Así era Pancho Villa

Al cumplirse 100 años del atentado que, el 20 de julio de 1923, le costó la vida al líder revolucionario mexicano, Pancho Villa -a quien el pueblo mexicano continúa reverenciando como uno de los grandes líderes de su historia-, bueno es volver a recordar la suerte de curiosas, interesantes, y hasta insólitas anécdotas, que se cuentan acerca de su vida, y que dan luz sobre la clase de hombre que fue, José Doroteo Arango, quien se hizo llamar, Francisco Villa, para despistar a las autoridades y proteger a su familia.

Durante un buen tiempo, el director Ismael Rodríguez -quien se hiciera célebre con la película, “Nosotros los Pobres”- se dedicó a recopilar con excombatientes y personas que conocieron o convivieron con el caudillo, aquellas vivencias dignas de preservar… y el material encontrado fue tan relevante, y sobre todo, tan abundante, que se convirtió en una trilogía cinematográfica que el propio, Rodríguez, produjo, dirigió y adaptó, con la colaboración de, Rafael A. Pérez, José Luis Celis, Vicente Orona Jr. y Ricardo Garibay.

La primera película fue: <<ASÍ ERA PANCHO VILLA>>; a ésta seguiría, “Pancho Villa y la Valentina”, terminando la trilogía con, “Cuando ¡Viva Villa! es la muerte” (1960). Cada filme arranca con la voz de Pancho Villa (a quien interpretará muy gratamente, Pedro Armendáriz) mientras vemos una larga toma de lo que parece los objetos arrumados de un museo y, en un zoom de acercamiento, terminaremos viendo la cabeza de Pancho Villa, la cual le cercenaron dos años después de haber sido asesinado y tras haber sido desenterrado su cuerpo -según sostiene el escritor e investigador, Paco Ignacio Taibo II- por un general que apostó que se robaría su cabeza y luego la guardó un tiempo bajo su cama hasta que fue enterrada cerca de Parral.

Rodríguez, divide su película en siete segmentos y, entre ellos, son interesantes los titulados: ¡No matarás!, El Hereje, Las mujeres de mi general y Mi coronel el sr. Cura; y, esto sí, resultan impecables y encantadores los restantes: ‘Boda Macabra’, sobre la resolución salomónica que asume cuando uno de sus hombres abusa de una mujer y asesina a su marido. Magnífico resulta el segmento: ‘¡Que lindo pelao!’, cuando un oficial enemigo es hecho preso, y sus actitudes y respuestas impactan al general Villa.

El filme se cierra con un encantador y más largo segmento titulado: ‘Jesusita en Chihuahua’, en el que, Pancho Villa, se verá en líos por una suerte de Carmen o Valentina (la muy bella, María Elena Marqués, quien además interpretará, con fuerza y encanto, tres populares canciones: “La Bola”, “La Cama de Piedra” y “El General”). Con ellos, Carlos López Moctezuma (Fierro), Humberto Almazán (el secretario Luisito) y Miguel Manzano (el coronel-cura), entre otros, consolidan un filme que resulta bien entretenido, al tiempo que nos da la ocasión de acercarnos un poco más a la vida de uno de los grandes caudillos de América Latina.