Kate & Leopold

Meg Ryan siempre me ha encantado, la veía muy natural en sus papeles, con un deje de humildad y sinceridad palpable. Aunque debo decir que en esta película la veía un tanto artificial, quizás sea por las operaciones de cirugía estética que creo le han quitado expresividad a su cara y ella estaba mucho más guapa antes.
En cuanto a Hugh.... es que quita el aliento. Se mete muy bien en su papel de duque de Albany fuera de su época, y la ropa le queda de miedo.
En cuanto a la trama algunos dirán que es fantasiosa, pero es que es una película y algo de fantasía debe tener. Al final se nos demuestra que el amor es posible, independientemente de la época, vamos que el amor lo vence todo... y aunque en la vida real muchas veces no es así, de vez en cuando está bien soñar ¿no?
Yo la recomendaría, hace pasar un buen rato.

"Kate y Leopold" es una más de las muchas comedias romáticas que han sido exponente del lucrativo negocio que hace la industria de Hollywood de las fórmulas chico conoce chica, o a la inversa o alien conoce elfa, da igual. No obstante, debe reconocerse que este film de 2001, dirigido sin alardes pero con eficacia por parte de James Mangold, cuenta con el encanto de una pareja protagonista en estado de gracia.

Importan poco los portales temporales y cualquier empeño del argumento en explicar lo inverosímil, pero sí se degusta con tranquilidad la química en pantalla de Meg Ryan y Hugh Jackman, capaces de otorgar dignidad a sus roles y resultar carismáticos.

Nacida para ser vista en sobre-mesa, probablemente una tarde dominical sin nada mejor que hacer, este romance atemporal de folletín de época, resulta ameno y entretenido, no cometiendo el error Mangold de exceder el metraje y ampararse en todo momento y lugar a sus excelentes protagonistas, bien secundados por un correcto reparto.

Amena y fácil de ver.

Mirad es una película magnífica que te llena de esperanza y romanticismo, Meg Ryan en su línea de películas de comedias románticas, que tan bien hace y Hugh no tan habitual en este género hace del galán que nos gustaría que se presentase en la casa de nuestro vecino algún día.

Narra la historia de una chica normal y un conde presionado les ocurre algo maravilloso, que es encontrar 'tu media naranja'. Inevitablemente esta película me ha recordado a 'Algo para recordar' del 93 en la que sale también una simpática Meg Ryan pero no tan 'mandona'.

En definitiva una película entretenida ideal para los y las románticos/as y venga a los que les dieron una mala crítica, no sean tan amargados y rancios que es una película si, quizás un poco 'ñoña' pero muy amena e incluso divertida, ¡suéltense!

Saludos

Tal y como creía, me ha encantado “Kate & Leopold”, no sólo por la sorprendente e ilusionante historia de amor que viven nuestros protagonistas, sino por lo impactante que resulta conocer el día a día de un aristócrata de hace casi 150 años. Con cada generación se progresa un poco más a nivel técnico y científico (sólo hay que observar el cambio que ha sufrido Brooklyn en el transcurrir de esos años), aunque también es cierto que las relaciones sociales y afectivas han retrocedido: Leopold es un caballero que conquista a todas las mujeres con sus educadas formas y su meticuloso comportamiento. Además es un hombre honesto, no le agrada el sistema moderno basado en el engaño y la competitividad comercial en el que se sustenta el capitalismo y que uno debe seguir y apoyar para poder prosperar laboralmente. Para Kate, una mujer moderna de ciudad, no le ha sido sencillo conseguir sus objetivos y tampoco le gusta el uso de la mentira que ejerce su empresa para vender sus productos, pero los tiempos han cambiado, tal vez en demasía en ese aspecto, pues hemos olvidado valores fundamentales como la franqueza, la sinceridad y el honor, que deberíamos recuperar para progresar moralmente.

No aporta nada, todo esta visto, los viajes en el tiempo, las reacciones de ella, las de él, las situaciones cómicas, las dramáticas, todo, el amigo medio idiota, no falta ninguno de los clichés y eso la hace aburrida y sin gracia.
Mañido el tema y la forma de encarar sus conflictos laborales.
Liev Schreiber tiene el personaje más original e interesante de la película pero no aporta nada ya que sus escenas son escasas y están de relleno.
El discurso en el que está sostenido el argumento además de obvio es contradictorio y falaz.
Es una lastima por que la pareja tenia química, pero no supieron escribir algo que saliera aunque sea un poquito de lo ya visto.