Haz click aquí para copiar la URL
Críticas de Kinematographos
<< 1 8 9 10 11 16 >>
Críticas 76
Críticas ordenadas por utilidad
8
29 de marzo de 2012
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
"Zelig" es una historia narrada en forma de falso documental sobre cómo reaccionan las clases medias ante un hombre que se convierte en fenómeno de masas (además de mostarse los temas típicos de las películas de Woody Allen: un pasado importante, las trabas del amor hacia una mujer, explicaciones psicológicas que en el fondo no llevan a ningún lado, etc.).

La película es también una buena descripción sobre la sociedad americana de los años 20 y de la Depresión durante los años 30. A pesar de que hay una gran sociedad de clases medias que dispone de derechos y libertades, ésta se distrae con facilidad. La sociedad occidental necesita de distracción, y aparece de cualquier manera, incluso en forma de hombre-camaleón que se convierte en un juguete roto. Y la distracción provoca la pérdida de perspectiva ante la auténtica realidad del momento: que la Bolsa puede estallar en cualquier momento.

En cierto modo, es una buena película porque saca a relucir un tema que se sigue repitiendo en nuestra sociedad. Un 8.
Kinematographos
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
9
14 de febrero de 2012
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tal vez me haya pasado un poco con la nota (sí, yo también he estado dudando de la nota que le iba a poner a "Funny Games"), pero la película me ha sobrecogido por una razón: creemos estar protegidos, cuando en realidad somos como esos huevos que, nada más tirarlos, se rompen con fragilidad. Es una gran verdad, triste, pero cierta. Y también hay otra aún más angustiante: cuando crees que todos tus flancos están seguros, aparece una cosa llamada "azar" o "sorpresa" que te lo fastidia todo.

Creo que es una película que habría que ponerla a los que aún no la hayan visto, o verla después de que haya pasado un montón de tiempo; sobre todo en los momentos en los que el asesino moreno rompe la cuarta pared mirando a la cámara. Eso asusta más que cualquier monstruo o criatura de terror.
Kinematographos
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
9 de noviembre de 2011
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Buena película de Jaume Balagueró y además muy original en cuanto a la forma de contar la historia. Lo curioso es que haciendo cine de esta manera los que actuan no tienen que parecer actores en ningún momento, hay que disimularlo muy bien -se nota que Manuela Velasco parte de su experiencia como presentadora, y ha sabido utilizarla como recurso interpretativo.

Además, en "Rec" si os dais cuenta se pasa de un tipo de terror a otro, y para facilitar un poco los cosas a los cinéfilos del género, y a los que estén interesados en crear una historia de este calibre, he querido señalar tres tipos:

1. Está en primer lugar lo que yo llamo "terror inesperado". Es el más básico, y consiste en contar la historia de manera que se suceda un acontecimiento inesperado tras otro (por ejemplo, cuando te pierdes en el bosque, te pega un susto un idiota, caminas un rato, pero luego aparece el asesino o la criatura). Balagueró sabe usarlo cuando es preciso, y además permite agilizar la historia; pero si se usa demasiado, todo se vuelve predecible. Resumiendo: un susto tras otro.

2. Luego está el "terror de incertidumbre". Los personajes se encuentran en un punto en el que están perdidos, y no saben qué es lo que van a hacer. Se genera un clima de incertidumbre que hay que saber utilizar para que el espectador se sienta sobrecogido; pero puede variar, de manera que hay que jugar con esa incertidumbre que cala hondo en los personajes, y en el espectador, jugando a la vez con las emociones. Parece que en "Rec" es muy realista, no tiene nada de mágico ni de sobrenatural, pero es muy efectivo; hasta yo me he puesto nervioso.

Eso da inicio al miedo, que se experimenta cuando temes perder algo de valor: un objeto, tu novia, la razón, incluso la vida.

3. El tercero y el más sutil, pero poderoso, es el que llamo "terror puro". Llegar a ese tipo de terror se consigue cuando llegas al fondo de las cosas. Un personaje ha entrado en un lugar o situación donde todo es a cara o cruz, y a través del lugar, de la situación, o de la criatura, se saca a la luz el temor más profundo de los personajes, que es a la vez el tuyo propio. Es como cuando Hannibal Lecter te mira a los ojos y sabe lo que no sabes tú o ignoras de tí mismo, y huyes de ello, aunque estás arrinconado. Si se deja invadir por el miedo, el protagonista muere; si lo domina (que es muy difícil), vive. No hay salida, es la hora de la verdad.

