Aunque quiera no puedo considerarla una buena película, porque es aburrida y tan típica que da pereza verla entera. Es muy, muy, muy ochentera, pocas películas pueden superarla en cuanto a eso. Quizás la "La chica de rosa" (1986) o "No puedes comprar mi amor" (1987), pueden determinarse como obras superiores en cuanto a ambiente de la época en la que cualquier truño de argumento servía para hacer una película. Fue una época estupenda, pero muy sobrevalorada y la adoro, pero madre mía! Se ve cada film de baratillo desde mediados de los ochenta hasta inicios de los noventa (ahora también, pero no quedan tan casposos). El argumento es simple y algún fallo de "racord" tiene al mostrar una carta donde no debiera estar. Sus actores han desaparecido con la década que vivieran (salvo la Preston que debe hacer mil y un favores para seguir en el cine con lo limitada que siempre fue). Francamente, yo no la vería y trataría de no recomendarla. Hasta su final es ridículo... Al menos se ven mujeres realmente guapas, aunque hablando parezcan gilipollas (aunque ver la peli en modo latinoamericano no ayude a creerlas inteligentes).