones, pero como he leido en alguna otra crítica, resulta más fácil hacer llorar que reir, o que mantener la tensión, por eso esta película no alcanza el rango de obra maestra y por eso Eastwood es un buen director que no llega a la altura de Billy Wilder o Alfred Hitchcock.

Supongamos que el cine no es entretenimiento. Supongamos que valorar el cine es tan sólo valorar la naturalidad con la que actúan dos personas ante una cámara, aunque estén representando la historia más aburrida jamás contada. Si usted valora únicamente ese tipo de cosas, póngale un 8, un 9 ó un 10 a esta película.

Para mí en cambio el cine es entretenimiento, así que considero que he sido generoso con la puntuación otorgada a este soponcio.