Y ese tipo de terror en "Rec"... Mejor no adelanto acontecimientos para los que no la hayan visto. Tan solo atreveos a entrar en ese edificio.
Kinematographos
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8
19 de septiembre de 2011
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Vivimos en un mundo en el que todo tiene dos caras. La guerra representa una de las contradicciones más grandes que existen, ya que, al mismo tiempo que provoca la destrucción, la muerte y la miseria para millones de personas, beneficia, por otra parte, a otros millones, que pueden tener anillos de compromiso, el frigorífico lleno de comida, un montón de ropa, coches, etc.

A partir de la Primera Guerra Mundial se pudo poner de manifiesto esa dualidad, se incrementó aún más durante la Segunda Guerra Mundial -Bertold Brecht mostró mejor que nunca esa dualidad meses antes del estallido del conflicto en "Madre Coraje y sus hijos", la obra teatral más antibelicista que existe, y que recomiendo leer-, y se denunció a partir de Vietnam, en plena Guerra Fría.

En medio de esas dos caras, jugando con ellas, se encuentra Yuri Orlov, un auténtico nihilista, a quien las armas le provocan un gran placer. Viaja de un país a otro vendiendo armas, perseguido por los servicios secretos, mostrando una cara a su familia, y otra a las personas con quienes negocia. Una simple bala disparada por un arma, como en esa secuencia, significa la muerte de un hombre, pero también significa el sonido del timbre de una caja registradora.

Yuri sabe a qué juega y le encanta, ¿pero hasta cuándo durará ese juego? No lo sabe; simplemente se amoldará a las circunstancias, seguirá vendiendo esos "productos", y ya está. Vivimos en una época de aparente paz, cuando en realidad hay muchas guerras encubiertas, y gente como Yuri anda comerciando sin parar.

Como esa modelo de la que se enamoró desde su juventud, una de las caras está cubierta con maquillaje, habiendo detrás sangre y suciedad. Tarde o temprano se descubrirá lo que esconde esa cara, y para bien o para mal, sabremos la verdad.
Kinematographos
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
20 de abril de 2011
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Poco a poco me va gustando el señor Medem, aunque "La ardilla roja" no sea la mejor de sus películas. Obligatoriamente, son películas que hay que verlas "sintiendo", no "asimilando". La diferencia entre ambos tipos está en que el cine de Medem es de sentimientos, muchos de ellos profundos, casi viscerales, y tienes que olvidarte un poco de la mente; otras películas te muestran una historia, y la vas comprendiendo y asimilando.

La película casi muestra a los personajes de Jota y Lisa (Nancho Novo y Emma Suárez-guapísima-) como Calixto y Melibea, sin niguna Celestina. Jota, desesperado porque su novia Elisa le había dejado, intenta suicidarse, pero es testigo de un accidente, y se aprovecha de que Sofía/Lisa está amnésica para volver a tener a alguien a su lado.

La obsesión, a partir de entonces, se convierte en algo que trata de ocultar Jota -mitad poeta, mitad fanfarrón- por todos los medios. Pero... ay, amigo, las obsesiones nunca se pueden ocultar, porque inconscientemente vuelven a aparecer. Y en ese camping llamado "La ardilla roja" tarde o temprano se manifiestan. Pero también el pasado encarnado en Félix (Carmelo Gómez), más obsesionado aún que Jota, y que, a ritmo de Broadway atropella inocentes.

Nunca atrapes a la ardilla, o tendrás un problema gordo. Deja que se escurra por los árboles, que ya vendrá a tí. Este consejo es más o menos lo que nos muestra Medem; la obsesión hacia una mujer es mala independientemente de quién la tenga (sobre todo si eres adolescente, que es cuando más se da la confusión de sentimientos), y lo mejor que uno puede hacer es sentarse y meditar. Ya vendrá esa mujer tan deseada por tí, que estás leyendo esto ahora mismo. De momento, empieza por verla.

P.D: Lo de los "poderes prodigiosos" de Jota sobraba.
Kinematographos
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 8 9 10 11 16 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow