El parking del Diablo

Homenaje descarado a la cojonuda "El diablo sobre ruedas", ópera prima de Steven Spielberg, pero ambientada en el interior de un gigantesco aparcamiento subterráneo, donde un siniestro (y molón) todoterreno se dedica a putear a un bróker a la salida del curro.

El argumento se va mezclando con la relación personal con su novia y el negociete canallesco que acaba de realizar el amiguete, y mientras va transcurriendo la pelicula te van surgiendo dudas: ¿tendrán algo que ver esas historias paralelas con el tema del conductor psicópata? ¿Sabremos quien estará al volante y el motivo de su comportamiento? ¿tendrá razón de ser esa nota tan baja en filmaffinity?

Hay más guiños a la peli de Spielberg: un Plymouth de color rojo, exactamente igual al que conduce Dennis Weaver, y un tipo caracterizado igual, aparecen en los primeros diez minutos pasando por allí (qué cachondo es el director), el prota se apellida Weaver (encima recochineo) y los bocinazos del todoterreno juraría que están sacados, directamente, de la pelicula original de 1971.

Entretenida, que no es poco.

Me esperaba poco cuando la ví, pero hay que decir que pese a su bajo presupuesto tiene muchos aspectos positivos:

* yo no entiendo de cine, pero las escenas con acción me parecieron muy bien rodadas
* metraje ajustado, ideal cuando lo que cuentas no da mucho de sí
* el protagonista está estupendo, muy buena interpretación
* el guión es coherente, no detecté incongruencias llamativas y las reacciones de los personajes, lógicas
* las situaciones a las que se enfrenta el prota son variadas pese a lo limitado de la trama: un parking, un vehículo acosador, un hombre perseguido.

Es una lástima que su "aire de telefilm", con una imagen poco nítida, pueda echar atrás a alguien a la hora de decidir su visionado, porque como thriller está a la altura de muchos productos con más ínfulas.

Película sorprendentemente entretenida cuyo mayor mérito es su honestidad: sólo quiere entretener. Y lo consigue.

En un espacio cerrado y claustrofóbico el protagonista se las apaña para sobrevivir hasta que se abra el garaje mientras su acosador lo persigue y atormenta.
Sin pretensiones de ningún otro tipo, te mantiene en vilo mientras te preguntas quién de los posibles sospechosos puede estar acosando en el garaje al protagonista. ¿El posible amante de su mujer? ¿El ex-novio de su amante y compañera de trabajo? ¿Un delincuente común? ¿Su jefe metido en asuntos turbios? ¿Algún mafiosillo que no quiere cabos sueltos?
El guión es entretenido y con bastante acción. Me quiere recordar vagamente a las pelis de Walter Hill: acción y diversión. Cero complicaciones existenciales.

Bien dirigido, con mucho ritmo y con unos planos bastante buenos. Tiene, no obstante, cierto tufillo a telefilme de sobremesa que le hace perder puntos.

El protagonista se merienda él solito todo el film y lo hace francamente bien. Convincente cuando muestra miedo, decisión o determinación.

En cualquier caso, una sorpresa agradable y recomendable para esos días en los que sólo quieres entretenimiento y acción.

Lo dicho, aún me pasa poco.
Me pasa por hacer caso a algunas críticas.
Y no escarmiento, digo voy a darle una oportunidad
Por lo que dicen, pero que va.
La película es mala con ganas.
Las situaciones son de traca.
El argumento para mear y no echar gota.
Las actuaciones pésimas.

Lo dicho, mala mala mala.
Se hace larguísima pese a su corta duración.
No perdáis el tiempo, huid de ella como de la peste.