Diamante de sangre

Una película que nos muestra la verdad sobre el mundo tan corrupto y corrompido en el que vivimos.
Basada en la realidad del día a día, esta cinta nos traslada hasta un lugar en el que suceden cosas que son tan ajenas a nuestra vida cotidiana que te hacen recapacitar el todo.
Una cinta llena de acción, intriga, amor y mucho dolor.
Edward Zwick, no deja de impresionar con sus trabajos, tras la apasionada e inolvidable Leyendas de pasión y la profunda y emocionante, El ultimo samurái. Esta vez nos deja una huella mas y como en todas y cada una de sus cintas muy buenas actuaciones creando un buen cine.

Una película que muestra la cruda realidad de ciertas zonas de África como Senegal Chad, Tanganica y otras donde los niños son sometidos y se les lava el cerebro para matar y formar ejercitos en manos de organizaciones mafiosas ligadas a los poderosos del mundo Francia EEUU principalmente. Imperdible. VIRGI *****(sobre5)

“Blood Diamond” son diamantes que proceden de las zonas de guerra, derivado del comercio internacional del diamante. El film nos presenta la dura realidad de los países africanos que están en guerra civil, visto desde los personajes de Danny Archer (Leonardo Di Caprio) y Solomon Vandy (Djimon Hounsou). El verdadero enemigo del país de Sierra Leona son las empresas multinacionales de diamantes, que adquieren su materia prima de sus zonas de guerra, mercado negro, con el objetivo de financiar conflictos armados.

El film refleja ser más una versión documental del canal de TV por cable de “History Channel” por su narrativa histórica, su corte humano con la familia de un tranquilo pescador Solomon Vandy y la parte de la confesión del cínico mercenario Danny Archer a la periodista investigativa May Bowen (Jennifer Connelly). Sus imágenes son sumamente impactantes, en especial los combates callejeros y su inesperado final.

La película tuvo un presupuesto de $100 millones y generó por venta de taquillas la cantidad de $172 millones, más $63 millones por la venta del DVD, además recibió 24 nominaciones a diferentes premios en festivales de cine, de los cuales ganó cinco de ellos.

Una película imprescindible para estremecerse ante la inmensidad del mal...y no perder la esperanza. A lo largo de la historia muchos hombres han desatado el mal sobre otros con un salvajismo que está fuera de toda capacidad de comprensión. A veces parece que sólo el cinismo puede servir de refugio. Woody Allen organizaba una de sus últimas películas en torno a la célebre cita de Macbeth "Life is a tale, told by an idiot, full of sound and fury, signifying nothing" En ningún sitio parece haber tanto ruido y furia, y tanta falta de sentido como en África. Estremece pensar que todas las barbaridades que cuenta "Diamante de sangre" han sucedido en la última década del siglo XX.
Es una historia fuerte y está contada con fuerza. Pero creo que algunas decisiones la dejarán fuera del Valhalla de las historias que han mezclado la épica y el romance en la complejísima proporción que concede la inmortalidad.
La película cuenta en 2006 unos hechos de la década anterior que provocaron una tardía reacción occidental concretada en unos acuerdos de 2003. Y en esos acuerdos no se castiga a un "malo" individual. No hay un culpable demoníaco contra el que se pueda armar un buen drama. Habría sido muy difícil intentar resumirlo todo y probablemente no habría salido una película. La solución ha sido reflejar con fidelidad el problema e inventarse un malo concreto y una solución. Quizá no había otra forma de hacerlo, pero esa parte de la historia no sólo no es verdadera sino que además funciona peor y lastra el ritmo de la segunda mitad de la película.
DiCaprio está excelente como cínico ex mercenario dedicado al tráfico de diamantes y eje de toda la trama. Connelly lo tenía más difícil. Su personaje tiene que expresar emociones intensas casi sin diálogos y en muy pocas escenas. Los cambios en su intensa mirada y sus fugaces medias sonrisas consiguen el milagro.

Y por cierto ¿no echa nadie de menos una banda sonora más inolvidable?

La historia nos narra la explotación que sufre la población negra de Sierra Leona por parte tanto del gobierno como de los rebeldes, para extraer los diamantes con los que financiar el armamento que necesitan para mantener sus "luchas".

Aunque la película tiene bastantes fallos que podéis leer en otras críticas, para el espectador estándar cumple su función de entretener y de hacer llegar su mensaje de denuncia de la mala situación que, aunque en este caso se refiera al país de Sierra Leona, podemos decir que se vive en la mayor parte de África donde hay grandes cantidades de recursos naturales.

Recomiendo verla, no creo que le aburra.