El príncipe valiente

El peinado a lo flequillo de Robert Wagner. El Príncipe Valiente tirando piedras a los caballeros andantes. Los cientos de toros sacrificados para poner sus cuernos en los cascos vikingos, ¿o eran de plástico? La toca con la que Sterling Hayden se cubre pudoroso en la cama ante la visita de las féminas. El decorado a tomar por culo en los torneos a caballo. Los extraordinarios y fascinantes interiores góticos de los castillos. Valiente brincando a la cortina desde las escaleras para esconderse. Janet y Debra declarando sus amores secretos como niñas de instituto. El Caballero Negro tratando de pinchar con su lanza a Valiente subido a un árbol. Las flechas persiguiendo a Valiente. James Mason con su espada de madera repartiendo estopa. Victor McLaglen y el campeón del mundo de los pesados Primo Carnera irreconocibles ambos de vikingos. Los paisajes con castillos. El Rey Arturo y los caballeros de la Mesa Redonda despachando en sus butacones. El ambiente continuo de entusiasmo y fantasía... ¡Y alguno dice que se duerme! ¿De verdad? Pues vete a acostar... ¡Confiésalo, tú eres un matao!

´Tras ver el otro día una peli del sundance ese, que ni fu,ni fa, ni todo lo contrario, y con la clásica sensación de vacío temporal tras perder dos horas en no se qué bien, pero todo muy profundo, como los peces abisales, me endiñe esta peli, y me acosté con el ánimo cinéfilo recobrado. en todos los aspectos, fANTÁSTICA.

Peliculón y una pena que no haya mas gente que la conozca. De vez en cuando te encuentras con películas buenísimas y que están infravaloradas o que les han dado poca publicidad. Esta es una de ellas y es una pena. Tiene de todo, aventura, romance, intriga ,etc y un duelo a espada inolvidable, inusual para aquella época, no solo por su duración sino por su espectacularidad. La volveré a ver una y otra vez sin cansarme y a enamorame de las chicas que lleven el pelo como Robert Wagner.

Correcta película de aventuras medievales al más puro estilo clásico de Hollywood, pero con resultados discretos a causa de su previsibilidad y, sobre todo, de un enredo amoroso que entorpece demasiado la trama. Además, algunos de los caballeros del Rey Arturo ni siquiera se ajustan a la leyenda.
Aun con todo, merece la pena descubrir por ejemplo a Sterling Hayden alejado del cine policíaco o a un James Mason que realmente se convierte en el protagonista.
Mi nota: 6,4

Cine de aventuras con caballeros de la corte del Rey Arturo, vikingos, traiciones, fidelidades, amores y mucha acción y entretenimiento como nos acostumbra Henry Hathaway con un gran James Mason haciendo de malo.
Gran película que se encuentra a un escalón por debajo de la grandiosa "Los vikingos" de Richard Fleisher pero que te mantiene atado a la silla y disfrutando como un niño.
La banda sonora es solemne aunque peque en determinados momentos de excesiva.